Justicia para Colombo / por Rafael Comino Delgado

Pamplona 2024 / Miuras

"..Colombo es un torero que habla con su capote, sus banderillas, su muleta y su espada, y con todo ello ¡está clamando justicia! al llamado “sistema”, que tanto daño le está haciendo al toreo.."

Justicia para Colombo

Rafael Comino Delgado

Se llama Jesús Enrique Colombo, es venezolano, vino a España a hacerse torero y triunfar. Se ha hecho torero, y triunfa cada vez que sale a un ruedo, pero aquí, en la madre patria, en España, no se le está haciendo justicia, en nuestra opinión.

Es un torero muy completo, con unas condiciones excelentes para ser figura, pues maneja muy bien el capote, con el que es muy variado, pone banderillas con gran solvencia. Con la muleta, cuando el toro lo permite, hace el toreo bueno, y cuando no, lidia con gran técnica y poderío, y con la espada, como se suele decir en el argot taurino, es un cañón. Además de todo ello, es un torero muy inteligente, que sabe siempre hacer las cosas que le toro pide, para sacarle el máximo de lo que lleva dentro y conseguir, también, el máximo lucimiento. En resumidas cuentas, podemos decir, que es un torero que da mucho espectáculo, que emociona a los tendidos, y el toreo es emoción, que viene por la vía del riesgo (es el único arte que necesita ser validado con el riesgo) y por la vía de la estética. Como consecuencia de todo ello, tanto en hispano-américa como en España, prácticamente, cuenta sus actuaciones por puertas grandes, pero aquí no se le están dando los carteles que merece. Por el momento no está en las ferias importantes, algo que no comprendemos ateniéndonos a sus méritos. Este año ha ido a los san Fermín, en Pamplona, pero con la corrida de Miura, que ya mató el pasado año 2023, y triunfó con ella saliendo a hombros tras cortar dos orejas. 

Pamplona 2023 / Miura

Gracias a ello, y a que Pamplona es una de las pocas plazas en las que se suele hacer justicia, repitiendo a los triunfadores, este año ha repetido, y ha vuelto a salir a hombros tras cortas tres orejas, a un lote inservible para otros. Su primero con mucho peligro, y su segundo embistiendo sin humillar, sin transmitir, pero al que supo darle la lidia adecuada y matarlo en el momento justo, para emocionar al público.

Así pues, Colombo es un torero que habla con su capote, sus banderillas, su muleta y su espada, y con todo ello ¡está clamando justicia! al llamado “sistema”, que tanto daño le está haciendo al toreo. Estamos viendo toros desde el año 1950, y sabemos que siempre ha habido injusticias más o menos evidentes, y más o menos considerables, pero tanto como lo que estamos viendo en la actualidad, nunca antes lo habíamos visto.

 Los puestos de las ferias importantes se los reparten unos cuantos, muy poquitos, que se llaman las figuras, pero que realmente no todos lo son, ya que algunos de no estar protegidos por ese “sistema” durarían poco tiempo en los primeros puestos el escalafón.  

Yo creo que todo ello le está haciendo mucho daño al toreo, está echando a muchos aficionados de las plazas de toros, cansados de ver siempre a los mismos hacer lo mismo, con corridas descastadas y desrazadas, las cuales dicen casi nada al aficionado que busca fuertes emociones. Toreros como Colombo, como Escribano, tan completos, tan poderosos, que dan siempre tanto espectáculo, deberían estar en todas las ferias por méritos propios, porque se lo han ganado en el ruedo, pero la realidad es que no están, y pedir justicia para ellos, me temo que es como “clamar en el desierto”. No obstante, nosotros lo hacemos, por si algún empresario nos lee y se decide a seguir el ejemplo de Pamplona.