la suerte suprema

la suerte suprema
Pepe Bienvenida / La suerte suprema

jueves, 3 de abril de 2014

Messi en el laberinto del Cholo / Por Juan Manuel Rodríguez


"...Y si Messi no intervino o lo hizo poco y cuando lo hizo no sirvió realmente para nada no fue, a mi modo de ver, porque anoche no tuviera ganas, no quisiera o se hubiera levantado de la cama con el pie izquierdo de las estrellas sino porque en el banquillo del equipo rival había un entrenador de fútbol. Este Atleti es lo más parecido que recuerdo al Real Madrid de Mourinho, un equipo trabajado tácticamente hasta el último detalle, intenso desde el minuto uno hasta el doscientos cincuenta, desesperante para el rival, desmoralizador, agotador, unido... Empieza a dar cierta pereza jugar contra este Atleti y eso es culpa de Simeone, que es un entrenadorazo...."


Messi en el laberinto del Cholo

2 de Abril de 2014 
Del Real Madrid-Barcelona que decidía la Liga destacó por ejemplo la libertad de movimientos que Ancelotti le regaló a Messi. Si Messi sobresale del resto de compañeros es muy difícil hincarle el diente al Barcelona, y aquel día Messi estuvo soberbio, marcó un hat trick y participó en la mayoría de jugadas de ataque de su equipo. Sólo hubo para mí alguien más decisivo aún que el argentino en aquel encuentro y fue el árbitro pero a Undiano Mallenco no se le podía parar en la pizarra y con Messi al menos se podía intentar. El Madrid ni siquiera lo intentó y Leo actuó con insospechada, e imagino que agradecida, libertad por el campo durante los 90 minutos. Como Cristiano, Messi es un acaparador de titulares, un imán para elogios y reproches: al día siguiente del Real Madrid, 3 - Barcelona, 4, Leo volvió a erigirse para el periodismo deportivo en el líder de los culés. En resúmen: Messi resucitó en el Bernabéu. O quizás le resucitaran.

Si todo el mundo destaca el partidazo de ayer de Iniesta es porque Andrés estuvo ciertamente soberbio, sí, pero también porque la participación de Messi fue desigual e improductiva. Ahí sí, ahí Iniesta suele darse cuenta de que hay que tirar de galones y llega por detrás encabezando la segunda unidad culé. Y si Messi no intervino o lo hizo poco y cuando lo hizo no sirvió realmente para nada no fue, a mi modo de ver, porque anoche no tuviera ganas, no quisiera o se hubiera levantado de la cama con el pie izquierdo de las estrellas sino porque en el banquillo del equipo rival había un entrenador de fútbol. Este Atleti es lo más parecido que recuerdo al Real Madrid de Mourinho, un equipo trabajado tácticamente hasta el último detalle, intenso desde el minuto uno hasta el doscientos cincuenta, desesperante para el rival, desmoralizador, agotador, unido... Empieza a dar cierta pereza jugar contra este Atleti y eso es culpa de Simeone, que es un entrenadorazo.

Messi lleva atrapado en el laberinto del Cholo desde el 16 de diciembre de 2012, ya hace de aquello más de un año. El argentino lleva 5 partidos sin marcarle un gol al equipo rojiblanco cuando hasta entonces había sido su "bicha". El mérito del Atlético de Madrid es que puede plantarse en las semifinales de la Champions con un equipo que, futbolista a futbolista, es inferior a Madrid, Barça, Chelsea, Bayern, PSG, Borussia y Manchester United. Probablemente sea inferior en calidad a todos ellos pero tiene sentado en su banquillo a un pillo que sabe que no hay en el mundo un futbolista que sea más importante que todos pero que, si al final se lo encuentra, simplemente le para en seco. La sequía de Messi frente al Atlético de Madrid no es fruto de la fortuna o la improvisación sino del estudio y el trabajo bien hecho. Leo está donde siempre pretendió Simeone, enfrentado a una vía muerta y sin un plano que indique el camino de salida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario