Manolete, el bodrio / por Pla Ventura

 

"..Horrenda, burda, nefasta, insufrible, asquerosa, inmunda, inaceptable y todos los calificativos que le queramos añadir son propios de un esperpento como el citado en el que, lo único que consiguieron fue mancillar el nombre de uno de los grandes toreros que en España hemos tenido.."

Manolete, el bodrio

Pla Ventura

Toros de Lidia/14 mayo, 2024

Confieso que no había visto antes la película, Manolete, la que pude ver el pasado domingo “gracias” a TVE. Yo creía, inocente mío que, la televisión que pagamos todos, como quiera que estamos en plena feria de San Isidro, dicho ente emitía la película como un enaltecimiento a la fiesta de los toros, justamente por lo que decía, por aquello de estar viviendo el mes taurino por antonomasia. Craso error el mío cuando comprobé el bodrio que supuso dicha película que, para mayor escarnio costó veintiocho millones de dólares, se rodó en el año 2006 y estrenó seis años más tarde pero, en realidad, jamás debería de haberse estrenado.

Dicen que Manolete fue financiada por Francisco Hernando El Pocero junto con el Ministerio de Cultura que, lógicamente, si de cine se trata pagan lo que haga falta, tal y como lo han hecho en cientos de películas de similar calado horrendo como la citada, eso sí, si de toros hablamos, la irrisoria cifra de treinta y cinco mil euros que se donaba a la tauromaquia, han sido eliminado por el indeseable Urtasun. A ver si el citado tipo tiene cojones para quitarle las subvenciones al cine.

Al final, la productora y El Pocero se buscaron una ruina de época con dicha filmación, cosa lógica porque si eso es una película de toros, que resucite Manolete y lo compruebe. Al final, como pudimos saber, dicha película recaudó en las taquillas poco más de doscientos mil euros, que todavía me parece mucho al comprobar la burla hacia el mundo de los toros de dicho filme.

Si tuvo de bueno una cosa, que el protagonista le daba un aire a Manolete, nada es más cierto. Como Penélope Cruz, partidaria de la erradicación de la fiesta de los toros pero, como dirían los catalanes, “la pela es la pela”. O lo que es lo mismo, dame pan y dime tonto. La muy asquerosa se prestó, por dinero, para interpretar el papel de puta que, según cuentan, así era Antoñita Bronchalo, más conocida como Lupe Sino. Y ese Adrien Brody bien podía haberse quedado en su cada y seguir interpretando películas, pero jamás de toros porque gracias a él hemos sabido lo que es un esperpento. Juan Echanove hace las veces de apoderado mientras que, Santiago Segura es el mozo de espadas, pero, ¿cómo podemos hablar de cuestiones taurinas si en dicha película no se ven los toros por ninguna parte? Y lo más horrible de la cuestión es que, por ejemplo, Juan Echanove es un buen aficionado a los toros, razón de peso por la que nos seguimos preguntando por qué se prestó a dicha parodia; hombre, diría el otro, por dinero.

Insisto, esta película ha sido una tremenda ofensa hacia el gran Manuel Rodríguez Manolete y un escarnio sin precedentes contra la fiesta de los toros. Ya tengo claro porque no se estrenaba y más aún, los motivos de su fracaso con estrépito. Y mientras cuento todo esto, inocente de mí que, como tantos, me tragué la bola de que TVE homenajeaba a la fiesta de los toros por aquello de que estamos en San Isidro. Y, para que la desgracia fuera todavía mayor, el asesor de dicha parodia no fue otro que Cayetano, siendo así, lo lógico era lo que ocurrió, un fracaso de época.

Todas las películas que se ha rodado del tema taurino, todas, sin distinción, han tenido como eje central la propia fiesta y, sin duda, la vida de alguno de sus protagonistas que, sin llegar a ser ninguna obra de arte, todas tuvieron la dignidad que merecían, incluso, en muchas ocasiones, hasta el beneplácito de la crítica, es el caso de Juncal, por ejemplo, que en las manos de Paco Rabal hizo una obra maestra contando la historia de un viejo torero arruinado, pero con la gracia que le caracterizaba y con el argumento que correspondía, cautivaron al personal, la prueba es que, tantos años después, seguimos viendo Juncal y nos emocionado de nuevo.

Horrenda, burda, nefasta, insufrible, asquerosa, inmunda, inaceptable y todos los calificativos que le queramos añadir son propios de un esperpento como el citado en el que, lo único que consiguieron fue mancillar el nombre de uno de los grandes toreros que en España hemos tenido. Imagino que, si dicha película se hubiera rodado estando Manolete vivo, con toda seguridad hubiera denunciado a esa panda de golfos que por dinero vendieron su alma al diablo para manchar el nombre de un torero de época, Manuel Rodríguez Manolete.

Vemos al auténtico Manolete junto a su amada, Lupe Sino. Por cierto, no tiene nada que ver la horrible película citada con las biografías de todo lo bello que se ha escrito sobre el torero de Córdoba.