Del toro al infinito: Jaime González El Puno recibe la Insignia de Plata del Círculo Bienvenida

Fernando Claramunt impone el galardón a El Puno
/Fotografías La Loma/

Círculo Taurino

Amigos de la Dinastía Bienvenida

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Jaime González El Puno

recibe la

Insignia de Plata

"...Doy gracias a Dios por haber sido torero y me siento orgulloso de serlo..."

Fernando Herrero entrega el Diploma de Otorgamiento

Madrid, 17 de Noviembre de 2011 / Dinastía Bienvenida Blogspot

Brillante y entrañable acto ha sido el que se ha celebrado hoy tras un fraternal almuerzo en el “Cuarto Bienvenida” de Madrid, donde el Círculo Taurino Amigos de la Dinastía Bienvenida ha otorgado la Insignia de Plata al que fuera ejemplar matador de toros colombiano Jaime González El Puno, que le fue impuesta por el presidente Fernando Claramunt, siendo el directivo Fernando Herrero el que le entregara el correspondiente diploma acreditativo.

El vicepresidente 1º Juan Lamarca abrió el acto dando la cordial acogida a los presentes en nombre de la asociación bienvenidista desde el recuerdo a su perpetuo presidente de honor Ángel Luis Bienvenida, y a los demás integrantes de la gloriosa dinastía torera, como portadores que fueron de los más altos valores de la torería. Virtudes y cualidades que confluyen en tantos otros toreros forjadores del presente y pasado de la Fiesta Nacional, y que impulsan en renueva día a día el afán del Círculo Bienvenida de tributarles reconocimiento como uno de los cauces de homenaje y defensa del toreo.

Un claro ejemplo de de los que han contribuido a prestigiarlo es el matador de toros de la talla profesional y humana del bogotano Jaime González El Puno, dijo, que supo granjearse el triunfo en los ruedos y el respeto y amistad fuera de ellos, optando por establecer un estandarte colombiano al contraer matrimonio con española y formar una familia ejemplar que le admira y adora.

Jaime González El Puno contiene la emoción

Muy fundadas y razonadas fueron las sucesivas intervenciones de las personas que le dirigieron sinceras y emotivas muestras de cariño y respeto, por su excelente trato personal y pro su trayectoria profesional.

Así fueron repasando hechos y sentimientos, desde Vidal Pérez Herrero el impagable editor de la Agenda Taurina, recordando la presentación como novillero de El Puno en España, en la plaza de Badajoz, aquel lejano año de 1969, pasando por su triunfal alternativa en Valencia por Diego Puerta y El Cordobés, para llegar al determinante y decisivo del festival benéfico en Las Ventas de Madrid, en Marzo de 1971, organizado por Dña. Carmen Polo de Franco, donde toda España pudo vibrar a través de aquellas pantallas de TV en blanco y negro, como un colombiano salía por primera vez a hombros por la puerta grande de Madrid. Ello le permitió confirmar alternativa a lo grande en Sal Isidro con Santiago Martín El Viti de padrino

y Dámaso González de testigo.

Su amigo entrañable Luis Perals, venido expresamente desde Almería donde reside, le agradeció su amistad y mostró su orgullo de conocer a un torero de su talla que se mantuvo más de dos décadas en activo, aunque en España toreara por última vez en 1985 para continuar en Colombia seis años más con dictando magisterio desde su oficio y veteranía para abrir las ilusiones y esperanzas de otros aspirantes colombianos que cristalizaron más tarde en la figura de César Rincón y toreros muy dignos para hacer campañas en las temporadas españolas.

El joven colmenareño Máximo Pérez, motor con su padre de la Peña Taurina El Rescoldo, le hizo una entusiasta glosa con el perfecto perfil de su amigo Jaime. Le siguió el veterano Fernando Claramunt, fundador del Círculo Bienvenida en Barcelona, que no ha tenido inconveniente en trasladarse para darle un abrazo a El Puno y obsequiarle con una caricatura del torero colombiano de la colección del recordado gran artista catalán Fernando Vinyes.

Dos Fernandos, Claramunt y del Arco, absortos con las palabras de El Puno

Un torero con sentimientos....

Dio gusto escuchar el relato de Victoriano Valencia, cuyo fiel y decisivo apoderamiento cimentó una inquebrantable y ejemplar amistad entre dos caballeros.

La altura intelectual y humana salió a flote para destacar el fenómeno hispano como marco natural donde se desarrollan los vínculos de raza, lengua, fe, y tauromaquia, que hacen posible que personas como El Puno se vistan de luces para enfrentarse al toro, o que se arraiguen en España para fundar una familia.

Tras imponerle el galardón honorífico y recoger el diploma de otorgamiento, El Puno dirigió emotivas palabras de gratitud al Círculo, todos los presentes, recordando a los toreros de Bienvenida, a su familia, a su patria colombiana, desde su sentimiento español.

Doy gracias a Dios por haber sido torero, dijo, y me siento orgulloso de serlo. Mi profesión, continuó me ha permitido triunfar en las dos orillas ante lo que siempre soñé, el toro, siendo mi mayor triunfo el de mi familia y mis amigos, para terminar exclamando Viva España y Viva Colombia.

El colofón artístico, en honor de Jaime González El Puno, lo puso la persona que encarna la torería de forma tan natural como los versos que brotan de su sentimiento torero, Miguel Flores. Su obra, El Camborio, brotó de sus labios, y sus brazos dibujaron lances al viento, meciendo con pasión su temple poético.