domingo, 18 de julio de 2010

Y el triunfador de Pamplona es... Julypiés / Por José Ramón Márquez

Toro-Botero, o globo cautivo, para armarla... gorda



José Ramón Márquez
Tengo entendido, según me comenta un señor que se fija mucho en esas cosas, que han decidido por ahí que July es el triunfador de Pamplona. Una vez más, si la realidad no coincide con los deseos, pues se ajusta la realidad y ya está todo solucionado. Además que es de justicia que había que compensar al pobre Julián por el enésimo robo del que ha sido objeto el hombre y, total, como de esto de los premios a los cuatro días ya no se acuerda ni el premiado, ¿qué más da Juan que Blas?
Si volvemos un poco la vista hacia atrás veremos que este July 2010, que no es más que un daño colateral de la ausencia de Tomás, va siendo el triunfador indiscutible de todos los sitios por los que pasa. En Valencia entusiasmó a la crítica con sus grandes faenas a unos toreznos gordos como gochos y tontos como Abundio, derrotando a Ponce en el aniversario de su alternativa ante tan pavorosos enemigos.
En Sevilla dictó sus lecciones de julymaquia ante unos toros tontos como Abundio y gordos como gochos y la sensible sombra de señoritos y maestrantes -cada maestrante tiene su librante- con sus americanas azules cruzadas y sus botones dorados, se rindió a sus formas, que Sevilla, si algo aprecia, es el arte y la finura, y fue entronizado como triunfador.
En Madrid se trajo sus corridas de los gochos de Abundio y se apuntó a los de Tomás y fue objeto del vil latrocinio de las orejas, hecho que tantísimo pesar ocasionó en los periodistas; además pegó unos julypiés que temblaba el misterio cada vez que marraba la estocada. En homenaje a tanta dedicación fue también proclamado como triunfador, que ahí es donde se nota lo que le quieren sus coleguis.Y ahora en Pamplona, que algunos nos extrañamos porque le tocase matar al toro de Botero, al toro gordo y fofo, al toro de la obesidad mórbida, alimentado con ganchitos, piruletas y petit-suisse en vez de con habas y forraje, pues también expoliado en orejas, pero triunfador por encima de todo y de todos, como debe ser.
Claro que, pensándolo un poco, entre la afición de July a las orejas y a matar ganado con más aptitud cárnica que casta o bravura, ya podría alguna asociación de Carniceros, Salchicheros y Detallistas de Productos Pecuarios instituir el prestigioso premio ‘Oreilles de Charolais’ para compensar los robos de que viene siendo objeto y así, en aquellos lugares donde fallen el malhadado presidente, su nefando asesor o el ignaro público, apareciese ante una señal de los críticos fetén o del propio Don Julián, un jifero perfectamente ataviado con mandil y gorrito blanco y portando el galardón que le sería entregado en desagravio de tanta inquina, mala baba e ignorancia como le rodea.

1 comentario:

  1. Pensandolo objetivamente, y expresando que soy Tomasista; ¿José Tomás no mata tambien "Boteros"? El Juli no es una excepción. Pienso yo no?.

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