El año 2020 no hubo feria taurina y por tanto no se celebró el pregón. Sin embargo apenas lo ha permitido la situación la tertulia taurina EL Castoreño no ha dudado en volver a organizar este acto tradicional.
Así que, aunque la feria no está montada en las fechas tradicionales, en torno a la festividad de Ntra. Sra. de la Salud, la empresa ha querido hacer coincidir los espectáculos taurinos con la Fiesta de los Patios. Y claro, si hay feria taurina y no hay estado de alarma, hay pregón.
A la hora anunciada, en el Salón Liceo del Real Círculo de la Amistad, sonaron los acordes del pasodoble "Manolete" a cargo de la Agrupación Musical Cristo del Amor (banda oficial de "Los Califas") y a continuación el Salón entero se puso de pie para escuchar con respeto el Himno Nacional que siguió al pasodoble y dio paso al presidente del Real Círculo de la Amistad, Pedro López, que en nombre de la entidad dio la bienvenida a los presentes e hizo un breve repaso a la historia del pregón.
Inmediatamente José María Portillo, presidente de la Tertulia Taurina El Castoreño, se congratuló de haber podido volver al tradicional pregón taurino y felicitó a la empresa por los carteles de la feria.
Por su parte, el presentador del pregonero Ladislao Rodríguez Galán, glosó la figura de su amigo personal Prieto Garrido, destacando de él su gran amor a la figura del toro de lidia, animal al que ha dedicado toda su vida y del que ha escrito ocho libros (algunos con varias ediciones).
Rodríguez narró algunas anécdotas de los veinticinco años que Prieto Garrido estuvo en el palco de Los Califas y otras vividas en las distintas ganaderías que visitaron y resaltó su gran sentido de la Amistad, antes de cederle el micrófono.
Llegado su turno José Luis Prieto Garrido, que había titulado su pregón, ilustrado, "El toro de ayer y el toro de hoy. De Pedro Romero a José Tomás", dio una lección magistral sobre la evolución del toro de lidia a través de los años. Contando pormenorizadamente las situaciones por las que han pasado las diferentes ganaderías de antes de la guerra civil y posterior al conflicto bélico.
Lamentó, el pregonero, que por diferentes causas estén desapareciendo ganaderías míticas con un pasado glorioso.
No olvidó equiparar las épocas del toreo con la evolución del toro aparejado a los diferentes encastes. Y enumeró los grandes toreros que fueron amoldando al toro al gusto de los diestros que han mandado en el toreo en cada época, destacando sobre ellos a "Guerrita", "Joselito", Belmonte y sobre todo a "Manolete" del que dijo que le servían el noventa por ciento de los toros por su gran conocimiento de los mismos.
Ya en la era posterior a "Manolete", habló de Antonio Ordóñez, Curro Romero, Paco Camino, Ojeda, Jaime Ostos, El Viti y sobre todo de Manuel Benítez "El Cordobés" un revolucionario que mandó en el toreo, dijo, como nadie lo había hecho.
Tras Manuel Benítez hizo hincapié en Paco Ojeda y posteriormente en Juan Antonio Ruiz "Espartaco", hasta llegar a José Miguel Arroyo "Joselito" y Enrique Ponce, otro gran conocedor del toro y por fin el Mesías José Tomás. El torero esperado que volvió a encandilar a la afición en un momento muy oportuno.
En cuando a Córdoba destacó a grandes toreros de la mitad del siglo XX como José María Martorell, y posteriormente José María Montilla, "Zurito", Fernando Tortosa, "El Puri", Manuel Cano "El Pireo" y Florencio Casado "El Hencho" y sobre todo la pareja de los años noventa "Finito de Córdoba y "Chiquilín" que convulsionaron la ciudad que dividió sus afectos entre los dos.
En definitiva un pregón taurino de mucha categoría que pasará a los archivos del Castoreño como uno de los más brillantes, documentados e interesantes.
Añadir que entre otras autoridades asistió el Consejero de Salud Jesús Aguirre.
Y volvió a sonar el pasodoble poniendo broche musical a un pregón de muchos quilates.
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