Todavía estaban intactas las ilusiones
"...Se esperaba ese mano a mano de los dos toreros triunfadores de la pasada temporada en Madrid. Hablamos de Uceda Leal y de Fernando Robleño, del que aún nos acordamos de su faena extraordinaria con ‘Camionero’ de José Escolar Gil en septiembre pasado..."
Las Ventas: Valdepoco
Jean-Charles Olvera - España
Opinión y Toros/02 Mayo 2023
Fracasó la goyesca del 2 de mayo, que tantos esperábamos, con un mal lote de Valdefresno.
Se esperaba ese mano a mano de los dos toreros triunfadores de la pasada temporada en Madrid. Hablamos de Uceda Leal y de Fernando Robleño, del que aún nos acordamos de su faena extraordinaria con ‘Camionero’ de José Escolar Gil en septiembre pasado.
El pésimo lote de Valdefresno salió desrazado, manso, rajado, suelto, querencioso, cornicorto y dispar. Casi nada. El cuarto, ‘Cigarrero’, fue el único que salvó la ganadería del naufragio. Valdefresno, o mejor dicho Valdepoco, por no insistir más. El sobrero 2º bis de José Luis Pereda que sustituyo el inválido 2º de Valdefresno, no destacó del conjunto, siendo reservón y parado, sin opciones.
El dueto de lidiadores dejo eso sí intacta su torería en este desierto de casta. De José Ignacio Uceda Leal, destacaremos su poderío en el toro que abría plaza y que salía suelto hasta que siguió esa muleta privilegiada del elegante matritense.
Y de Fernando Robleño, esbozó su faena con ‘Cigarrero’ por la zurda, yendo a más con series profundas y rotundas con la diestra, encontrando nuevamente el sitio y conectando con la afición venteña. Pero nuevamente estropeó la oreja prometida con dos pinchazos previos a una entera caída.
Con el pesado último (620 kilos), un toro rajado que salía suelto al tercer pase, le dio una estocada entera efectiva, la misma que nos habría gustado ver ante ‘Cigarrero’ y el mencionado ‘Camionero’ de la pasada temporada. La cuadrilla de Robleño destacó por su profesionalidad, citando a Fernando Sánchez, José Chacón y Andrés Revuelta, habituales grandes peones en Las Ventas.
No obstante, a las dificultades del pésimo lote, los dos diestros ‘gatos’ se fueron con la cara alta y con una fuerte ovación, casi similar a la que escucharon tras romper el paseíllo. Dos toreros madrileños muy queridos en esta plaza que casi llenaron y a los que la suerte se les escapó; esa suerte que hubieran sido esos toros de Valdefresno que esta tarde fueron Valdepoco, por no insistir más.
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