Perera y Ureña cortan sendas orejas y también reciben ovaciones con Luque, frente a un encierro serio y pegajoso. Tarde de estocadas. Dos banderilleros y un picador ovacionados.
Seis estocadas seis
Jorge Arturo Díaz Reyes
Cali; Crónica Toros, V 20 2021
Corrida de dos hierros familiares, que salió con divisa negra en memoria del patriarca fallecido, Teodoro García “Matilla”: Hermanos García Jiménez y Olga Jiménez, segundo y tercero. Corrida cinqueña, de muchos pies, bien armada, negra toda, salpicado el cuarto. Marcó 541 kilos promedio. Atacaron la única vara de rigor, pronto, decidida y decorosamente. Luego, unos más otros menos, repitieron sin tregua, fijos, pero pegajosos, venían pero no se iban. Cabeceaban arriba al final de la suerte. Algunos a límite de fuerzas. Aun así, aplaudidos los arrastres, primero, segundo y cuarto. Manso el sexto que se rajó vergonzosamente.
Miguel Ángel Perera, torero quieto, luchó para parar sus toros. Con el primero lo consiguió tras media docena de muletazos por alto, y ligó dos tandas cortas derechas a compás y luego una más larga por la izquierda de cal y arena que logró el asentamiento de las embestidas. La faena, que se desgranó de allí en adelante con más reposo, tuvo es valor agregado. La estocada ligeramente pasada tiró el primer “Catavino” sin puntilla y tocó pelo. El otro, el cuarto galopero, raudo, reponía y el unipase fue la opción obligada. Suertes, pasos y suertes, de Belmonte para acá no valen. El extremeño puso de su parte, y se ganó la ovación en el tercio con el sudor de su frente. Porque a pesar del aviso, la estocada tarda pero cimera y bien ejecutada no fue sino una.
Paco Ureña no se inmutó cuando “Caramelo” huyó abanto tras las primeras cuatro buenas verónicas. Insistió con chicuelinas, pero fue entablerado. Tampoco se arredró. Brindó a los médicos, y de una a los medios; estatuario, trinchera, natural y pecho. Tres derechas, cambio de mano, natural y pecho. El viaje venía rebrincado pero la mano del muciano fue corrigiendo y de media faena para allá la puso sedita ¡Ole! Ocho naturales y un medio pecho y más y más izquierda con dominio y desparpajo. Una estocada total, desarmada eso sí, desató la pañuelada y el griterío que no se contentó con una y quería otra. Mas don Víctor Oliver Rodríguez consciente de que así no sean Las Ventas está en Madrid y la feria se llama San Isidro, aplicó la mesura. Igual que con el cuarto de Perera el tuvo que andarle al quinto muletazo aquí pasito allá, muletazo aquí pasito allá, que sin importar que aisladamente hubiese algunas joyas no hacían una obra coherente. Una estocada honda exigió el único descabello de la tarde y no impidió la ovación.
Daniel Luque, que tras su triunfo de dos días antes entró con todo mérito al cartel por De Justo, quien a su vez había entrado por Ferrera. Tuvo los menos fáciles, el soso tercero y el rajado sexto. No se inhibió, Toreó lo que había que torear. En una tarde de estocadas puso la de la tarde. De oreja decían los de antes, cuando la suerte suprema era suprema. Ahora no. Saludo y a tratar de hallarle al cara la descarado y cobarde sexto que no quiso encarar. No dio sino la culata. No excedió la porfía y mató recibiendo en medio del silencio sepulcral
La tarde no rompió, pero tampoco se hundió. La terna salió muy aplaudida quizá porque se notó eso que dijo al final Ureña: “soy torero imperfecto pero siempre hago lo mejor que puedo”.
FICHA DEL FESTEJO
Madrid, Carabanchel. Palacio de Vistalegre. Miércoles 20 de mayo 2021. 8ª de San Isidro. Entrada, menos de media entrada en lo disponible. Seis toros de Hermanos García Jiménez, bien presentados, al filo de raza y fuerza.
Miguel Ángel Perera, oreja y saludo tras aviso.
Paco Ureña, oreja con petición de otra y saludo.
Daniel Luque, saludo y silencio.
Incidencias: Saludaron. Curro Javier tras parear el 1º y Javier Ambel tras parear el 4º. Ovacionado Pedro Iturralde tras el respectivo monopuyazo al 5º.
No hay comentarios:
Publicar un comentario