Ahora que estamos a dos días de la final de la Champions, el Real Madrid tras eliminar equipos cada vez más difíciles y ‘encastados’ ahora ha de medirse a una Juventus con mucho trapío y muy bien armada. Si a estas finales se llegara eliminando siempre al Castilla y a la Ponferradina para enfrentarse, finalmente con el Ceuta, al campo no iba ya ni el gato, ni los méritos podrían ser los mismos. No es igual ¿verdad?
SIN TOROS ESTO NO ES NADA
Antolín Castro
S.I.17.- Aunque les pueda parecer mentira la terna de hoy hacía su único paseíllo en la Feria de San Isidro, unos porque pudiendo no quieren y otro porque queriendo no puede, el caso es que una tarde y adiós de los tres.
Ya se que me dirán que tanto Manzanares como Cayetano vendrán después a la corrida de la Beneficencia y Cayetano a la de la cultura, pero eso es otro cantar. La feria de San Isidro acaba el día 11 y punto. Quien ha querido, y podido, léase Talavante, se ha anunciado tres tardes, saldadas ya dos con sendas orejas, y una cornada, y todavía le queda la de Victorino el próximo martes.
De gestos y matices vive, y ha de vivir, la fiesta, los toreros y los aficionados… y no es lo mismo una cosa que otra. De ahí que la memoria tenga pegamento o se despegue fácilmente. Torear todo, y siempre, del mismo encaste, roza ya la más absoluta comodidad. Ahora que estamos a dos días de la final de la Champions, el Real Madrid tras eliminar equipos cada vez más difíciles y ‘encastados’ ahora ha de medirse a una Juventus con mucho trapío y muy bien armada. Si a estas finales se llegara eliminando siempre al Castilla y a la Ponferradina para enfrentarse, finalmente con el Ceuta, al campo no iba ya ni el gato, ni los méritos podrían ser los mismos. No es igual ¿verdad?
Aquí no pasa lo mismo. Al público lo que le gusta es que su torero gane aunque sea al ganado más indecoroso, más pastueño y, a ser posible, en estado catatónico. El caso es suspirar por determinados toreros que cada día hacen gala de esa falta absoluta de compromiso con la propia Fiesta y con la afición. También con sus partidarios, a quienes les dejan desnudos ante la normal exigencia de una plaza como Las Ventas. Defender lo indefendible no tiene, ni puede tener, cabida ni ante sus seguidores.
Así transcurrió esta tarde con los pupilos de Juan Pedro Domecq, sus embestidas mortecinas desde su salida a la plaza necesitaban más de una U.V.I. que de un torero delante. Poco puede importar que les digamos si los toreros compusieron o no faenas, lo penoso es que faltaba la compostura ya de entrada. Así nadie puede sentirse emocionado, si acaso conmovido con la aparente indefensión del animal.
Hubo confirmación para el peruano Joaquín Galdós y anunciándose con esta ganadería le supuso su propia penitencia. Estuvo con decoro en el toro de su confirmación y por eso le ovacionaron cariñosamente. También a Cayetano se le ovacionó cariñosamente por sus ganas de agradar, claro que elegir esta ganadería tiene estas cosas. Manzanares ni siquiera tuvo plenamente afilada la espada, que finiquitó de un solo golpe a sus ‘enemigos’ pero no como nos tiene acostumbrados.
Y es que sin toros esto no es nada. Mañana veremos con qué resultado se salda la tarde, en la que hay otra confirmación y otra ganadería.
No hay comentarios:
Publicar un comentario