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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

viernes, 26 de diciembre de 2014

Primer discurso navideño de Felipe VI: el rey del tópico


"...No, la corrupción política no es el principal problema de España. El principal problema de España es la corrupción moral generalizada. Lo que pasa es que a usted, Majestad, le encanta alinearse con lo políticamente correcto..."

Y entonces, si Su Majestad es tan laico, ¿por qué no ofrece un discurso de Año Nuevo, ajeno y lejano a la festividad que en Navidad se celebra, que es el cumpleaños de Cristo? Y lo que debería preguntarse es esto: si la monarquía española deja de ser católica, a lo mejor los católicos dejamos de ser monárquicos.

  • En un concurso de obviedades, Su Majestad habría obtenido la medalla de oro.
  • Desapareció el Belén del decorado navideño y ni tan siquiera faltó el tufo masoncete de los “valores cívicos”.
  • Vamos, que podía haber sido un discurso de Año Nuevo.
  • Pues si la monarquía española deja de ser católica, a lo mejor los católicos españoles dejamos de ser monárquicos.
  • Un rey políticamente correcto. “La lucha contra la corrupción es un objetivo irrenunciable”. No, sí te parece, debemos fomentar la corrupción.
  • El Monarca ha aprovechado la pre-condena mediática de su hermana para erigirse en el ‘limpio Felipe’.
  • El discurso del Rey sonaba a esa socialdemocracia pálida que es la marca del Mariano Rajoy y del actual PP.

El primer Mensaje de Navidad de su Majestad Felipe VI le ha convertido en el rey del tópico. Ya apuntaba maneras, pero lo cierto es que el cansino discursito de la noche del miércoles 24 de diciembre, el más esperado, hubiese obtenido el primer premio en un concurso de obviedades y medalla de plata en el de tautologías.

Y fue más lo que Felipe VI mostró que lo que demostró. La primera en la frente: al revés que su Padre, Juan Carlos I, no hubo nacimiento junto a Felipe VI. Sólo un árbol de metacrilato que, allá al fondo, parecía un spot hortera de alguna eléctrica. Y eso sí, para que no se diga, se ordenó al realizador que hiciera un barrido forzado para enfocar, medio segundo, no más, un nacimiento de Lladró, es decir, un algo con pretensiones artísticas pero más cursi, en aquel escenario, que un repollo con lazo.

Ya saben, el actual Rey de España, el mismo que suprimió cualquier referencia religiosa en su proclamación –algo habitual desde la dinastía ramirense asturiana, en el siglo VIII-, suprimió el nacimiento en su mensaje navideño.

Y entonces, si Su Majestad es tan laico, ¿por qué no ofrece un discurso de Año Nuevo, ajeno y lejano a la festividad que en Navidad se celebra, que es el cumpleaños de Cristo? Y lo que debería preguntarse es esto: si la monarquía española deja de ser católica, a lo mejor los católicos dejamos de ser monárquicos.

Aún más: en el discurso no faltó el toque masoncete, con la repetición de los necesarios “valores cívicos”. Ustedes me dirán que no se sabe lo que son, pero es porque no han leído los manuales de educación para la ciudadanía. Se trata de forjar a las nuevas generaciones aespaldas de Dios.

Por lo demás, lugares comunes y cierta mala leche. Aprovechó la precondena mediática de su hermana Cristina para hacer una loa a la regeneración democrática. ¡Cuándo se dará cuenta su Majestad de que si su hermana la infanta Cristina es condenada, usted no saldrá beneficiado por comparación sino perjudicado por homologación!

Todo su topicón mensaje navideño se apoyó en otro lugar común: “la lucha contra la corrupcióncomo objetivo irrenunciable”. No, si te parece vamos a promocionar la corrupción. No, la corrupción política no es el principal problema de España. El principal problema de España es la corrupción moral generalizada. Lo que pasa es que a usted, Majestad, le encanta alinearse con lo políticamente correcto.

En el cúmulo de la sosería hizo referencia a la necesaria ‘higiene’, otro tópico muy progre de quienes confunden pureza con higiene y moral con legalidad y honradez con honestidad. Recuerde majestad: honradez de cintura para arriba, honestidad de cintura para abajo.

Y la guinda que lo resume todo. En lugar del nacimiento nos encontramos, en calidad de respaldo televisivo oficial, una foto de la pareja real con la dulcísima Letizia, que reclina su cabeza sobre el hombro de su bienamado. O como diría Gila. “Antes de casarse: ‘reposa aquí tu cabecita, mi amor’; una vez casado: ‘Aparta el cabezorro’”. Majestad, no sea usted hortera.

Y todo esto para ser mucho menos independiente de lo que fue su padre respecto al Gobierno, ni en el discurso de Navidad, el único de todo el año en el que Zarzuela mete la pluma, las palabras de Felipe VI sonaban a esa socialdemocracia pálida que en materia económica es la marca del PP. El monarca, cuya especialidad deberían ser los mensajes institucionales, se despeñó por el partidismo de lo políticamente correcto, al menos en dos puntos:

1. La defensa del Estado del Bienestar. El PP sabe que tiene que acabar con el Estado del Bienestar, que asume que es una ruina, pero el PP lo defiende en público porque decir la verdad resultaría electoralmente suicida.

2. Cataluña es España porque lo ha decidido la soberanía nacional. En este segundo punto le avala la razón y, además, fue defendido con coherencia. Lo que me temo es que llegamos un poco tarde.

Eulogio López

4 comentarios:

  1. Por lo que se lee, el firmante Eulogio goza de indeendencia de criterio respecto a lo políticamente correcto con que se rige el mamoneo de este sistema fracasado. Quizás se diga que Eulogio es partidista por católico, pero es que estamos celebrando una festividad cristiana.

    Creo que esta pareja real es acorde a la situación de laicismo galopante y de traición a España que vienen practicando los partidos políticos y altas instituciones del estado....que viene a ser lo mismo.

    En fin, una desgracia me parece a mi.

    Feliz navidad de todas formas-

    Bernardo Luján.

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  2. Eulogio López, director de Hispanidad.com, una web que presume de católica mientras se autodefine como “confidencial”, es decir, dirigida a convertir rumores e incluso bulos en noticias. Esta es la caridad cristiana de un periodista que se dice católico y que se llama Eulogio López.

    El 6 de agosto de 2004 Eulogio López hablaba de “un partido, el PP, y un conjunto de medios informativos y de líderes de opinión que están empeñados en llevar a muchos españoles, especialmente a los cristianos, hacia el fascismo”. El 5 de mayo de 2005 acusaba de “tendencia al fascismo” a Pedro J. Ramírez y a Federico Jiménez Losantos, metiéndoles en el mismo saco que el “PNV, CiU, ERC o el PCTV”. El 5 de mayo de 2012 le tocaba el turno a UPyD: “representa el fascismo”, afirmaba Hispanidad en un artículo sin firmar. En este reparto indiscriminado de carnets de fascista, eso sí, el 23 de agosto de 2006 Eulogio hacía una excepción: “Franco no era un fascista”. En resumen: el PP y UPyD son fascistas, Losantos y Pedro Jota también, pero Franco no. Curioso.

    En fin, si esto es lo que intenta vender Eulogio López como “periodismo católico”, lo único que se me ocurre es pedirle que tenga una pizca de pudor, que deje de acusar sin pruebas a todo quisque, que deje de publicar noticias falsas, que deje de pisotear la caridad cristiana y que deje de ensuciar el buen nombre del Catolicismo vinculándolo a una forma de hacer periodismo que sólo cabe calificar como periodismo-basura.

    En otra ocasión López arremetía contra HO ( HazteOir) por interponer una querella contra uno de los máximos difusores de ese bulo. El director de Hispanodad no tenía reparos en “censurar a un cristiano que interpone querellas contra otro cristiano”, pero no decía ni pío sobre el hecho de que alguien que se dice cristiano esté difundiendo bulos y calumniando a otros cristianos; eso, por lo visto, debe ser irreprochable. López llegaba a afirmar: “Personalmente pienso que hay dos tipos de personas, los buenos y los malos. Los buenos son los que no ponen querellas al prójimo.” Es decir, que a uno no le hace mala persona calumniar a otros, ensuciando su reputación a base de mentiras, de forma persistente y tratando de difundir las acusaciones de tal forma que los calumniados no puedan defenderse. No. Por lo visto, para Eulogio López lo que le hace malo a uno es buscar amparo en la justicia frente calumnias como las referidas. Curioso sentido de la moral y de la justicia el del director de Hispanidad.com.

    Ahora juzguen ustedes cada uno desde su moralidad particular lo dicho y escrito por el personaje Eulogio López, que parece haber encontrado una vez más su día de gloria en el Mensaje de Navidad de su Majestad Felipe VI.

    Diego Barceló

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  3. Ignacio Arsuaga, fundador y presidente de HazteOir.org, le envió una “carta abierta a Eulogio López” en junio de 2012.

    Querido Eulogio:

    Muy entristecido te vuelvo a solicitar que rectifiques, porque hoy compruebo que vuelves a la carga al difundir de nuevo una mentira – que ya he desmentido en numerosas ocasiones – en el artículo “Carta abierta a Nacho Arsuaga que no es miembro de Yunque porque Yunque no existe”.

    No importa lo convencido que estés de las mentiras que algunos se han encargado de difundir por diversos medios, la realidad es que HazteOir.org no depende ni tiene ninguna relación con ninguna asociación secreta.

    En realidad, como Presidente de HazteOir.org, no me importa si el Yunque existe o no, o si el Yunque es secreto o no, o si responde a la descripción de López Luengos o de José Luis Lobo, o no.

    Lo único que me importa, y mucho, es que participes en una campaña que se ha desatado con el único objeto de difundir un bulo, una calumnia: que HazteOir.org está controlado por el Yunque.

    Si hablas del Yunque o del Estribo, estás en tu derecho de hacerlo, me parece perfecto y ahí no tengo nada que decir. Pero si estableces una identificación, como ya has hecho en varias ocasiones, entre HazteOir.org y un grupo secreto, estás faltando gravemente a la verdad, y estás perjudicando gravemente al buen nombre de la Asociación que tengo el honor de presidir.

    Por eso he emprendido algunas acciones legales contra los principales responsables de esta campaña. Para defender en buen nombre de HazteOir.org y el mío propio. Para nada más.

    Si Fernando López Luengos es católico o no, si lo es formalmente pero no en la realidad, no lo sé. Ni me importa.

    Tampoco sé si tu artículo del pasado 22 de junio de 2012 lo publicaste porque eres amigo de López Luengos, o si es fruto de una llamada de Fernando en la que se te ha presentado como víctima y te ha convencido para que sigas insistiendo en sus bulos.

    No conozco personalmente a Fernando López Luengos. No recuerdo si le he visto la cara en una ocasión o en ninguna. Desconozco si tiene alguna relación con HazteOir.org.

    Sí sé que Fernando López Luengos ha difundido un montón de bulos, sin citar una sola fuente ni aportar una sola prueba, a un montón de gente (por email y por otros medios). Bulos en los que menciona a HazteOir.org y lo identifica – como haces tú – con una agrupación que él describe como secretista y de corte para-militar. Además, para más inri, presentó su libelo con formato de “informe” para darle más apariencia de veracidad.

    No deja de sorprenderme que haya gente, como tú, que haya podido aceptar el papel de víctima que tan bien interpreta uno de los principales impulsores de esta campaña de injurias y calumnias.

    Seguirá en un siguiente comentario

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  4. Como te decía, el único motivo que me ha movido a presentar una querella contra López Luengos no es atacar a ningún “buen cristiano”, es defender mi honor y, mucho más importante, el honor de HazteOir.org y el de toda la gente que colabora con HO.

    Una penúltima rectificación: enviar un burofax, que yo sepa, no es judicializar nada. ¿O es que el burofax lo envía un Juez?.

    Y si te envío una carta de rectificación por burofax es porque en otra ocasión te envié una carta al director rectificando una información errónea que habías difundido, con la esperanza de que la publicaras, sin ningún éxito. Desde entonces, he comprobado que sólo publicas las cartas de rectificación que te envían por burofax, y las publicas escaneadas (y por tanto sin que puedan ser localizadas por Google).

    Hecho este además que denota tu poca voluntad en rectificar y en cumplir con la ley, pues según la Ley la rectificación se ha de publicar con relevancia semejante a aquella en que se publicó o difundió la información que se rectifica, circunstancia que no se cumple mediante la publicación de un escrito escaneado, hurtando de este modo al lector que no disponga de un lector PDF la posibilidad de leer la rectificación.

    Me duele comprobar hasta qué punto has terminado asimilando aquello que tanto criticas: te comportas ya como El País, como los “progres” que se permiten decidir quién es demócrata y quién ultra. Al parecer, quieres hacer lo mismo pero con los católicos: te arrogas el privilegio de conceder títulos de buen cristiano y la capacidad para ponernos nota a todos y de decidir quién queda marcado, a fuego vivo, con la X del Yunque, y quién no.

    En cuanto a la Justicia y a la “judicialización” de los delitos (pues calumniar es un delito tipificado en el Código Penal), no termino de entender cuál es la ocurrencia: ¿insinúas que, por ser católico, debo renunciar a defender en los tribunales mi honor y el de los casi 300.000 miembros de HazteOir.org porque el calumniador también es católico?.

    Dime, apreciado editor, ¿es judicializar llevar ante la Justicia al ladrón que roba? Quizá opines que si el ladrón es cristiano, hay que mirar para otro lado. Salvo que robe en tu casa, imagino…

    Por todo ello, y en ejercicio del derecho de rectificación amparado por la Ley Orgánica 2/1984, te insto a que en el plazo de tres días desde la recepción de esta carta rectifiques – ahora sí, de verdad – la información ofrecida en tu medio de comunicación conforme a lo establecido en el artículo tercero de dicha Ley Orgánica.

    Con el deseo de que renuncies a continuar con esta campaña de acoso contra HazteOir.org (como ves, todavía creo en los milagros), te deseo los mayores éxitos en tu labor de comunicador comprometido con la vida, la familia y la libertad.

    Atentamente.

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