Soy novillero
Pedro Javier Cáceres
“Soy novillero” es el certamen de Castilla La Mancha TV que pretende sacar valores nuevos de la Tauromaquia. Es la continuación de “Puerta Grande” que impulsara desde la tv autonómica manchega Jordi G. Candau, pero corregido y aumentado. La llegada a la Dirección General de Nacho Villa le ha dado un impulso de credibilidad ante las sospechas de enjuagues de la anterior gestión a la que no hay que mermarle mérito alguno en su creación y filosofía.
Viví, como observador, las primeras ediciones. Y como testigo de cargo, por mi condición de jurado, la presente.
Desde esa perspectiva puedo decir que la labor de promoción de Castilla La Mancha TV es ejemplar.
La organización encomendada a Taurina Manchega, la empresa de Los Lozano y los Manolos, la gestión modelo de Albacete, es impecable. El escenario, Plaza de Toros de Illescas, es una gozada de modernidad, confortabilidad y eficiencia. Y la dirección técnica es un soplo de aire fresco ante tanta obsolencia: santo y seña del mundo de los toros.
La retransmisión, en directo, de los festejos, es el plus que los chavales necesitan para darse a conocer y barruntar un futuro halagüeño a La Fiesta. Los espectaculares datos de audiencia avalan el acierto de la tv pública manchega en abundar a cerca del espectáculo taurino. El reconocimiento, por el esfuerzo, es, pues, al más alto nivel; en un momento en que la programación de novilladas es escasa, y con plus de mérito añadido si son de promoción (sin picadores).
Años anteriores no dejaba de ser un espacio Tv-taurino atractivo que no conseguía objetivos más allá de unas audiencias puntuales. Era más un producto televisivo que una promoción de valores tauromácos. Con la llegada del nuevo equipo el objetivo se bifurcaba: la audiencia, por un lado; pero, sacar productos de la región que dieran lustre, o al menos lo proyectara, al mundo de los toros. Y para darle sensación de reality, al más puro estilo, una vez concluida las seis novilladas de clasificación (previa selección de rigurosos tentaderos y jornadas de convivencia a la manera de “gran hermano” pero sin la cutrez de la marca original, dirigidas por el maestro Palomo Linares —el último rabo cortado en Las Ventas-, el escrutinio del jurado, en ceremonia de gran gala TV, para dar luz verde a la final del próximo día 10 en Toledo.
El espejo en que se refleja esta edición- y el veredicto del jurado va en esa línea- es la edición anterior en que los tres finalistas tuvieron la oportunidad de debutar con caballos en Albacete en un festejo de los que hacen currículo y, lo más importante, proyectar al ganador a la parrilla de salida de las esperanzas: Alvaro Lorenzo, entre otros galardones, dio credibilidad al certamen con su “Zapato de Oro “ en Arnedo (Feria de las Novilladas) . Ese es el camino.
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Pedro Javier, al final me vas a dar la razón, vas a terminar como yo viendo más sin caballos que con ellos.
ResponderEliminarEl Becario.