Cuando te enteras de una noticia así, la duda se te mete en la cabeza y crees que no podrás con los estudios, la familia, la situación y el embarazo…y de repente te hablan de ser feliz con tu hijo. De que todo pasa, pero tu hijo no…Eso es lo que necesitas oír. Eso es lo que me dijeron y ayudaron a reforzar mi decisión para seguir adelante. Me demostraron que me iban a acompañar en lo que necesitara en esta época de mi vida y que nunca iba a estar sola.
¿Qué supuso para usted la experiencia de ser madre?
Fue un momento complicado, estaba en tercero de carrera.. A pesar de todo lo que tienes: los estudios, los amigos, el que era mi novio, que parecía que me llenaba…nada, nada es comparable a la sensación de tener a mi hijo en mis brazos. Se que suena cursi. Pero es como si fuera imposible ser más feliz.
¿Por qué decidió luego ayudar a hacer rescates y cómo le transformó su vida?
Necesitaba ayudar porque yo fui la primera que necesité apoyo, sobre todo tuve a alguien que me pudo escuchar cuando casi nadie entendía mi decisión. Necesitaba decir a las madres que dudan que los agobios son temporales, que aunque el entorno te presione para abortar es tu vida, que es tu hijo, no de los demás. Necesito explicar a la sociedad que matar a tu propio hijo te destruye por dentro. Y eso no se puede arreglar.
¿Por qué, dentro de sus estudios de psicología, decidió hacer un trabajo sobre la relación entre el aborto y la depresión?
Porque estoy ahora muy en contacto con mucha gente que ha abortado. Y la depresión es el común denominador de todas las mujeres que han abortado. Cada día estudio, leo… me informo de cómo es el síndrome post aborto y el sufrimiento que este puede conllevar.
Desde la psicología se estudia en profundidad el mencionado síndrome y las secuelas que puede dejar en la madre que aborta…
Estoy ayudando a hacer una encuesta en MasFuturo. Y llevamos cientos de testimonios. Muchas han abortado hasta 4 y 6 veces y están mal, muy mal. Necesitan reparar y rescatar a otros bebés para paliar esa parte del corazón que está muerta.
¿Cómo le han ayudado todas estas experiencias a crecer en la fe?
Yo era creyente, pero estaba bastante alejada de la fe y esta situación me ayudó a dejarme llevar de su mano y crecer mucho en mi fe. Creo que Dios me ha ido aconsejando y guiando y Él me ha dado ese paraguas que te hace sentir protegida y que estás haciendo las cosas bien. Pero una persona cercana me dice que aún me queda mucho para seguir creciendo en la fe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario