"...El Toro de la Pega es el toro de las mentiras que tenemos a diario en contra, de todo lo falso que se dice sobre el mundo del toro. No se paran en ponernos a parir por el toro ese famoso, que nada tiene que ver con la tauromaquia de toros y toreros en las plazas..."
El toro de la Pega
No, no, no voy a escribir del toro ese tan famoso estos días que tanto preocupa a tantos malditos medios informativos, que le han dedicado más espacio en estas fechas a lo falsamente taurino que en todo lo que llevamos de año y que lo harán en lo que resta. O sea, nada y mal de triunfos y noticias, salvo las tradicionales cornadas que tanto les gusta difundir.
Voy a escribir del Toro de la Pega, con P de pasmo, de tantos toros de la Pega que nos ponen. Pega es obstáculo o impedimento en el diccionario y decir en español “ de pega” es referirse a actuar de mentira, falso , fingido. ¡Y hay que ver los obstáculos e impedimentos que ponen al mundo del toro y las mentiras, noticias falsas o farisaicas que tenemos que soportar!.
El Toro de la Pega es el toro de las mentiras que tenemos a diario en contra, de todo lo falso que se dice sobre el mundo del toro. No se paran en ponernos a parir por el toro ese famoso, que nada tiene que ver con la tauromaquia de toros y toreros en las plazas, sino que recuerdan además –apoyándose en lo de Tordesillas- todo lo malo que se hace por las calles de España y que no gusta a los que amamos y admiramos muchísimo al toro pero que se escuda en la tradición en este pueblo español que se las trae para tantas cosas…Cómo disfrutan estos días tantos malditos medios informativos.
No le harán una larga entrevista a Jiménez Fortes y su vida entregada a diario en las plazas y viendo su fuerza de voluntad.
Ni un reportaje como se merece a Paquirri Segundo (Francisco Rivera Ordóñez) que su padre dio la vida por esto, Paquirri (Francisco Rivera Pérez), y él acaba de dar mucha sangre. Menudo ejemplo de vocación, pues nada…Ni a Perera, gran noticia la de un hombre cuya pasión es tal que, millonario y famoso, sigue buscando la gloria en la arena y jugándose la vida y estar a punto de perderla. Ejemplos tremendos para la sociedad que tantos malditos medios informativos desprecian porque a ellos lo que les gusta es el Toro de la Pega. A estos tres matadores famosos se la han pegado. También en el habla diaria española se dice que “se la pega” cuando van conduciendo mal o cuando lleva un mal camino en la vida. O se la han pegado cuando lo han engañado con un timo o cualquier clase de mentira a ser posible bastante dañina.
Y vaya cancha que le han dado al maldito holandés, espontáneo del infierno, al que no encuentra el omnipresente y todo poderoso Moeckel porque se ha escondido como una rata. Tampoco dicen nada tantos malditos medios informativos porque no es un Toro de la Pega.
Mienten, falsean, impiden que llegue la verdad a la masa y afirman que los toros viven de las subvenciones. Les enloquece la maldad y no digamos el Toro de la Pega. Nunca dicen que hay muchas plazas propiedad de entidades públicas que reciben mucho dinero por los contratos firmados con estas propiedades (Madrid a la cabeza) ni insisten en que los toros sufragan, a través de los sanfermines, la Casa de Misericordia de Pamplona, donde tantos mayores tienen un vejez espléndida. Y tantos ejemplos así. Que busquen todas las plazas de toros que son propiedad de Comunidades, Diputaciones y Ayuntamientos. Todas sacan tajada del toreo.
El Toro de la Pega se apresurará a exhibir, a magnificar y a repetir todas las manifestaciones, aunque sean de cuatro o cinco, frente a las plazas y dará toda la cobertura del mundo a los espontáneos pagados, por Holanda o por quien sea, y no digamos si algún abominable personaje quiere pegar a un torero o llamarle asesino. Tendrá cobertura total. Entonces no está esa excusa tan manida de la falta de tiempo para no informar o hacerlo corto y mal. Todos los minutos que quieran. Siempre a su disposición.
No van a hacer reportajes a las ganaderías donde ven cómo se cuida a los animales, sean toros, caballos, perros, a los que se quiere y mima como en ninguna parte. Siempre en libertad total y no como a esas mascotas permanentemente agarradas del cuello por una soga y haciendo en cada momento lo que les dice el dueño, les guste o no. Eso no interesa porque no es el Toro de la Pega.
Y no nos dejan escuchar a los matadores –salvo a los bestias que les llaman asesinos- para ver hasta dónde llega su amor al toro, su vocación por criarlos y ofrecerles la mejor vida. No, no, sólo voz para los que vociferan tortura cuando a los que sacrifican pollos, cerdos, a de toda clase de animales domésticos etc a nadie se les ocurre llamarlos asesinos (gracias a Dios porque no lo son). Todos esos para los animalistas, antitaurinos o simplemente animales (animales peores que los irracionales) son estupendos y encima se los comen. No han visto cómo se matan a los cerdos en determinados lugares, enganchándoles el cuello con un pincho enorme ante y delante de sus hermanos, supongo aterrorizados, viendo la escena hasta que les toque a ellos minutos después. Me quedé helado la primera vez que lo vi. Incluso algunos se bebían la sangre del hermano herido creyendo que no iría con ellos el tema. Tampoco se preocupan por los mariscos cocidos vivos salvo para comérselos. Y estos cerriles no quieren admitir que los animales están para servicio del hombre desde que el mundo lo es. Y, por supuesto, hay que tratarlos lo mejor posible en vida y en muerte.
Los del Toro de la Pega no se fijan en la vocación admirable de Enrique Ponce, 30 años vistiéndose de luces y pensando en abrir nuevos caminos y perfeccionar los que hay. Que me digan otro caso de alguien jugándose la vida durante tantísimos años e ilusionado como nadie después de tanto tiempo.
Los del Toro de la Pega no reconocen los valores que tienen los matadores de toros y que son desconocidos o no practicados por gran parte de la actual sociedad española : valor, vocación, trabajo, méritos, sacrificio, preparación, entrenamientos intensivos, respeto a los demás. Todos los niñatos y maduritas que gritan como energúmenos no serían capaces de llevar ni un minuto el supongo incomodísimo vestido de torear ni serían capaces de soportar el calor que debe dar.
Los del Toro de la Pega no dicen cuántos pasodobles, obras de teatro, esculturas, pinturas, novelas le han dedicados a otras actividades no taurinas y que comparen. Todas las Bellas Artes se concentran en la Tauromaquia.
Los del Toro de la Pega no quieren reconocer la cantidad de genios y personajes famosísimos que admiraron y plasmaron en sus trabajos lo que es el toreo. Eran tontos y asesinos según sus acusadores, que deben ser angélicos y listísimo.
El Toro de la Pega es el Toro de la Mentira. Y tantos malditos medios informativos tienen la culpa de que esto suceda. ¿Por qué está ahí Más, antes Arturo y ahora Artur sino es porque tantos medios informativos lo han sacado todos los días durante años en todos los telediarios sin que fuera noticia y sí denigrante publicidad? . Un engaño que podríamos ver haciendo debates informativos sobre la actuación de los medios. ¿A quién debemos el Podemos y su coleta? Pues a televisiones entregadas en cada gran programa a ellos. ¿Y por qué están ahí Monedero, Errejón y tantos personajes abyectos de la derecha y de la izquierda dándoles coba y minutos en lugar de informar? Y personajes, personajillos y personajetes del PSOE y del PP sacando en la tele y en los demás medios todas las gilipolleces que dicen.
Desde niño escuché mucho lo de la pega. Mi padre a empleados y a todo el mundo daba órdenes así : “Rápido y además sin pegas”. Es decir, no me vengan con problemas y con excusas o poniendo inconvenientes. Y algunos de sus subordinados lo aprendieron bien y lo repetían cuando llegaban a tener poder.
En el Toro de la Pega hay muchos falsarios, hipócritas, mercenarios, sepulcros blanqueados que estarán seguramente de acuerdo con el aborto, en la matanza de tantos inocentes, pero que defienden a los animales o no mueven ni un dedo por tantos como se mueren de hambre o lo están pasando terriblemente mal como vemos ahora a diario en los noticiarios.
Toros de la Pega hay muchos y a nosotros nos están fastidiando sobremanera.
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