Mendoza y Galán en triunfo
Foto: Fernando Peralta
"...Digan lo que digan y lo tapen como lo tapen, Diego Ventura tenía que haber toreado ayer en Pamplona. Los vetos y las jugarretas de despacho siempre han estado muy feos. ¿Se imaginan a Lagartijo vetando a Frascuelo? ¿Y a Joselito vetando a Belmonte?, pues eso..."
¡QUE SIGA LA FIESTA!
Domingo Delgado de la Cámara
Pamplona, 06/07/2013.-La corrida de rejones de ayer en Pamplona se desarrolló en un
clima de optimismo y triunfalismo general. A juzgar por el elevado numero de orejas concedidas se puede llegar a la conclusión de que vivimos una gran tarde de rejoneo, y no fue así. La mayoría de las orejas se debieron a la bondad de un público poco entendido en toros y caballos, y al clima festivo del día del chupinazo.
clima de optimismo y triunfalismo general. A juzgar por el elevado numero de orejas concedidas se puede llegar a la conclusión de que vivimos una gran tarde de rejoneo, y no fue así. La mayoría de las orejas se debieron a la bondad de un público poco entendido en toros y caballos, y al clima festivo del día del chupinazo.
El Niño de la Capea envió una corrida ideal para el triunfo de los caballeros en plaza. El toro del Capea lidiado a pié, peca a veces de poca fuerza y poca raza, pero su gran nobleza y su gran clase, le hace ideal para el triunfo de los rejoneadores. Tercero, quinto y sexto fueron tres toros ideales para el toreo a la jineta. Desde luego el peor lote fue el de Pablo Hermoso de Mendoza que tuvo que lidiar con los dos toros de menos clase y menos raza. La lidia del primero tuvo momentos sublimes. Con el caballo Manolete, toreó con una enorme templanza y una gran cercanía. Este Manolete puede ser la próxima gran estrella de Pablo Hermoso. Es un caballo muy valiente y de gran expresión torera. Pablo Hermoso dio con el auténticos muletazos llenos de temple y de sabor. Como además mató a la primera, se mereció las dos orejas. Sin embargo, sólo cortó una porque como era el primero de la tarde, la gente estaba aún fría. No importa, fue compensado con la oreja del cuarto, tras una labor correcta con el toro más insulso de la corrida.
Ayer torearon dos de los alumnos predilectos de Pablo Hermoso: Sergio Galán y Roberto Armendáriz. Se hallan a años luz del maestro. Con unos toros de ensueño divirtieron al público pero estuvieron por debajo de la nobleza y la templanza de tan dignísimos oponentes. Galán parece estar estancado. Siempre que le veo echo de menos en él, algo mas de ajuste y sobre todo, una personalidad propia. Las dos orejas que le dieron del excelente quinto, fueron excesivas. Una única oreja hubiera sido un premio mas ajustado a la realidad del ruedo.
Roberto Armendáriz, con el buen tercero supo poner al publico de pie con las piruetas en la misma cara del toro, montando un caballo negro, muy valiente y espectacular. Tal era el clima de entusiasmo de la plaza, que le concedieron la oreja a pesar de dos pinchazos. Con el excelente sexto, tuvo una actuación algo rápida y menos emotiva. A pesar de todo hubiera cortado una oreja de no haber fallado con la hoja de peral, y hubiera podido sumarse a la puerta grande de sus compañeros.
Y por último, es evidente que Pablo Hermoso es el mejor rejoneador de la historia, y también son muy de agradecer sus gestos altruistas, pero como lo cortés no quita lo valiente, también es obligado censurar que no haya querido torear con Diego Ventura en Pamplona y Bilbao. Desde luego, es mucho más cómodo torear con amiguetes que ni compiten ni te hacen sombra, pero todas las figuras de la historia nunca rehuyeron la competencia con los rivales más incómodos. Digan lo que digan y lo tapen como lo tapen, Diego Ventura tenía que haber toreado ayer en Pamplona. Los vetos y las jugarretas de despacho siempre han estado muy feos. ¿Se imaginan a Lagartijo vetando a Frascuelo? ¿Y a Joselito vetando a Belmonte?, pues eso.
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