Instantánea de la procesión de la Salida del Santo Ecce Homo en Bembibre. Fotografías: Dani Quiterio.
Una tradición centenaria, nacida, según las fuentes manuscritas más antiguas, en 1628, y que tiene lugar en la capital del Bierzo Alto cada siete años para conmemorar la intercesión del Ecce Homo, que supuestamente acabó con la sequía que asolaba los campos de la zona.
Una multitudinaria procesión para recibir al Santo Ecce Homo en Bembibre tras 7 años.
Señoras de mantilla y peineta /Foto Rafael/ |
Con las mejores galas, el público participó en esta celebración que tiene lugar cada siete años. Una procesión que partió del Santuario al que da nombre hasta la plaza Mayor, donde el Obispo de la Diócesis de Astorga, Camilo Lorenzo, acompañado por párrocos del Arciprestazgo del Boeza y el propio Arcipreste, ofició la Eucaristía que marca el inicio de la celebración religiosa de esta semana.
Publicado el 23/06/2015
Tal y como era de esperar, Bembibre recibió este sábado por la mañana una procesión multitudinaria, a pesar incluso de las altas temperaturas. Miles de personas salieron a la calle para recibir al Santo, en un multitudinario desfile que contó con una extensa comitiva, desde grupos pendonistas (con pendones y pendonetas), cruces, trajes tradicionales o autoridades religiosas y civiles. Todos para acompañar al Santo Ecce Homo.
La procesión comenzó pasadas las 12 del mediodía en el Santuario que, desde las 10 de la mañana comenzó a recibir a los diferentes integrantes en la comitiva. Los pendones fueron abriendo el paso, con la majestuosidad de estos estandartes ondeando con las escasas brisas de viento. En total, una treintena de pendones y 10 pendonetas con grupos fundamentalmente del Bierzo Alto, aunque con presencia también de otros puntos de la comarca.
Acto seguido, 52 cruces y 58 estandartes acompañaron en segundo término la procesión, seguido por los niños y las niñas de comunión que este año aprovecharon esta coincidencia para acompañar al Santo.
Posteriormente personas con indumentaria tradicional, imprescindible en este desfile que simboliza, junto con los integrantes anteriores, el estamento del pueblo llano.
-Fotografía: Rafael- |
El grupo Alegría Berciana se introdujo entre este colectivo tradicional y el Santo Ecce Homo, que estaba acompañado por mujeres con mantilla y peineta siguiendo de cerca a la carroza. En esta ocasión, fueron cuatro Guardias Civiles vestidos con sus mejores galas para escoltar la carroza del Santo. Acompañando al Santo los miembros de la Cofradía del Santo, una pieza clave en la organización de esta fiesta.
'Todo por la Patria' |
En la parte final, las autoridades religiosas, con una comitiva que presidía el Obispo de la Diócesis de Astorga y los párrocos del Arciprestazgo del Boeza. Y como cierre las autoridades civiles, con el alcalde de Bembibre, José Manuel Otero, el presidente en funciones del Consejo, Alfonso Arias, el delegado de la Junta, Guillermo García, alcaldes del Bierzo Alto y concejales de Bembibre y Bierzo Alto.
Uno de los aspectos diferenciadores del Santo es la celebración religiosa con la Eucaristía de esta mañana y las Novenas durante estos próximos días, cada una dedicada a un colectivo diferente. Esta tarde los protagonistas serán los inmigrantes; mañana domingo será el turno de los mineros y mundo del trabajo; el lunes niños y jóvenes; el martes las comunidades religiosas; los enfermos y la tercera edad protagonizarán la Novena del miércoles; ya el jueves será el turno para los movimientos de apostolado seglar; viernes dedicado a la familia; y la última Novena del sábado (un día antes de la subida del Santo), centrada en las cofradías.
Tal y como era de esperar, Bembibre recibió este sábado por la mañana una procesión multitudinaria, a pesar incluso de las altas temperaturas. Miles de personas salieron a la calle para recibir al Santo, en un multitudinario desfile que contó con una extensa comitiva, desde grupos pendonistas (con pendones y pendonetas), cruces, trajes tradicionales o autoridades religiosas y civiles. Todos para acompañar al Santo Ecce Homo.
Con las mejores galas, el público participó en esta celebración que tiene lugar cada siete años. Una procesión que partió del Santuario al que da nombre hasta la plaza Mayor, donde el Obispo de la Diócesis de Astorga, Camilo Lorenzo, acompañado por párrocos del Arciprestazgo del Boeza y el propio Arcipreste, ofició la Eucaristía que marca el inicio de la celebración religiosa de esta semana.
La procesión comenzó pasadas las 12 del mediodía en el Santuario que, desde las 10 de la mañana comenzó a recibir a los diferentes integrantes en la comitiva. Los pendones fueron abriendo el paso, con la majestuosidad de estos estandartes ondeando con las escasas brisas de viento. En total, una treintena de pendones y 10 pendonetas con grupos fundamentalmente del Bierzo Alto, aunque con presencia también de otros puntos de la comarca.
Acto seguido, 52 cruces y 58 estandartes acompañaron en segundo término la procesión, seguido por los niños y las niñas de comunión que este año aprovecharon esta coincidencia para acompañar al Santo.
Posteriormente personas con indumentaria tradicional, imprescindible en este desfile que simboliza, junto con los integrantes anteriores, el estamento del pueblo llano.
El grupo Alegría Berciana se introdujo entre este colectivo tradicional y el Santo Ecce Homo, que estaba acompañado por mujeres con mantilla y peineta siguiendo de cerca a la carroza. En esta ocasión, fueron cuatro Guardias Civiles vestidos con sus mejores galas para escoltar la carroza del Santo. Acompañando al Santo los miembros de la Cofradía del Santo, una pieza clave en la organización de esta fiesta.
En la parte final, las autoridades religiosas, con una comitiva que presidía el Obispo de la Diócesis de Astorga y los párrocos del Arciprestazgo del Boeza. Y como cierre las autoridades civiles, con el alcalde de Bembibre, José Manuel Otero, el presidente en funciones del Consejo, Alfonso Arias, el delegado de la Junta, Guillermo García, alcaldes del Bierzo Alto y concejales de Bembibre y Bierzo Alto.
Uno de los aspectos diferenciadores del Santo es la celebración religiosa con la Eucaristía de esta mañana y las Novenas durante estos próximos días, cada una dedicada a un colectivo diferente. Esta tarde los protagonistas serán los inmigrantes; mañana domingo será el turno de los mineros y mundo del trabajo; el lunes niños y jóvenes; el martes las comunidades religiosas; los enfermos y la tercera edad protagonizarán la Novena del miércoles; ya el jueves será el turno para los movimientos de apostolado seglar; viernes dedicado a la familia; y la última Novena del sábado (un día antes de la subida del Santo), centrada en las cofradías.
ORÍGENES EN LA SEQUÍA
Una tradición centenaria, nacida, según las fuentes manuscritas más antiguas, en 1628, y que tiene lugar en la capital del Bierzo Alto cada siete años para conmemorar la intercesión del Ecce Homo, que supuestamente acabó con la sequía que asolaba los campos de la zona.
En el siglo XVII, Bembibre sufrió un conjunto de calamidades que provocaron que la situación económica y demográfica quedara maltrecha: epidemias, malas cosechas, crisis de subsitencia… Las autoridades del Antiguo Régimen entendieron que para poder remediar esos males era necesaria la intercesión de una divinidad y elevaron sus súplicas al Ecce Homo.
El ‘milagro’ se documentó por primera vez en un manuscrito del año 1774 aunque la memoria local y la tradición oral lo fechan un siglo y medio más atrás. Por aquel entonces, el Ecce Homo no era venerado más allá de los límites de Bembibre pero el ‘milagro’ lo convirtió en referencia para todo el Archiprestazgo del Boeza.
La Salida del Santo es la fiesta por antonomasia y la más esperada en Bembibre, que se considera un pueblo elegido y favorecido por su Patrón. Desde 1903 se rememora el ‘milagro’, con un desfile procesional que tiene lugar cada siete años. La celebración goza de la consideración de Manifestación Popular de Interés Turístico Provincial desde el 18 de julio de 2014.
Instantáneas de la procesión de la Salida del Santo Ecce Homo en Bembibre (Fotos: Dani Quiterio).
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