sábado, 29 de agosto de 2020

Promesa verbal / por Pla Ventura:


Lógicamente, como no podía ser de otro modo, el alcalde de La Roda es de izquierdas, como debe ser, de ahí que lo de mentir le viene de su puñetero jefe que, como sabemos, miente más que habla que ya es decir. Nunca debemos de fiarnos de político alguno, jamás, pero si para colmo es de izquierdas, hay que salir huyendo despavorido antes de que se produzca la catástrofe.

Promesa verbal

Toros de Lidia / Agosto, 2020
Tal y cómo se han desarrollado los hechos en La Roda, la información que tenemos no es otra que, en su momento, el alcalde de la localidad le dio la promesa verbal al empresario, José Montes, para poder dar la corrida en la que se doctoraba el novillero Mario Sotos. Cuando ya todo estaba organizado, los carteles en la calle, las medidas de seguridad aplicadas; todo lo habido y por haber y, el día anterior, el empresario recibe una llamada del ayuntamiento aduciendo que, prohibían el festejo por el temor al contagio del posible virus que pudiera instalarse en la plaza.

Y digo yo, esa “sabia decisión”, ¿no la sabían veinticuatro horas antes? Vamos, como para que nos fiemos de un político. Por cierto, este que narra estas letras, para mi desgracia, por culpa de creer a un alcalde de forma verbal, aquella decisión me llevó a pasar varias noches en la cárcel y, al salir, tener una libertad bajo fianza de ocho millones de pesetas de la época, todo ello, durante el “brevísimo” plazo de nueve años muy bien contados. Y lo que digo no es una metáfora, es una puta realidad en la que un hombre honrado, por culpa de aquel desaprensivo Dios lo tenga en el infierno, acabé con mis huesos en la trena.

La corrida citada, por el cartel, por las condiciones en que tenía que celebrarse, al empresario José Montes, la misma, con toda seguridad si acarrearía pérdidas o quizás ya tuvieran pactado que, de haberlas, que las habría, las asumirían entre todos. Si se me apura, al empresario le han hecho un favor pero, todo depende del color con el que se mire porque, Antonio Palacios, como novillero local estaba como loco por torear un novillo en dicha corrida de toros en la que, Mario Sotos, como torero que iba a ser doctorado, imagino que su disgusto, a su vez, será mayúsculo. Todo se les ha venido abajo pero, por encima de todo estas letras quiero que sirven como lección para todo el mundo; nadie debe de fiarse de político alguno ante algo que tenga la más mínima relevancia que, los muy cobardes, apoyándose en el cargo se quitan de en medio sin importarles para nada que el daño que puedan haber causado con su negativa la que, un rato antes, habían aprobado.

Lógicamente, como no podía ser de otro modo, el alcalde de La Roda es de izquierdas, como debe ser, de ahí que lo de mentir le viene de su puñetero jefe que, como sabemos, miente más que habla que ya es decir. Nunca debemos de fiarnos de político alguno, jamás, pero si para colmo es de izquierdas, hay que salir huyendo despavorido antes de que se produzca la catástrofe. Quiero pensar, porque es una ley de la vida que, aunque sea muy en el fondo, algún político quedará decente pero, encontrarlo en las filas del socialismo o del comunismo, ahí tenéis la historia, ir leyéndola y encontraréis las respuesta a vuestras dudas.

Y, cuidado, como quiera que quiero ser imparcial y ante todo justo, un alcalde de derechas fue el que por su culpa paré en una puta cárcel cuando, como es sabido, mi vida ha transcurrido haciendo el bien a toda persona que ha llegado a mi lado; y no está bien que yo lo diga porque puede sonar muy pretencioso cuando, como se sabe, la humildad es la que siempre ha definido a mi pobre persona. O sea que, no tengo fobia contra nadie ni defiendo sigla alguna, un tipo de derechas, malo como él solo, por su maldita acción, insisto, acabé entre rejas. Cada cual que le dé la lectura que crea oportuna.

Por cierto, no se me debe olvidar. ¿Cuántos contagiados se han descubierto en todas las corridas de toros que llevamos celebradas? ¡Ni uno! Eso sí, el alcalde de La Roda, por amor hacia sus vecinos suspendió la corrida para que no hubieran contagios. Ellos, los sociatas y comunistas sí que están todos contagiados por el virus del odio y del rencor, amén de la maldad de todas sus mentiras que, quiera Dios que un día lo paguen todo carísimo, como debe ser el precio.

Ahora, cuando todos nos habíamos ilusionado con la feria de Alcalá de Henares en la que, Movistar tenía que retransmitir los festejos, de repente, pese a la autorización que tenía la empresa de la plaza que, dicho sea de paso, llevaba varios años cerrada, por una decisión de Sanidad, imagino que por una orden del tal Salvador Illa que, no acierta ni cuando se equivoca, dicha feria se ha ido al garete, incluso con los toros que ya tenían en los corrales. ¿Os dais cuenta como las gastan los sociatas? Que respondan los empresarios de dicha plaza que, con toda seguridad, mucho tendrán que decir; ante todo, que no tenemos autoridades serias ni nada que se le parezca; todo es un puta broma la que nos gastan porque, repito, insisto, en los toros no se ha dado ni un solo contagio. Mierda para todos los que hoy aprueban una cosa y mañana dicen lo contrario que, como sabemos, en tal menester, Pedro Sánchez es todo un maestro y, claro, sus adláteres no pueden sino que, ser como él.

En la foto, el Hotel de 5 Estrellas en el pasé alguna que otra noche por una maldita decisión, digamos que por una promesa verbal de un alcalde del PP para, tras mi salida, estar nueve años en libertad condicional bajo una fianza de ocho millones de pesetas, la cifra más alta como fianza que se había pedido en aquellos años que, lógicamente, me tocó a mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario