Jesús Laínz ha recuperado aquellas palabras de La Pasionaria, proferidas cual maldición gitana, para introducir su último libro: La gran venganza, de la memoria histórica al derribo de la monarquía. Laínz es uno de esos intelectuales que desde hace quince años vienen dando forma a la disidencia del pensamiento oficial.
Sus trabajos sobre el separatismo son absolutamente imprescindibles por su rigor y su despliegue documental (y, además, escritos con impecable estilo), y seguramente el lector recordará el último de gran impacto, El privilegio catalán, donde explicó con todo detalle cómo Cataluña ha sido sistemática y deliberadamente privilegiada por los sucesivos gobiernos españoles desde principios del siglo XVIII hasta nuestros días, en un alarde de documentación que reduce a polvo el socorrido eslogan de “España nos roba”.
Este nuevo libro, La gran venganza, mantiene el estilo propio del autor, es decir, una montaña de datos expuesta con amenidad y genio bien vivo, y apunta a la pretensión izquierdista de fundar la legitimidad de la democracia española en la experiencia de la II República. El balance de Laínz es inequívoco: como experiencia democrática, la II República fue un episodio lamentable, un fracaso sin paliativos, y ello no por conspiraciones de la derecha, sino muy fundamentalmente por las aspiraciones revolucionarias de la izquierda. Por consiguiente, toda la retórica socialista, comunista y separatista acerca de la II República y el Frente Popular es una gigantesca mentira. Una mentira, sin embargo, que es imprescindible asentar para llevar a cabo el gran proyecto: derribar a la monarquía nacida de la transición (es decir, del franquismo) y volver al vetusto proyecto republicano.
¿Qué va a encontrar el lector en La gran venganza? Todo: una crítica del proyecto izquierdista de resucitar rencores por todas partes, una ajustada demostración de la realidad (atroz) de la II República, un amplísimo abanico de testimonios de republicanos que terminaron volviéndose contra el Frente Popular y, por supuesto, un agudo análisis de la pretensión última, que es la demolición de la monarquía en España. A lo largo de estas páginas saltan Unamuno y Largo Caballero, Orwell y Ada Colau, Francisco Franco y Azaña, y la impresión que queda en el ánimo del lector es la de una enorme perplejidad por el tamaño inmenso, inabarcable, de la gran mentira que hoy, ley mediante, trata de imponerse en España contra la verdad de lo que realmente fue nuestra historia.
Un libro imprescindible, como todos los de Jesús Laínz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario