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Se ha publicado que la empresa Plaza 1 y la Comunidad de Madrid están trabajando en orden a programar varias corridas de toros y novilladas durante el verano, sobre la base de 8000 localidades como máximo aforo, lo que sería poco más de un tercio del completo.
Lo cierto y verdad es que hasta el momento se han anunciado dos carteles muy interesantes, ambos serán retrasmitidos por Movistar, para el sábado 26 de junio con toros de Victorino y Manuel Escribano, Sergio Serrano y Jiménez Fortes en el cartel, y otra para el domingo 4 de julio, corrida de la Cultura, en la que se anuncian toros de Victoriano del Rio, a lidiar por Antonio Ferrera y Emilio de Justo. En ambos casos el máximo aforo autorizado era de 6000 localidades, lo que representa poco más del 25 % del aforo total (incomprensible), sin embargo, el día 19 pasado la Comunidad autorizó el 50 % del aforo, lo que en la Ventas equivale a unas 11500 localidades aproximadamente. Eso ya es otra cosa mucho más sensata y ajustada a la realidad del momento, pues desde hace mucho tiempo venimos advirtiendo que en recintos abiertos el contagio del virus es altísimamente improbable, especialmente manteniendo la mascarilla. Esa programación, la hasta ahora anunciada, nos parece muy poco para todo el verano en Madrid, después de tanto tiempo sin toros. Esperemos mas noticias en los próximos días.
La corrida del 26 de junio tiene el interés de ser toros de Victorino, y una terna de matadores que hacen muy bien el toreo bueno; entre ellos destaca Manuel Escribano, como, podríamos decir, especialista en victorinos, pues con esta ganadería ha obtenido muchos y sonados triunfos, entre ellos el indulto de Cobradiezmos en la feria de Sevilla, 2016.
La corrida de la Cultura, a celebrar el 4 de julio, es de gran atractivo, pues la ganadería es de las pedidas por las figuras, y un mano a mano entre extremeños. Antonio Ferrera, que en 2022 hará 25 años de alternativa, y en los últimos ha logrado ponerse en figura, curiosamente tras más de un año en el dique seco debido a una lesión de muñeca. Ese tiempo le sirvió para meditar, par madurar su tauromaquia, para pensar en innovar y aportar variedad al toreo; eso después de hacer el toreo clásico de siempre. Es el único matador del momento que saca los toros del caballo haciendo verdaderos quites de lo más variados. Destaca también la forma de matar que ha introducido, yéndose hacia el toro, con la espada montada, desde unos veinte o más metros, y en el punto de encuentro ejecuta la suerte. Ferrera es gran atractivo en cualquier cartel hoy día.
Su paisano Emilio de Justo siempre ha tenido muy buen concepto del toreo y muy buen gusto toreando, pero, como le ocurre a muchos, tras la alternativa le olvidaron y el hombre tuvo que irse a torear a América y aprovechar los carteles que le dieron el Francia, donde sus triunfos resonaron con fuerza en España, y no tuvieron más remedio que ponerlo, lo que también aprovechó. Hace un toreo muy puro, mata cualquier ganadería, y por méritos propios hay que considerarle ya figura, al menos por el interés que ha despertado en la afición y por sus actuaciones en el ruedo.
Para esta corrida Extraordinaria de la Cultura se ha ideado un cartel, que representa la plaza de las Ventas, y sobre ella la cara del Salvador Dalí. Como es habitual será valorado de muy distintas forma según quien le valore, pues como dijera el Premio Nobel, don Santiago Ramón y Cajal, “En arte no importa el modo sino la moda”, pero como acertadamente sentenciara la gran Coco Chanel, “todo lo que es moda pasa de moda”, y añadimos nosotros, “una vez pasa de moda poco interesa”. Preferimos algo que perdure en el tiempo, y lo que perdura mucho tiempo, generalmente, es lo realmente bueno.
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