miércoles, 7 de agosto de 2024

El toreo es una mierda / por Javier Lorenzo


'¿Para qué se va a jugar la vida un torero si no hay recompensa, dinero ni contratos? Por eso el toreo es una mierda. Esa es la vergüenza a la que lo han llevado y que viven y sufren toreros modestos y los que no lo son. Y los aficionados. Aquí ya no vale ni el dolor ni los triunfos que antes se respetaban. Así están las cosas, sin abrir paso al futuro ni a las caras nuevas.'

Javier Lorenzo 
La Gaceta/Salamanca, 7 Ag. 2024
A los triunfadores le cierran las puertas y los triunfos no se ven compensados en contratos. A los que se juegan la vida los ningunean; incluso a los que se dejan matar no les sirve de nada. Así está el toreo por antojo de la clase empresarial que solo sabe contratar a las figuras y, para hartazgo de la afición, repitiendo carteles que lleva anunciando en los últimos veinte años sin dar paso ni a las novedades ni a los triunfadores. La clase empresarial ha demostrado su mediocridad. El futuro de la fiesta le importa un bledo y ha convertido al toreo en una mierda.

Porque una mierda es que un torero, por ejemplo como Ureña, esté en su casa parado y sin torear después de una vida entera de tardes épicas en las que ha protagonizado hazañas históricas en los principales escenarios del toreo que cayeron en saco roto. Un caso sangrante.

Sangrante es que Fernando Adrián salga dos veces por la puerta grande de Las Ventas en 2023 y apenas le hagan caso. Ni siquiera se lo hicieron en San Isidro, donde le ningunearon y tuvo que intervenir la Comunidad de Madrid para hacer un hueco en la Beneficencia, donde tuvo la osadía de volver a abrir la puerta grande por tercera vez consecutiva. 
No está teniendo recompensa como merece la temporada de otra novedad, la de Borja Jiménez. Ni las dos puertas grandes de Madrid, ni la cornada, ni las dos orejas de San Fermín, ni tampoco la precipitada reaparición para matar seis toros en solitario. Gestos en el vacío. 
Damián Castaño se jugó la vida con toda su verdad a cuestas ante dos marrajos de Escolar en San Isidro y ni le echaron cuentas ni se las van echar como merece.

Las empresas solo saben anunciar al sota, caballo y rey que está herméticamente protegido. Tanto que ahí tienen el fracaso memorable que casi nadie se atreve a escribir de Talavante en Madrid este San Isidro con cuatro toros de claro triunfo con los que naufragó y nada le va a afectar en su carrera. Da igual lo que pase en el ruedo. Ni un fracaso tan evidente como este pone su carrera en la picota, como tampoco altera como debiera los triunfos de toreros anónimos que no gozan del respaldo de una casa empresarial fuerte, que son las que manejan los hilos del toreo entre la mediocridad y la falta de escrúpulos. El toreo ha dejado de fluctuar con el único beneficio de su egoísmo. Del egoísmo de las empresas, claro.

Tal mal está el toreo que Talavante tras su fiasco en Madrid no solo sigue en todas las ferias sin nada que le altere si no que cogió la mayoría de las sustituciones de Morante antes del regreso del maestro. Esa es la situación, la realidad y el drama del toreo. Ureña fue capaz de firmar una antológica tanda de naturales con la clavícula rota, cautivó con una verdad estremecedora y está en su casa viendo como se anuncian las ferias sin que nadie se acuerde de él. Y Adrián y Borja y todos los toreros que ustedes quieren que no conocen porque las empresas son incapaces de ilusionar a la afición.

¿Para qué se va a jugar la vida un torero si no hay recompensa, dinero ni contratos? Por eso el toreo es una mierda. Esa es la vergüenza a la que lo han llevado y que viven y sufren toreros modestos y los que no lo son. Y los aficionados. Aquí ya no vale ni el dolor ni los triunfos que antes se respetaban. Así están las cosas, sin abrir paso al futuro ni a las caras nuevas. Y si lo que pasa en el ruedo no tiene recompensa ni valor, la tauromaquia no tiene sentido. Sin pudor, están dejando el toreo hecho una mierda.

5 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo. Ferias cerradas con meses de antelación.Triunfos sin ninguna o mínima repercusión. Aborregamiento del público. El caso del Talavante actual es sangrante. Una mierda, bien resumido.

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  2. Toda la razón!!! Que injusticia para un torero como Paco Ureña!!!

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  3. Borja y Fernando Adrian si estàn toreando. El toreo es una mierda porque la gente va a ver a ciertos toreros y a otros no los va a ver. Y como las empresas no son tontas, ponen a aquellos que llevan gente a sus plazas.

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  4. Javier ponte un diez. Tienes toda la razón
    Todo son cambalaches. Los empresarios se están cargando la Fiesta. Un abrazo. Pepe Monteserin

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