lunes, 2 de abril de 2018

Efectivamente Messi se borró / por Juan Manuel Rodríguez



Viajó con Argentina, entrenó con aparente normalidad, se filtró a la prensa que iba a ser titular frente a España y... se borró. Messi se borró y, cuando la goleada era de escándalo, desapareció del palco, cuestión ésta que, según parece, le afean en su país aún más incluso que el hecho de haberse borrado.

Efectivamente Messi se borró

¿Se borró o no se borró Messi del partido amistoso contra España? 
Cuando el otro día sugerí lo primero, o sea que el argentino se quitó de enmedio de un partido que él interpretó que sólo podía causarle un mal trago, me cayeron encima un montón de palos. Afortunadamente, y para comprobar si yo estaba en lo cierto o estaba equivocado, sólo hacía falta esperar 4 días para saberlo: si Leo disputaba aunque sólo fuera un minuto contra el Sevilla quedaría demostrado que efectivamente se borró del España-Argentina del Metropolitano. Messi empezó el partido en el banquillo y aquello fue inmediatamente jaleado por sus grouppies como la constatación de que mentía quien afirmara que se había borrado del partido de selecciones, pero cuando pintaron bastos... Leo resucitó como Lázaro de todas sus molestias, que aún no están claras, para liderar la recuperación propia y la del Barça.

O sea: Messi se borró. 
Viajó con Argentina, entrenó con aparente normalidad, se filtró a la prensa que iba a ser titular frente a España y... se borró. Messi se borró y, cuando la goleada era de escándalo, desapareció del palco, cuestión ésta que, según parece, le afean en su país aún más incluso que el hecho de haberse borrado. Messi se borró por la misma razón por la que, cuando a Sampaoli le informaron de que había previsto un partido amistoso contra España para finales de marzo, al seleccionador no le gustó ni un pelo. Messi se borró porque no tenía nada que ganar, porque intuía que el equipo de Lopetegui no se iba a tomar el partido como si de un simple amistoso se tratara y porque no quería salir en una foto en la que aparecería movido.

Anoche Rafa Guerrero contó en El Chiringuito que estaba viendo el Sevilla-Barcelona en un bar y que al lado había cinco seguidores argentinos que, en cuanto Messi saltó al terreno de juego, empezaron a increparlo. Le dijeron de todo menos bonito. Parece que la percepción que tienen de Messi en su país es la de un jugador que se implica al cien por cien con su equipo pero que no se parte el alma por Argentina. Eso sólo podrá curarlo un Mundial, quizás el último que dispute Leo con la albiceleste; el otro día dijo Bilardo que para que Messi iguale a Maradona tiene que ganar el campeonato del mundo, pero no es sólo el "qué" sino también el "cómo", y ahí Diego golea. Me pareció muy injusto que apalearan a Higuaín, que sí estuvo, y que Messi se fuera de rositas. A medida que van transcurriendo los días esto se va equilibrando poco a poco y cada vez hay más gente convencida de que, efectivamente, Lionel Messi se borró.

No hay comentarios:

Publicar un comentario