jueves, 15 de marzo de 2012

LOS PODEROSOS SIEMPRE GUARDAN UNA DUDA SECRETA / Aquilino Sánchez Nodal





LOS PODEROSOS 
SIEMPRE GUARDAN UNA DUDA SECRETA
 
Aquilino Sánchez Nodal
Madrid, 15/03/2012.-Las presuntas figuras del toreo andan en eso de querer equiparar sus ingresos por derechos de imagen con los futbolistas más cotizados. Los famosos integrantes del GG no están bien informados y quizás estén cometiendo otro grave error en detrimento de las corridas de toros. Posiblemente, estos bienaventurados no les importe la repercusión de sus malas decisiones o les salga gratis como la patosada quiteña. 

Ningún jugador profesional de fútbol del mundo contrata sus derechos directamente con el canal de televisión que retransmite los partidos. El protocolo lo firma un colectivo, Federación, Liga Profesional y Clubes. 

No me cabe la menor duda de que los matadores GG tiene que recibir su parte en los beneficios que genera su imagen. Con esta ecuación es igualmente lícito que cobren todos los demás actuantes en una corrida de toros, los matadores del FF y del BB, los subalternos por su cuenta, los ganaderos, los médicos, los veterinarios, los mulilleros, monosabios, el pintador de rayas, timbalero y clarinetistas, el airoso joven portador de estandarte con la ficha del toro que saldrá al ruedo, la banda de música, los "colaos" en el callejón, los matarifes, el personal de plaza, areneros, porteros y acomodadores de tendido, vendedores de gaseosa ... hasta el espectador de la contra del 8 que aparece en pantalla cada tarde. 

Todo este asunto no puede ser verdad a no ser que estén implicados los empresarios para sacar su beneficio con ayuda de la ASM o de quien se ponga a tiro. Siempre que en el toro se gana honradamente o se defrauda un euro, es de los aficionados. Cuando se den cuenta los excluidos de este tinglado se armará "la Marimorena" y la fractura de la fiesta. La intención del GG es permanecer el más tiempo posible arriba del negocio, en el medio treinta metros de porquería, y debajo todos los demás toreros. 

Se entiende que los "guais" pretenden contratar sus derechos de imagen a espaldas de la persona que se juega pérdidas o ganancias organizando corridas de toros en un inmueble propio o alquilado. Solemne estupidez. Los ingresos por todos los conceptos que genera la explotación de la plaza deben estar autorizados y aceptados por los responsables jurídicos que administran la sociedad contratada por la Comunidad. El pago de los derechos se entiende por el espectáculo completo. La empresa es quien contrata con el canal que retransmite y la que reparte el porcentaje pertinente con los actuantes. Bien que algunos del GG manden a negociar a zascandiles especialistas en pillaje, como pueden ser la ASM o su apoderado. Ni exclusivas, ni presiones podrán sacar más "leña" que lo que reciba la empresa por permitir que se televise el festejo. 

Las retransmisiones de corridas de toros son imprescindibles para la continuidad y mantenimiento de la fiesta. Esto es suficiente razón para que se pongan a trabajar, por una vez para resolver una cuestión importante, los vividores de las asociaciones taurinas. 

El módulo está inventado. Se tienen que elaborar un documento para la distribución de los pagos por televisar en los mismos términos que se detallan los honorarios del convenio. Matadores de Toros del Grupo Especial en Plazas de Toros de Primera: Tanta "pasta". En Plazas de Segunda y En las de Tercera, en las de cuarta ya les vale tanta cara. Lo mismo para los del Grupo "B" y los del "C". Sin diferenciar canales. El Jefe de las cuadrillas, el matador, será el que distribuya los derechos de imagen a los actuantes de su cuadrilla. 

Puestos a renovar y mejorar, que el matador contratado cotice a la Seguridad Social y retenga el IRPF de sus empleados, la cuadrilla. Por esto debe empezar la reconversión para salvar la fiesta y garantizar los puestos de trabajo del sector. En forma sencilla, firmar un Contrato de Servicios con el matador. Este que subcontrate a los empleados que necesite para el desarrollo de su actividad y cumplir profesionalmente con la empresa contratante. Otra cuestión es el resultado artístico. Mi amigo y empresario taurino, Felipón, opina que estos cursis del GG no dan un pase a un burro de cartón. 

Por ora parte, a estas alturas del lío económico taurino y de ruina nacional, los toreros acomodados se declaran seguidores de la táctica de José Tomás para no saturar y devaluar la fiesta, encareciendo o eliminando las corridas por la tele. Es una pena que estos modorros no imiten al Gótico en sus naturales, sus arrimones y sobre todo, en llenar las plazas de toros. Lo peor es que los empresarios actuales piensan en forma medieval, solo existen, amos y vasallos. Tragan sapos con los caprichos de los poderosos y tratan con desprecio a los humildes. 

La fiesta está en naufragio. ¡Sálvese quien pueda!. 

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