"...Me esperaba que todo iba a ser peor. Me equivoqué en esto y en los confirmantes de alternativa, que todos han estado bien sin romper, pero bien y que merecen repetición en Las Ventas..."
San Isidro corta la hemorragia
Ricardo Díaz-Manresa
Pues sí, la corta. Afortunadamente. El enfermo no está curado, pero algo es algo. Este año Madrid se presentaba como muy especial, muy complicado, muy difícil. Bajaron los abonos. Cundió la tristeza. Los carteles no eran muy allá. Los que sacaron las 25 tardes, con Prensa y Beneficencia, las ofrecieron más que nunca amigos y conocidos para ahorrarse parte de la inversión. Había una hemorragia. Como Madrid, rompeolas de todos los toreos, se venga abajo, esto no hay quien lo pare.
Se equivocaron muchos. También yo. Pensaba que iba a haber bastante menos público. Pues ví el mismo que el año anterior a pesar de que esta feria ha sido la peor que recuerdo en la climatología. Frío y lluvia tantos días y siempre viento. Mucho viento. Viento a todas horas. Pues el público respondió. Había ganas de toros. Los 2717, creo recordar, abonos que se quedaron en taquilla fueron adquiridos muy troceados y en gran parte por personas que pensaron que este año sí había entradas sueltas, que podían pasar por taquilla y que se acabaron las angustias de años anteriores en la que desechaban la idea de ir a los toros porque no había posibilidad.
Dice Uranga, que está muy pesimista, que esto va para abajo. Mira José Antonio : que te has pasado una vida larga y superespléndida –quien la pillara- con los toros, como heredero de parte del Imperio Chopera, en la que Manolo fue el gran rey. Que te has hecho rico con esto o aumentado la riqueza que te legaron los dos mayores, don Pablo a la cabeza, que Dios tenga en su Gloria. Como a tu padre. Como a tu hermano Javier, buen ser humano.
Que no vengas a hacer ahora el Balañá, hijo de don Pedro el Grande, y padre de Pedrito, que se ha cargado el espectáculo en Barcelona. O al menos ha contribuído decisivamente. El Grande puso a Barcelona en el primer plano con la Monumental y las Arenas e hizo rica a toda la familia. Creo que de la ganancia de los toros se hizo otro fortín comprando la mayor parte de los cines de la Ciudad Condal, entonces negocio redondo. Los descendientes, no. Dilapidaron la herencia sentimental. Así que José Antonio no seas como ellos. Ni a tu tío, ni a tu padre, ni a tu primo Manolo le gustará, supongo, esta actitud tuya. Ser heredero por vía monárquica o natural de un negocio enorme te debería servir para estar orgullosísimo de lo que te ha dado la vida. Porque a ti los toros sí te gustan ¿verdad?. Además eres persona de buen talante y mucha educación y buen negociante.
La verdad es que yo, como a otros muchos que he preguntado, hemos visto más o menos el mismo público en San Isidro que el año anterior, pero Erice en sus declaraciones dice que se han despachado 20.000 entradas menos -que es un día de toros. La convocatoria de una tarde- durante San Isidro y que sumadas a las 2.000 menos que en el 2012 que reconoce en la Feria del Arte y la Cultura, hacen un total de 22.000. Suponiendo que sea verdad, y no hay por qué dudarlo, a 20 €, que es tirar por lo bajo y no sé de cifras, aunque los huecos verdaderos estaban en sol, ofrecen un total de menos ingresos en el 2013 de 440.000 €, que no sé si es mucho o poco en las cuentas totales. Para mí muchísimo, mas para ellos…Yo soy de letras y me bailan y marean las cifras. Me equivocaré.
En fin, dejémoslo ahí. Nuestra vista habrá fallado. El público quizá no sufrió aprietos, quizá, pero los llenos y los tres cuartos en San Isidro fueron la tónica. No hubo, ni mucho menos, una entrada pobre, aunque sí en la denominada del Arte y la Cultura, por la que la opinión pública se dispara para que le quiten ese nombre cursi y falso o, mejor, que la eliminen. Esta ensalada de ferias (Comunidad, San Isidro y Arte y Cultura, tres distintas y una sola verdadera) lo ha resuelto fenomenalmente La Unión de Abonados y Aficionados Taurinos de Madrid juntándolas las tres bajo la denominación de ciclo ferial (así han dado los premios globalmente a las tres series y se han ahorrado tiempo, trabajo y dolores de cabeza). Un éxito lo de ciclo ferial.
La media, por ejemplo, para la del Arte y la Cultura que no gusta ni al padre Uranga ni al hijo Erice, ha estado entre 9.000 y 11.000 personas de media de asistencia que, tras el empacho y el gasto de San Isidro y con el mal tiempo a cuestas, no está tan mal. Lejos, sí, de las 24.000 del aforo, pero piensen también que casi 4800 de los abonados –poquitos- retiraron el paquete total de esta feria que debería desaparecer. Se veía venir.
Me esperaba que todo iba a ser peor. Me equivoqué en esto y en los confirmantes de alternativa, que todos han estado bien sin romper, pero bien y que merecen repetición en Las Ventas. A su debido tiempo y con el ganado debido. Recuerdo los nombres para que los pongan pronto : David Galván, López Simón, Ángel Teruel, Jiménez Fortes, Chechu y Pérez Mota.
Y me equivoqué también –mucho menos- con el global de mexicanos porque escribí que me parecía bien ver en los carteles del 2013 a los mejores de la avalancha del 2012. El confirmante Sergio Flores y sus compañeros de patria y profesión Diego Silveti, Arturo Saldívar y Joselito Adame, sobre todo, deberían tener más oportunidades.
Por eso digo que se cortó la hemorragia. De momento. Veremos la temporada, pero tener público en estos tiempos, cortar un número razonable de orejas, ver a muchos triunfando sin romper (que es lo que ha faltado) y muchos toros embistiendo es para estar razonablemente contento. Sin tirar cohetes.
Y sin la hemorragia esperada. Esto es lo bueno que ha hecho San Isidro. Por algo es santo.
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