SEVILLA, UN INTRCAMBIO DE CARIÑO
Por la calle Rioja, el primero.
Caminando, de frente me encuentro con este amigo, una especie de hombre a extinguir, si nadie lo remedia, de la Triana-Sevilla que siempre fue, como es mi amigo Francisco Agar "Paquito Bulerías". Una persona de las que emana por sus poros, arte, cariño y bondad. Siempre con una sonrisa, y del que solo sale por su boca dulzura hacia los demás. Así, siempre igual, desde chaval.
Después de despedirme de él sigo caminando, tuerzo a la izquierda por calle Velazquez y entro en La Teatral, y allí veo al segundo (a este sí iba a buscarle), a mi amigo "Manolín de la Teatral". Grandiosa persona, que cada vez que ha toreado en La Maestranza mi amigo del alma Curro Romero, siempre me reservaba dos barreras para dichas corridas. Hoy, después de tantos años sin, son otras dos las que me ha guardado para asistir al Festival en honor a Curro y a Beneficio de la Hermandad de los Gitanos. Las he retirado, aunque se haya aplazado para el próximo domingo
Salgo con mi sobre de entradas, feliz de haber estado con mi amigo Manolo y su hija. Es un gustazo el sincero calor de sevillanía que me llevo al haberles visto de nuevo.
Sigo caminando y me dirijo al Mercao del Arenal no sin antes pasear, bajo una pequeña lluvia que me refrescaba la cara y los recuerdos, por calles como Almansa, Zaragoza o Gimios. !Qué silencio!. !Qué soledad por esos adoquines!. !Qué bonitas mis "chicotás"!. Iba, soñando con el mundo que se nos fue. Mu despacito. cómo si de un paseillo Maestrante se tratara.
Ni una cara extraña. Ni un "bien venido" grupo de turistas. Siempre se paseó y se saludó, por esa zona con mucho arte.
!Hola D. Baldomero! !Me alegro mucho de verle amigo Trifón!. ¿Cuando has llegado Manolito? Está mañana amigo Trifón. !Qué alegrïa de verte niño!. Se acaba de ir el Coronel Hinojosa, le hubiera encantado verte.
Y a mi también me habría gustado mucho verle a él,
!qué lástima!
Y así sigo caminando feliz por esas callecitas dentro de mi sueño hasta llegar al Mercao del Arenal en el que me encuentro al tercer hombre, a mi gran amigo Antonio Donaire "El Morito". Anfitrión del que llega, del que está y de todo el que se precie. Él es un Auxilio Social Ambulante. No puede ver a un tieso. Enseguida lo "destiesa". "Ponlo tú", Frase histórica de armonía.
Nos dimos un beso al saludarnos y como casi siempre, su cantinela: "Tengo que ir a ..."
No para, siempre activo y con el 'nuo de la corbata flojo y de lao".
Bueno, venga, Antonio, nos vemos el domingo 20 en el festival.
Está vez es verdad, se tenía que ir. Es su actividad. Su inquietud. Así es la cosa con él.
Por Reyes Católicos tomo dirección al parking del Corte Ingles y después de pasar por el Cairo oigo un !Eje Manuel!. Vuelvo la cara y era otro histórico amigo de los que da alegría encontrarte en el tiempo que estás viviendo. El cuarto hombre, mi amigo Manuel Vasco. Un elegante y entrañable señor. Gran profesional de la fotografía y de reportajes de época. Tiene, o mejor dicho, tengo media vida rociera y social impresa de sus preciosas instantáneas. !Qué arte! !Que gusto da verle por ese Camino con su sidecar peregrino!. Desde que le conozco, siempre igual. Todo un señor. Sale a la calle como yo siempre digo que hay que salir a calle, a dar cariño. A hacer agradable al mundo que te rodea. !Que bastante tenemos!...
Nos despedimos también hasta el domingo.
Saqué el coche del parking y continúe mi ruta feliz con una nueva inyección de Sevilla puesta camino del Rancho del Rocío a ver a mi compadre Rafael.
!Qué buena vacuna, hío!
Manuel Herrero Presa
(Sobre la marcha, pero hoy con algunas parás en el "Camino".)
(Las cosas del directo...)
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