Del toro al infinito: VILLASECA DE LA SAGRA .Gran actuación de Jesús Enrique Colombo y Leo Valadez . Novilladón de Cebada Gago y esfuerzos sin valorar.

Leo Valadez, Jesús Enrique Colombo, y Curro Durán

-Fotografías de Dolores de Lara-

Gran actuación de Leo Valadez y Jesús Enrique Colombo con un exigente encierro de Cebada Gago con el que no se encontró Curro Durán

Jesús Enrique Colombo

Novilladón y esfuerzos sin valorar

Ignacio Rubio

CULTORO. VILLASECA DE LA SAGRA, 09/09/2016

Reaparecía el novillero mexicano Leo Valadez en la tarde de este viernes en la segunda de la Feria del Alfarero de Oro de Villaseca de la Sagra. Casi un mes lo había tenido en el hule una cornada en Málaga, y hoy volvía con el encierro de Cebada Gago junto a Jesús Enrique Colombo y Curro Durán. Al finalizar el paseíllo se guardó un minuto de silencio y se le tributó un homenaje a la familia de Enrique Carmena, alguacilillo de esta plaza durante 15 años.

Aplausos de salida para el de Cebada Gago, que fue largo y metió la cara en el capote de Curro Durán con verónicas sin apretarse demasiado. Buena vara de castigo y buen tercio de banderillas. Bueno, con humillación y genio el de Cebada, al que Durán sometió por bajo de inicio y tras serie dubitativa en redondo se ajustó en la tercera serie con cuatro redondos limpios y llenos de arte para romper la música. En el de pecho resultó prendido sin consecuencias. En su vuelta a zurdas le faltó acoplamiento y acertar en las distancias, así como no dejarse topar los engaños. Dos pinchazos y descabello para escuchar ovaciones novillo y torero.

Una oreja corto Leo a otro animal con distinta condición al que sujeto entre Verónica, chicuelina y delantales tras una vara que sangro mucho en animal, su faena llena de valor entrega de mucha exposición ante un novillo que sabia lo que se dejaba atrás, Valadez se la puso y trago de lo lindo, no fue una brillantez extrema pero si condición de novillero, al natural casi resuelto imposible y terminó con ajustadas manoletinas y una gran estocada para Oreja de mérito.

Colombo sin duda perdió a espadas el premio tras una labor de principio a fin desde la larga cambiada en el tercio y su toreo a la Verónica y un tercio de banderillas muy lucido a excepción de la conjunción del segundo, su faena al rehusar la pelea el Cebada transcurrió en chiqueros y tablas donde se lo pasó muy de cerca y con la verdad del toreo en redondo y unos finales invertidos completos y muy rematados con los de pecho, se perfiló muy de verdad y pinchÓ dos veces arriba antes de la estocada, recogió una sonora ovación, Colombo estuvo por encima del rajado Gago.

Curro Durán no aprovecho las buenas condiciones del Cebada muy por debajo el joven ante un novillo con poder y con clase en muchos momentos, ni encontró las distancias ni tiro palante como hay que andar en esto, toreo para afuera y al viento, pudo resultar prendido, acuso el desarme y para remate fallo con estrépito a espadas, sencillamente perdió esta tarde una oportunidad de lujo el el gran escaparate novilleril ,sufrió además un arreon al descabellado, su bagaje silencio y aplausos al buen Cebada Gago.

Leo Valadez estar , querer y poder el mexicano fío la dimensión que se pide. A nivel novilleril se fue sin tocar pelo casi entre lágrimas ante la no concesión del trofeo que se pidió con fuerza, en una faena donde el mérito de Valadez estuvo en la variedad con el quite por lopecinas y una labor más que digna con la muleta donde expuso y tragó de lo lindo, corrió la mano, naturales a pies juntos de bella factura, muy metido en faena término con manoletinas de rodillas y una estocada de premio a todas luces. Cicateria desde el palco que fue abroncado tras la vuelta al ruedo de Valadez y los aplausos al novillo.

Colombo ante una estampa ensabanado que levantó el aplauso de salida y donde un quite con un gusto fuera de norma en la medida de cierre. Espectacular en banderillas con mucho poder.

Brindó a Juan Lamarca. Mérito , ganas y disposición Unido al gran valor y buen dominio de los trastos, ligó de comienzo con gran enjundia y sufrir también el riesgo de los pitones a nivel de rodilla derecha sin calar en las carnes, enrabietado y en cercanías logró unos pasajes dignos de un torero con oficio, de lo pasó muy cerca levantando los aplausos ante semejante labor, pinchazo y estocada avisado, ovación con saludos.