sábado, 9 de julio de 2022

'San Fermín': Un par de burros / por Jorge Arturo Díaz Reyes

"El Presidente de Sol" compensa a Daniel Luque: Fotograma: Plaza Toros TV

"...El presidente y su asesor ignoran la gran faena, la estocada de la tarde y la petición unánime de trofeos para Luque, y luego reparten tres inopinadas orejas entre lidias menores con estocadas defectuosas. Encastado y serio encierro de Gallardo..."

Un par de burros

Jorge Arturo Díaz Reyes
CrónicaToro, VII 8 2022
Al toro de Pamplona le han quitado cien kilos, le han puesto un año más, pero le han mantenido la seriedad (hasta ahora). Seis negros cinqueños de Fuente Ymbro, con finas cuernas y amplias cunas impulsadas por 535 kilos promedio, dieron mucho para torear, no todos lo recibieron y la mayoría fueron muertos de manera inmerecida. El patrón fue la nobleza, enriquecida por la repetición, con diverso componente de raza. El ganadero y el público destacaron a primero, tercero, cuarto y especialmente al desaprovechado bravo quinto.

Daniel Luque, no se hizo mala sangre por la soberbia ignorante del palco que le agravió, le discriminó y le despojó de la Puerta grande. Su faena con el primero, “Comisario” fue impecable, magistral si se quiere. Comprendiendo las virtudes del toro, abrillantando la fijeza, humillación y codicia y domando sus exigencias y apreturas. Dictó cátedra de sitio, poder, temple y poso. Todo ello en seis tandas, no más. Bajas, rimadas, exactas. Tres de naturales, cada una de a cinco, rematadas con molinetes, forzados y tres vistosas luquesinas ligadas. la última. Las derechas, igual, con cambios de mano, ayudados y de pecho. El público y la banda entregados hasta el gran volapié, la estocada en la cruz y el bravo patas arriba en Los medios, donde había trascurrido todo . El clamor y el vocerío tremendos fueron contemplados despectivamente por Usía y su asesor. La bronca fue de justicia popular y la vuelta al ruedo para el torero con el pañuelo del a todas luces más idóneo “Presidente de Sol”, pusieron de relieve que si la ignorancia no es ningún pecado, presumir e insultar con ella sí pude llegar a serlo.

Lo demás fue lo de menos. Con el cuarto “Impositor” el maestro de Gerena se creció en lentitud, caligrafía y estética. El mando era tal, que pasaba de redondo a circular sin intervalo. Su placer contagiaba y pese a la merienda, centraba. La banda como aprovechando que los músicos aficionados tenían los carrillos ocupados y no podían soplar, acompaño sin competencia con “Gallito”. La faena lo merecía. Pero desgraciadamente la estocada caída y la hemorragia pusieron de nuevo en evidencia a Usía cuando mandó cortar una oreja que pocos pidieron.

Bueno, ya le había dado otra sin petición a Álvaro Lorenzo, torero de vocación estética por una faena compuesta pero poco emotiva con el mansurrón pero dócil tercero al cual dio de baja con un fierrazo trasero y avisado. El toledano cerró correctamente la corrida con el seisañero sexto que fue soso y al cual infirió un bajonazo de comisaría. De milagro no salió el pañuelo de oreja que aquí ya parece de rigor para tales asesinatos. Recuerden ayer la de Morante, y pocos minutos antes la que premió el horrible que le pegó Garrido al quinto, el toro de la tarde, además trasero, tras una faena pueblerina que había comenzado con desarme y que transcurrió toda por debajo de las excelsitudes del gran fuenteymbro. “Infortunado” se llamaba premonitoriamente. Tras la inaceptable cuchillada, su señoría Don Xavier Xagurduy Ortega (concejal - presidente, figura de la corrida), muy majo bajo su chistera le premió salomónicamente con la peluda. Como quien dice, una para cada uno. El extremeño, muy honrado, confesó ante las cámaras: “Estoy jodido por la espada”. Lo menos que merece el rey de la fiesta es que le maten decentemente. ¿O no?

FICHA DEL FESTEJO
Viernes 8 de julio 2022. Pamplona. 4ª de San Fermín. Sol y calor. Lleno total, Seis toros de Fuente Ymbro serios con cara, cinqueños y encastados.
Daniel Luque, vuelta tras petición y broca al palco y oreja.
José Garrido, silencio y oreja.
Álvaro Lorenzo, oreja tras aviso y silencio.

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