David Mora
Madrid, 12 de Diciembre de 2010 / Blog Del Toro al infinito
A la jornada cultural taurina celebrada en Santa María la Real de Nieva le siguió otra práctica en la ganadería del Marqués de Quintanar, de titularidad compartida por Ricardo Muñoz, cuyas reses entre pastos y encinas de los términos de la Higuera y Espirdo a tiro de piedra del Acueducto de Segovia.
Finalizada la cacería de perdiz a satisfacción de los exigentes escopeteros, y calmado el apetito estimulado por los aires camperos gracias a la gentil hospitalidad ofrecida por Don Alfonso Gallego Chávez, Marqués de Quintanar, y su familia, saltó a la arena de la placita de tientas, el matador David Mora, -tan admirado y respetado en esta casa- auxiliado por los banderilleros el Chano y el Puchi, para lidiar un toro cinqueño y cuajado.
No le serviría de mucho al ganadero este mansito y rajadete, con sangre “nuñez” - vía de procedencia del hierro de Carmen Giménez García- el cual aligeró el trabajo del picador Rafael Agudo del que salío de najas en la segunda entrada trás un soberbio puyazo anterior. Sin embargo, por su nobleza, sí que pudo ser aprovechado por los lidiadores de cara a su preparación invernal.
La brega y banderillas de Puchi y Chano fueron de primera, y el matador David Mora ofreció el poderío y calidad de su toreo del que hizo gala pasada temporada, anunciadora de su despegue definitivo en la próxima campaña.
Esperando al torero
David Mora
El galán
Primer tercio
Buena vara de Rafael Agudo
La braga del Puchi
El Chano a lo suyo
Hipnosis por el Chano
Último tercio por David Mora
El Marqués de Quintanar, el matador David Mora, el picador Mario Herrero,
y los banderilleros, Chano, y Puchi
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