"..Las fundaciones masonas han invertido miles de millones de dólares en crear el movimiento indígena contra España. Campaña que comparte esta nueva presidente comunista Sheinbaum, de raiz sefardí a quien yo recomendaría leer e instruirse un poco para entender que España no tiene nada por lo que pedir perdón.."
Pida usted perdón, señora Presidente
Eduardo Balbás
Claudia Sheinbaum, toma hoy posesión de la presidencia de Méjico. Dudo que se digne a pedir perdón a S.M. el Rey y al pueblo español, que Don Felipe representa, por la extemporánea acusación a nuestro país de haber exterminado a los pueblos indígenas del antiguo territorio Anáhuac.
Esta nueva presidente electa de Méjico, como su antecesor, Lopez Cobrador, propagan la leyenda negra inventada por ingleses, holandeses y más tarde estadounidenses (con la posterior colaboración de nuestros exiliados de la Segunda República viviendo muy acomodados allí con parte del botín robado del Banco de España y de la mejor colección de numismática del mundo), aunque dudo que crean realmente en ella. Hay un componente de complejo, estigma mejicano, que ayuda a sostener el falsario movimiento Woke, ese vil revisionismo basado en el relativismo y el oportunismo.
Tanto el corrupto López Cobrador, como la populista podemita Claudia Sheinbaum están tan justos de neuronas, que podría pensarse que creen lo que dicen; pero no, mienten intencionadamente para desviar la atención de los graves problemas internos de su país.Su mero aspecto físico, nombre y apellido contradicen lo que afirman.Pero esa demagogia y total ignorancia de lo más básico son muy propias del submundo podemita y de la Izquierda en general.
Méjico se independizó de España hace ya más de dos siglos, pero curiosamente, para esta gentuza descendiente de los criollos, la culpa de los problemas actuales de Méjico la tenemos nosotros. Estos cínicos y corruptos descendientes de criollos que traicionando a España se rebelaron en 1.821 y luego se independizaron (los indígenas que desde tiempos del descubrimiento fueron respetados, protegidos y considerados súbditos españoles, lucharon en gran número a favor de la Corona y contra la independencia, seguramente porque conocían a los criollos y sabían lo que les esperaba) son quienes desde la Guerra de Independencia han maltratado, esclavizado y asesinado a los indigenas y quienes han empobrecido ese riquísimo país gobernándolo pésimamente. Desde que Méjico dejó de ser Nueva España, el nivel y la calidad de vida no solo bajó enormemente entre su población, sino que perdieron mucha influencia a nivel mundial además de enormes extensiones del territorio heredado de España a manos de lis estadounidenses: Nuevo México, Texas, California, Colorado, Texas, Nevada, Utah y parte de Wyoming. Tal vez estos dirigentes descendientes de criollos,que son tan ignorantes como corruptos, ladrones e ineptos y que llevan mal gobernando Méjico desde hace dos siglos, deberían pedir perdón a su pueblo por tanto continuo desastre.
Las fundaciones masonas han invertido miles de millones de dólares en crear el movimiento indígena contra España. Campaña que comparte esta nueva presidente comunista Sheinbaum, de raiz sefardí a quien yo recomendaría leer e instruirse un poco para entender que España no tiene nada por lo que pedir perdón. Y Méjico mucho que agradecer a Hernán Cortés (auténtico creador de Méjico, ya que antes de él no existía un país, sino una serie de tribus y culturas sojuzgadas por el Imperio Azteca). La América anterior a 1.492 se asemejaba más a un auténtico infierno que a ese falso paraíso indígena. En las tierras que hoy ocupa Méjico, la tiranía azteca de Moctezuma tiranizaba y esclavizaba al resto de poblaciones indígenas. Secuestraban brbés para matarlos en sacrificios humanos que duraban tres meses ininterrumpidos al año, tiempi en el que 40.000 indígenas eran asesinados, extraidos sus corazones, amputados sus miembros y cocinados sus cuerpos para alimentar a lis guerreros caníbales. Hernán Cortés acabó con aquel terror sangriento gracias al ejército de 100.000 nativos que se levantaron contra la tiranía azteca.
Después los españoles se mezclaron con lis indios, no los exterminaron como si hicieron los ingleses en todo el territorio que hoy ocupa EE.UU. y franceses en Canadá. Construyeron lo españoles, junto a natuvos, el Virreinato de Nueva España, haciendo de la ciudad de Méjico la capital de la Hispanidad, la urbe más importante del Imperio. Y los españoles no se llevaron su oro, como la piratería inglesa y los saqueadores galos. El oro lo emplearon en construir universidades, catedrales, escuelas e infraestructuras que han quedado para la posteridad. Fueron las clases dirigentes del México independizado, los ascendientes de López Cobrador y de Sheinbaum quienes maltrataron a los indígenas y empobrecieron un territoritorio que, cuando lo entregó España, ocupaba desde Costa Rica a California y Luisiana, mucho más grande que EE.UU. hoy, que se apropió de enormes extensiones de su territorio, además de todo el oro de California.
La carta que envió el miserable ladronazo López Cobrador a nuestro Rey Felipe VI, fue otro acto de cobardía al no atreverse a reclamar nada a EE.UU., además de una forma de desviar la atención de los gravísimos problemas de su país donde co-gobiernan los clanes de narcos, donde no hay la menor seguridad física ni jurídica y donde se deslocalizan y marchan empresas nacionales y extranjeras por lo dicho y porque la economía va muy mal. Sus Compañías Eléctrica (CFE) y Telefónica México, semi quebradas, como PEMEX y otras grandes compañías estatales.
La nueva presidente Sheinbaum es quien debe pedirnos perdón al Rey y a los españoles, por su descomunal ignorancia (confundió nada menos que en cinco siglos la fecha de la fundación de la ciudad de Tenochtitlán, fechada en 1.325. Ella creía que tenía solo doscientos años); también por “comprar” el relato anglo-francmasón contra España y contra la Cristiandad, y por invitar a su investidura del cargo al genocida Maduro, al cubano Díaz Canel y a los representantes españoles de Podemos, de Bildu y de Sumar, que les parece muy bien que se insulte a España y que ojalá no regresen.
¡Pida usted perdón señora Sheinbaum!.
¡Totalmente de acuerdo, Sr. Balbás! Bien dicho, bien informado, y bien propuesto... que se dignase la nueva presidenta, Sra. Sheinbaum, en reconocer el mérito de la España actual --y la de antaño-- como lo ha marcado Vd. aquí en esta especial ocasión política (diríamos histórica pero queda inmerecido).
ResponderEliminarY mire Vd. que lo dice un mexicano de pura cepa.
Dios quiera que no suceda lo mismo con la candidata KamaLAUGH en los EE.UU., es decir, en lo que respecta a su indignante ignorancia e ineptitud. Tal vez esta señora no sabría por dónde empezar para localizar España en el mapamundi. En este caso la Sra. Harris es toda una vergüenza sonriente.
El temor es que los liberales quieran avivar el fuego progresista ahora que generen toda una ola "celebrando" dos féminas en sus respectivas presidencias. Una promulgando con vítores la postura de la otra, aunque ambas sean una verdadera decepción y calamidad de antemano.
Decían unos antiguos políticos de México: "tan lejos de Dios... y tan cerca de los Estados Unidos."
Son una auténtica amenaza en tantas y tan diversas vertientes cuyo presagio es nada alentador. Es un verdadero temor por el terror que conllevan estas dos falsedades y temibles falacias para con los destinos de ambas naciones.
Dicho sea de paso pero con toda sinceridad y franqueza: ¡Viva España! Madre patria.