La clase política peruana en los toros / Por Pedro Abad-Schuster

 Plaza de Toros de Acho / Lima

 Bitácora de América

La clase política peruana en los toros

Pedro Abad-Schuster

Ahora es Ecuador, Venezuela, México y Perú – los países taurinos americanos –  que enfrentan peligros en la continuidad de la Fiesta de los Toros. Los públicos que asisten a centenares de corridas cada año – más de mil entre los cuatro países – están a punto de dejar de hacerlo si es que la administración pública y gobierno federal de sus respectivos países así lo decide. En México son las iniciativas de ciertos congresistas que cuestionan el espectáculo, en Venezuela son los poderes absolutos que se concentran en pocas manos al más alto nivel, en Ecuador son las consultas populares para suprimir los espectáculos que involucran a “animales vivos que mueren causando la diversión de los espectadores” ….y ahora en Perú con una situación sui generis que involucra la realización de la próxima Feria del Señor de los Milagros en el mes de noviembre 2011.  

En Lima nuestro espectáculo cultural de los toros y el toreo, originario de España y enraizado en nuestra cultura nacional  depende de las decisiones de señores de cuello y corbata. Ya no estamos hablando de autoridades o comisiones taurinas  que presiden las corridas y que son nombradas a dedo por alcaldes o autoridades  acostumbrados a “negociar de todo, en todo y sobre todo”. Ahora hemos llegado al más alto nivel en donde el partido de gobierno a punto de dejar el poder formal por expirar su mandatos, se inmiscuye en actividades empresariales en aras del concepto de la planificación estratégica como excusa, no como razón valedera.

El tema central es que la propietaria de la Plaza de Acho (una entidad pública llamada Beneficencia de Lima)  no puede convocar todavía a licitación para elegir la nueva empresa organizadora de la próxima Feria del Señor de los Milagros. Es decir, estamos en un limbo, no tenemos empresa a cargo de la Plaza de Acho en los momentos de elaborar este comentario. El nuevo organigrama del Ministerio de la Mujer –ad portas de cambiar autoridades –  ya no incluye a la Beneficencia de Lima – propietaria de Acho – , es decir ya no va a depender o reportar como hasta hace unos días.  Ahora será la Municipalidad Metropolitana de Lima – que acaba de estrenar Alcaldesa – la que maneje  el asunto de la Beneficencia de Lima, sin que hasta la fecha tengamos noticias o avances para el abonado de Acho, porque no tenemos empresa de Acho (pues su período expiró con el viejo año), ni tenemos  fecha de convocatoria para la licitación de la nueva empresa o empresario de Acho, ni se sabe cómo organizará y articulará todo esto la Municipalidad de Lima, ya no el Ministerio de la Mujer.

Sin fechas definidas para nada, veo una luz al fondo del camino, sin embargo,  y es que el problema expuesto en que estamos los aficionados taurinos de Lima bien se puede convertir en una oportunidad para erradicar malas prácticas como las ocurridas en la Feria de Lima desde hace 5 años. Reflexión final. Sueño que los congresistas peruanos sean personas que no necesiten un sueldo o remuneración, que tengan título universitario, que sean personas probas a carta cabal, que su devenir se enmarque en planes estratégicos de largo plazo. Sueño que las elecciones que envisten de poder formal los cargos públicos no involucren a los tradicionales personajes de la llamada clase política. Porque cuando un pueblo no es tan educado, repercute en que no entiende bien lo que lee, lo que escucha o lo que le dicen,  es proclive a seguir creyendo lo que le prometen, un círculo vicioso que es la de nunca acabar.

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