lunes, 26 de octubre de 2015

Hablando claro / por Rafael Comino Delgado



"...Comprenderán que tratar de imponer, ahora, ideologías trasnochadas, obsoletas, que trajeron, allí donde imperaron, pobreza, miseria y muerte, solo puede ocurrírsele a mentes muy distantes de la sensatez, lo razonable y la normalidad..."

Hablando claro 

Rafael Comino Delgado
Catedrático de la Universidad de Cádiz
La situación política en España es sencillamente lamentable. Tras las elecciones autonómicas y municipales del pasado Mayo, han llegado al poder diversos partidos de extrema izquierda, algunos de ellos anti-sistema y muy cercanos al terrorismo, a veces con el apoyo del PSOE que, en honor a la verdad, desde Zapatero se ha radicalizado muchísimo, y lo peor es que bajo la dirección del Pedro Sánchez se puede decir que, en muchos aspectos, es un partido de extremísima izquierda, muy radical. 

La impresión es que ha perdido sus principios, su identidad, su filosofía social-demócrata, tal como dicen muchos de sus antiguos dirigentes, como Felipe González, Jose Luis Corcuera, Joaquín Leguina, o actuales como Susana Díaz, y anda perdido, opinando diferente según quien, día y lugar. En Andalucía dice una cosa , en Cataluña otra, en Madrid otra, en Galicia otra, etc. Personas que parecían, hace poco tiempo, sensatas están diciendo y haciendo disparates y estupideces a cada momento, tal es el caso de Antonio Miguel Carmona o el mismo Pedro Sánchez. La última ocurrencia de Sánchez ha sido prohibir la Religión en los colegios públicos y privados, como si ese fuera el gran problema de nuestra patria. La vida me ha enseñado que nunca, nadie podrá borrar el gen de religiosidad que hay en el genoma humano, por mucho que lo prohíban, y que no debe uno fiarse jamás de los que prohíben, pues con toda seguridad son muy mediocres y muy peligrosos. 

Lo cierto y verdad es que todo este cóctel de ideologías (ya incluyo al PSOE) que están accediendo al poder puede, si en las elecciones del 20 de Diciembre no se da un giro de 180 grados a esta tendencia, llevar a nuestro país al caos total, similar al de los años 1934-1936, en todos los aspectos.

Comprenderán que tratar de imponer, ahora, ideologías trasnochadas, obsoletas, que trajeron, allí donde imperaron, pobreza, miseria y muerte, solo puede ocurrírsele a mentes muy distantes de la sensatez, lo razonable y la normalidad.

Nosotros pensamos que España necesita dos partidos políticos fuertes, uno de Centro-derecha, que puede ser el PP y otro de Centro-izquierda, que con Felipe González, tras abandonar el marxismo, fue el PSOE, pero que hoy, al haberse radicalizado y distanciado tanto de la cordura, moderación y el orden, le ha dejado el campo libre a "Ciudadanos", que entiendo podría ser, en el futuro y para mucho tiempo, ese partido de Centro- izquierda necesario (pues no nos engañemos, Rivera es socialdemócrata, viene de las juventudes socialistas, y está muy alejado de la democracia cristiana y el liberalismo), como ocurre en aquellos países que mejor funcionan, tal es el caso de Estados Unidos, Inglaterra, Canadá, Alemania. Naturalmente siempre que Albert Rivera no cometa errores y deje de apoyar, como a veces ha hecho, a grupos de extrema izquierda. 

Por tanto entiendo que en las próximas elecciones solo hay dos alternativas válidas a las que votar, si queremos realmente reconducir la lamentable situación por la que atravesamos: Centro-derecha, es decir, el PP y Centro izquierda, es decir, Ciudadanos y luego, tanto al que gobierne como al que esté en la oposición exigirle máxima honestidad, transparencia, defensa de la unidad de España, de nuestra cultura y de los valores que caracterizan a nuestra civilización occidental. Pues considero que votar PSOE, Podemos, Izquierda Unida , etc. es votar radicalidad, y poner en grave peligro nuestra libertad, nuestra democracia y nuestro estado de bienestar.

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