lunes, 1 de febrero de 2010

SAN CRISTÓBAL-VENEZUELA: HERIDO VENEGAS Y TRIUNFO DEL REJONEADOR RESTREPO / Por Ruben Darío Villafraz

El colombiano Juan Rafael Restrepo


Con tres toros potables cierre de feria con más pena que gloria

TRIUNFO DE RESTREPO CON

CORNADA ESPECTACULAR PARA VANEGAS


Rubén Darío Villafraz
31 Enero 2010
SAN CRISTÓBAL (Enviado Especial).- El ultimo capitulo de la Feria de San Sebastian no será recordado a la posteridad por el triunfo legitimo de toreros, ni mucho menos de los toros. Lo será, pues en la arena hubo un torero herido, y trofeos que se entregaron en el curso del mismo, que poco o nada fueron reflejo de la realidad vivida en la arena.

Toros descastados de Don Jerónimo Pimentel, vacíos de bravura y si más bien genio que desarrolló peligro paulatinamente. De esta no se pudo salvar el fornido torero de Seboruco, César Vanegas, quien en el curso de la lidia de muleta del que abrió plaza, literalmente se lo echó a los lomos tras avisarle en los tercios previos que por el pitón derecho llevaba «jiribilla».

Los instantes mientras el torero era izado, recogido, volteado y pisoteado en el ruedo fueron eternos, y el clamor general era de preocupación por el costalazo que se había llevado el mencionado espada. Tuvo la dignidad de pasaportarlo, tras, y de la enfermería no saldría, pues el trance en los pitones había hecho pupa en sus carnes.

La corrida quedaría en un mano a mano insípido. Frialdad en la plaza y en los desolados tendidos.

Bolívar echó mano de sus recursos lidiadores con su primero, un animal soso y parado, al cual no se dio mucha coba el torero. Le despacho con celeridad, lo cual se le agradeció.

Su segundo, un jabonero de bella estampa, le dejo estar a media a gusto. Le llevo templado y mandón por ambas manos, en los momentos que se dejo el toro, el cual se acostaba por ambos pitones y exigió firmeza del torero caleño. El bajonazo con el que se alivió desmeritó una oreja con tinte barato para una plaza como esta, lamentablemente en horas bajas como se ha visto en esta edición.

Ante el que cerró lidia a pie, el cual correspondida en segundo lugar del lote a Vanegas nuevamente vimos al Bolívar del rodaje ante ganaderías duras en España de la mano de su apoderado, pero ni el torero tuvo ángel frente a los pitones, ni anovillado ejemplar fue gran cosa como para levantar el animo de los tendidos.

Pedro Gutiérrez “El Capea” pudo haber tocado pelo ante el ultimo de su lote, donde se le observó con ganas y deseoso de triunfo, aun cuando para ello privó más el toreo a la galería que el básico.

El animal, que se dejó por el pitón derecho fue aprovechado por la voluntad de un torero quien estéticamente torea de forma singular, como si tuviera tortícolis en el cuello, con los hombros y no con los brazos, elementos estos que contando un maestro como su padre han pasado inadvertidos.

Pinchó y la oreja se fue en cada uno de sus cuatro intentos. En su primero, un castaño con genio y peligro, hizo lo que pudo, incluso llevándose una voltereta, del que afortunadamente salio ileso. Tras una estocada defectuosa, se le silencio tras un aviso.

Cerró plaza el rejoneador colombiano Juan Rafael Restrepo, jinete quien en el contenido de su labor poco nuevo dijo y si más bien, utilizó el populismo de los rejones clavados a toro pasado sobre la grupa, así como las cabriolas “fuera de cacho” para levantar los ánimos de una adormilada concurrencia, quien tras ver como caía fulminante el toro tras un rejonazo contrario y caído, le pidió las orejas, el cual incompresiblemente por partida doble concedió un palco presidencial totalmente poco entendido de lo que es el toreo a la jineta en la actualidad.

Cabriolas y rejones a toro pasado, el argumento del triunfo del debutante rejoneador colombiano, quien salio en hombros tras el corte de dos orejas.

Dos orejas, que equitativamente repartiríamos, una para Restrepo (y justa) y otra para su bella compañera, la actriz Rudy Rodríguez, quien los años no pasan por ella, adornando con su belleza, la barrera de sol donde se encontraba.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de Toros Monumental de San Cristóbal. XLV Feria de San Sebastian 2010.
Domingo 31 de enero. IV y última corrida de feria

Con poco mas de un tercio de plaza (aproximadamente 9.000 personas) se han lidiado seis toros de SAN JOSÉ DE BOLÍVAR (Jerónimo Pimentel), terciados de presencia, descastados en su conjunto, desarrollando peligro en el ultimo tercio, y uno de LOS ARANGUEZ (7º) noble y con recorrido.
Pesos: 460, 441, 440, 437, 442, 436 y 450 kilos.

CESAR VANEGAS
Burdeos y azabache
Leves palmas en el único que estoqueó

LUIS BOLÍVAR
Purísima y plata. Silencio, una oreja y palmas.

“EL CAPEA"
Verde aceituna y oro. Silencio tras un aviso y palmas.

JUAN RAFAEL RESTREPO
Vestido corto campero
Dos orejas y salida en hombros
INCIDENCIAS: En la brega Gerson Guerrero y en la vara Alirio Secundino Ramírez.


*** Vanegas recibió una cornada de tres trayectorias a nivel de la axila derecha, de pronóstico menos grave.

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