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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

viernes, 24 de abril de 2015

9ª de feria en Sevilla. Por fin se va arriba el ambiente con toros de Victorino, Ferrera y Escribano / por J.A. del Moral




Por fin se va arriba el ambiente con toros de Victorino, Ferrera y Escribano

J.A. del Moral 
Sevilla. Plaza de la Real Maestranza. Jueves 23 de abril de 2015. Octava de feria. Tarde veraniega con dos tercios largos de entrada.

Seis toros de Victorino Martín, sobre presentados. Noble aunque sin fuerza y a menos el primero. Muy corto de viajes y deslucido de principio a fin el segundo. Muy noble por el lado izquierdo aunque vendiéndose caro el más fuerte y encastado tercero. Excelente en noble y encastado cuarto, premiado con vuelta al ruedo. Bravo y noble aunque solo pareció manejable y a menos por la inseguridad del matador. Complicado aunque interesante el sexto.

Antonio Ferrera (turquesa y oro): Estocada, silencio con algunas palmitas que no prendieron. Dos pinchazos y estocada, gran ovación y vuelta clamorosa.
El Cid (verde ingles y oro): Cuatro pinchazos y estocada que extrajo rápidamente un peón por muy defectuosa, silencio. Dos pinchazos y media caída, silencio.
Manuel Escribano (verde botella y oro): Estoconazo de entrega, oreja. Estocada, ovación.

Acudimos a la Maestranza al ver si nos salvamos ganaderamente hablando con la corrida de Victorino. Claro que, como también hemos de señalar, todo dependerá de la suerte que tengan los toros con los toreros a los que les caigan los buenos, si salen, y sepan aprovecharlos. Antier salimos de la plaza cansados, aburridos y hasta largando de los toros de Juan Pedro. Pero ¿cómo hubiéramos salido si a Ponce le hubieran caído en suerte el tercer toro y el sexto? Seguro que entusiasmados. Y Juan Pedro, feliz en vez de disgustado. Y es que la suerte va por todos los barrios y se equivoca mucho. Hasta la suerte tiene mala suerte…

Ayer tuvimos a Ferrera y a El Cid por segunda vez en esta feria. Ambos, veteranos expertos en la lidia de las reses de Victorino. Pero….¿cómo están ambos?. Ferrera no anda mal y con la muleta mejor que nunca. Y El Cid, ya dijimos el otro día que queriendo mucho con su cabeza aunque no tanto con su corazón. Rezamos por los dos.

Quien creo que no necesitó rezos fue Manuel Escribano. Al menos por su segura predisposición. Este se come con mucha hambre todo lo que le echen aunque no la tenga.


Pese a los atractivos del festejo, la entrada no llegó a la de anteayer. Hace años, los toros de Victorino tenían fuerza por si solos. Y en las temporadas que El Cid solía cuajar grandes faena con toros de Victorino, más. Pero bueno, mejor dejar la fiesta en paz con el deseo de que la tarde fuera bien. Los tres matadores iban vestidos de verde en distintos tonos de su amplia gama. Verde es el color de la esperanza. No la perdamos.

Y tanta fe, por fin se tradujo en una tarde más que triunfal, importante. Algunos toros de Victorino resultaron bueno. Sobre todo el cuarto al que se premió con vuelta al ruedo tras cuajarle Antonio Ferrera una gran faena de muleta que hubiera sido de dos oreja si hubiera matado pronto y bien. El único trofeo, una oreja, lo cortó Manuel Escribano del tercero que tuvo un pitón izquierdo sensacional. Escribano fue ayer la imagen del valor y de la incondicional disposición.
Negro entrepelado con casi 600 kilos de peso fue el primer toro de la tarde. Menudo pavo. No tomó mal el capote de Ferrera en su recibo por verónicas. Tampoco para tirar cohetes. Fue y vino con la cara altita. Enseguida mostró su falta de fuerza. El primer puyazo lo tomó al relance, sonaron los estribos y perdió las manos al salir. Ampuloso y vistoso quite del matador. Cuidados en el segundo puyazo y perdida de las patas del animal. Delantales y media buenos de El Cid en su quite. Ferrera banderilleó en solitario con fácil vistosidad y asomándose al balcón en el tercer par. Tanteando por alto con la derecha empezó Ferrera su faena que siguió por redondos sin problemas. Muy noble el toro aunque su poca fuerza limitó la largura de los pases. No trasmitieron ninguna emoción toro y torero. Y enseguida se vino abajo el burel. Si hubiera sido de Domecq, estarían largando muchos. Lo más bonito del trasteo fuero unos naturales por el lado derecho sin ayuda de la espada. Y buena estocada.

El cárdeno cuarto se desentendió del capote de Ferrera en el recibo y perdió las manos en su posterior intento de lancear. Huidizo y distraído. Bravucón en el primer puyazo bien puesto por Dionisio Grilo. Puesto de lejos para el segundo, tardó mucho en ir. Había manseado en el primero. Por fin fue y le taparon la salida mientras se defendía del puyazo. Larga ovación al picador. Ferrera pareó en solitario. De poder a poder el primero y el toro yendo con muchos pies. Lo mismo aunque corriendo mucho trecho Ferrera el segundo. Y al quiebro el tercero. Brindis del matador en los medios. Muy bien Ferrera con la derecha y cambios de mano además de pectorales en su nueva y mejor manera de torear. El toro, muy noble por los dos lados como vimos al usar la izquierda Ferrera de menor a mayor acople y largura de los muletazos. Y gran ronda por redondos que repitió rematando con bellas trincheras, de pecho y desdenes… Ayudados por bajo sensacionales y, qué pena, pinchó, perdiendo al menos una segunda oreja. Otro pinchazo le quitó la que le abrían dado de acertar a la segunda.

El negro segundo salió distraído y se emplazó en el tercio antes de arrancarse a un burladero. Apretó mucho para dentro a El Cid en su recibo y el de Salteras lo sacó a los medios bregando con notable profesionalidad. Muy corto de viajes y revoltoso. Puyazo trasero y ruido de estribos en el primer encuentro con el caballo. Tras un medio quite de El Cid, otro puyazo con similar comportamiento al anterior. Dos chicuelinas y media de Escribano en su intrascendente quite. Espero mucho el toro en banderillas. Ninguna fe nos produjo el toro. El Cid brindó a un niño. Posiblemente uno de sus hijos. Empezó la faena probando el pitón izquierdo con la derecha y, al intentar torear los redondos, el animal apenas pasó. Desigual guasa del toro cuando El Cid intentó torear al natural. El trasteo no pasó de voluntarioso y demasiado expuso El Cid sin que lo mereciera su oponente. Justificación sobrada del matador hasta conseguir palmas por su esfuerzo. Se pasó tanto de faena pinchó repetidamente.

Imponente el negro entrepelado quinto. Distraído de salida. Y sumiso en el capote de El Cid que lanceó por verónicas de menor a mayor acople aunque no las que hubiera dado hace años. Puso al toro de largo para el primer puyazo. Tardó algo pero fue de bravo tomando un gran primer puyazo de Manuel Jesús Ruíz Román. También brillante en el segundo. Fue ovacionado el hermano de Espartaco. Tardeó y persiguió en banderillas y fue estropeándose por momentos. No obstante, brindó ilusionado El Cid. No fue tan grato el toro como el anterior aunque muy franco por el lado derecha. El Cid hizo un esfuerzo superior con la derecha sin terminar de redondear bien sus innegables propósitos. Con la izquierda no logró acoplarse ni templar dando la impresión de que el toro era peor por ese pitón. Por consiguiente, el animal empezó a tardear y a ser menos fácil. Falló además a espadas.

El cárdeno tercero, muy entipado, salió suelto del capote de Manuel Escribano, de seguido valiente y entregado en sus lances de recibo. El animal se le venció por el lado izquierdo. Cumplió en el aliviado primer puyazo. Sin quite, tomó el muy leve segundo. Perdió las manos en un capotazo de Ferrera en su frustrado intento de quitar. Escribano alternó en banderillas con Ferrera. Muy trasero clavó Escribano el primer par. Expuesto el segundo a cargo de Ferrera. Y quebrando al violín junto a tablas el tercero de Escribano que fue el más vistoso y aplaudido. Escribano comenzó su faena francamente bien, acoplado y muy torero con la derecha. El toro se dejó más que sus hermanos anteriores. Escribano anduvo muy habilidoso al torear en redondo. Y muy firme además de templado al natural en una primera tanda que fue a más y a mejor. Dudó en volver a derechas, pero siguió al natural sufriendo una colada que tragó impertérrito. Y más con la derecha en cercanías exponiendo lo indecible. Terminó valentísimo por naturales, Bien Escribano. Debió entrar a matar. Pero siguió con la izquierda jugándose la femoral en un alarde de valor realmente infrecuente. La gente se volcó con Manuel. Estoconazo de entrega hasta las cintas y oreja pedida con clamor.

El sexto se emplazó en los medios nada más salir. Y a por él se fue Escribano como es debido en estos casos. Luego lanceó con más ganas que temple – el animal se le quedó corto echando la cara arriba – y llevó el toro al caballo son soltura profesional aunque sin conseguirlo a la primera por negarse el animal a quedarse en el sitio debido. No quiso pelear y manseó en los dos encuentros. El quite de Escribano se limitó a una vistosa revolera. La solitaria intervención de Escribano en banderillas resultó variada, espectacular, valiente y emocionante en el tercer par al quiebro junto a las tablas librándose de milagro. Brindó la faena al público. Reculó el toro antes de que Escribano le diera el primer pase con la derecha y en los siguientes tuvo que intentarlo superando las oscas y revoltosas embestidas de su mal oponente sin una sola duda. Firmísimo anduvo Escribano sobre ambas manos. Algo mejor el animal por el lado izquierdo pero poco a poco a menos, los pases resultaron aislados. En un descuido, por poco resultó cogido. Tras el susto, volvió a la derecha. Pero el toro ya no quiso andar. Tuvo que matarlo. Lo hizo bien de estocada entera.

1 comentario:

  1. Estupenda crónica como siempre de Juan Antonio del Moral. Pero quiero destacar (por lo que me servirá para emplear la frivolidad. “En un descuido, por poco resultó cogido. Tras el susto, -volvió a la derecha-. Pero el toro ya no quiso andar”. Y es que los toros de Victorino Martín tienen tanto sentido y poseen de una inteligencia tan parecida a la de una persona sesenta, “que por la derecha no quiere nada”.

    Esto no para. Cuando estamos con lo de Rato, ahora aparece el caso bastante sospechoso de Vicente Martínez-Pujalte y Federico Trillo, que cobraron por asesorar al Grupo Collosa, una empresa constructora de Valladolid que está siendo investigada por la Agencia Estatal Tributaria en relación a una presunta trama que pudo beneficiarse con el montaje de parques eólicos en Castilla y León. Martínez-Pujalte, diputado del PP por Murcia y hasta hace poco comisionado para Asuntos Económicos del Gobierno regional, recibió 75.000 euros por su labor de asesoría entre los años 2008 y 2010 a través del despacho Sirga XXI Consultores que comparte al 50% con la senadora popular Ana María Torme; mientras que el embajador de España en Londres, el cartagenero Federico Trillo, recibió otros 354.560 euros a través de la firma Estudio Jurídico Labor, según publicó 'El País', al igual que este mismo periódico publicó los apuntes de Bárcenas, que la derecha “profesional” y gran parte de la “periodística simpatizante al PP” no creía y luego resulto ser cierta.

    Ambos admitieron ayer que cobraron de la constructora y justificaron tales ingresos, aunque recalcaron que cumplieron con todos los requisitos legales y sus obligaciones fiscales. Martínez-Pujalte subrayó que no tiene constancia de que esté siendo investigado. El nombre de su asesoría, junto a la de Trillo, ha aparecido en el transcurso de la investigación sobre la supuesta trama. La Agencia Tributaria ha denunciado a la Fiscalía Anticorrupción el presunto pago de comisiones para facilitar la instalación de parques eólicos en Castilla y León.

    Martínez-Pujalte explicó ayer a 'La Verdad' que tiene concedida por parte del Congreso de los Diputados la compatibilidad para ejercer en su despacho de asesoría, y que ha declarado todos sus ingresos. La Agencia Tributaria señala que existe un desfase del 48% en la declaración del año 2011 sobre sus cobros de Sirga, lo cual atribuye el diputado a cantidades consignadas en neto, y no en bruto. Indicó que entre los años 2008 y 2010 tuvo un contrato como asesor personal de Mario Armero, en un momento en el que el grupo Llorente se estaba reestructurando. «No realicé ningún gestión directa relacionada con licitaciones o contratos. Tampoco hice informes; me limitaba a asesorar periódicamente de forma personal a Armero», apostilló.

    Federico Trillo, por su parte, aseguró a través de un comunicado enviado a Efe que el despacho Estudio Jurídico Labor firmó un contrato con Collosa -del que informó al Congreso en su declaración de bienes- para asesorar a la constructora en el proceso de su reestructuración.

    Subrayó que tanto el contrato con Collosa como las correspondientes liquidaciones del IVA y del Impuesto de Sociedades cumplen con todos los requisitos legales, «lo que significa -añadió- que Hacienda no ha descubierto nada de lo que ya no estuviera puntual y continuadamente informada»."Ni tuvo ni ha tenido nunca ningún tipo de asesoramiento o relación con centrales eólicas ni energías renovables".

    El embajador afirmó que se reserva cuantas acciones legales estén a su alcance para defender su honor y su actividad profesional. En el comunicado, destacó que, según 'El País', esa relación «había sido filtrada» al periódico por la Agencia Tributaria y la Fiscalía Anticorrupción, y consideró «tan sorprendente como inadmisible que se utilicen de forma manipulada y sesgada datos tributarios de los contribuyentes».

    Diego Barceló

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