lunes, 29 de diciembre de 2014

Rivera Ordóñez: bienvenido al club / por Pedro J. Cáceres



"...Rivera es un torero cuyas exigencias han sido, siempre, transigencias para no provocar ruina en el empresario si no lo generaba en taquilla y pocas dificultades previas, repito en toda y cada una de sus múltiples etapas, a la hora de confeccionar el cartel con toros y toreros..."

Rivera Ordóñez: bienvenido al club


Crítico taurino y Periodista / 28/12/2014
Se barruntaba, hace días. Tras la oferta que hace un par de semanas Simón Casas y Cutiño le hicieron a Francisco Rivera Ordóñez para reaparecer en el año en que cumplía 20 de su alternativa en Sevilla, www.ladivisa.es y el programa el Paseíllo de la Radio de Castilla la Mancha gozaron de una amplia entrevista con el torero de la que se deducía que, pese a las dudas, lo de la reaparición iba a ser que sí.

Hace horas se ha verificado por el propio diestro. 

La noticia, por tanto, no coge por sorpresa, lo que no quita la relevancia que -desde aquella visita sevillana de los empresarios se produjera - para el taurinismo ha supuesto pese a tratarse de un “veterano de guerra”.

El empresariado consultado se ha manifestado contento de la nueva en la misma dirección que hace dos años lamentó su marcha. Rivera, que ha experimentado diferentes etapas, en todas ha tenido como denominar común, santo y seña, el respeto al traje de luces. 

Un gran profesional; por encima de momentos de figura u otros de menos.

Como figura emergente en sus comienzos de matador de toros, especialmente en el cartel de “los 3 tenores” (con Ponce y Joselito) para, posteriormente, ir reciclándose, buscando un acomodo según el reclamo de sus públicos en sus distintas fases. Lo que sí fue siempre es un “torero de ferias”, necesario, por capacidad, versatilidad y rentabilidad.

Es en la rentabilidad donde los empresarios lamentaban, tras la feria de El Pilar 2012, lo que iba a ser su ausencia posterior. 

Rivera es un torero cuyas exigencias han sido, siempre, transigencias para no provocar ruina en el empresario si no lo generaba en taquilla y pocas dificultades previas, repito en toda y cada una de sus múltiples etapas, a la hora de confeccionar el cartel con toros y toreros.

Vuelve, Paquirri, en un momento en que la Fiesta necesita de ayudas. 

Quien piense que un torero con 19 años de alternativa no puede ofrecer alicientes está equivocado. 

Pues, no se trata que él solo llene la plaza, que consiga lo que nadie de los que hacen temporada ni siquiera juntando 3 del top.

La “reaparición” se va a enmarcar en la que posiblemente sea única temporada revestida de la efeméride del 20 aniversario que le da un plus al mensaje de marketing. 

Pero por ello y con ello, y sobre todo por su trayectoria y el respeto conseguido de todos, principalmente de sus compañeros –como las figuras de hoy- la temporada huele a metraje adecuado, selección por arriba –plazas de importancia y simbolismo-, pero sobre todo vistiendo (que no es rellenar ni acompañar, sino todo lo contrario “trufar”) carteles de las figuras optimizando el plural atractivo hacia públicos heterogéneos y aliviar, por su flexibilidad, el presupuesto del cartel estrella habitual, lo que hace y argumenta lo escrito antes sobre la satisfacción del común de los empresarios ante el anuncio de esta reaparición.

Bienvenido al club.

¡Feliz 2015! A todos……A ti también.

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