la suerte suprema

la suerte suprema
Pepe Bienvenida / La suerte suprema

domingo, 4 de enero de 2015

¿Correrá peligro el pasillo por la inocente foto de Ramos? / por Juan Manuel Rodríguez




 "...esta tarde el Valencia ha preparado uno de esos tradicionales anuncios con tintes guerrilleros que los creativos poco creativos preparan para recibir al Real; en él aparece Álvaro Negredo con los brazos abiertos y el lema "Sí se puede"..."


¿Correrá peligro el pasillo por la inocente foto de Ramos?  

4 de Enero de 2015 
Ahora que recuerdo, al ilusionista Roig, un mago malísimo al que, al menos "desde Madrid", siempre pillamos todos los trucos, y al fichaje de Pedja Mijatovic, que por esas cosas del fútbol acabaría convertiéndose en héroe merengue, habría que añadir probablemente aquella final de la Copa de Europa del año 2000 como otro motivo más que añadir a la larga lista de imperdonables agravios perpetrados por el Real Madrid contra el valencianismo. Cuando afirmo que el Valencia no está en la misma división que el Madrid no quiero decir en absoluto que a lo largo de la historia y en momentos puntuales el equipo ché no haya sido competencia para el diez veces campeón de Europa; claro que lo ha sido, por supuesto que sí, de ahí que, por historial, le considere un grande de España.

De hecho, a aquella final de hace catorce años, como sucedió con La Séptima y probablemente también un poco con La Décima, el Real Madrid llegaba como víctima propiciatoria de su rival, el poderoso Valencia de Héctor Cúper, que fue primero de su grupo de clasificación por delante del mismísimo Bayern de Múnich y que más tarde eliminaría al Barcelona en semifinales. El Valencia acabaría tercero en la Liga, y luchando por ella hasta el final, por detrás de Deportivo de La Coruña y Barça, y al Madrid, quinto, descolgado y a un puntito del Alavés, "sólo" le quedó el consuelo de Europa... otra vez. Sin embargo, y contra todo pronóstico, el vendaval valencianista augurado por todos y cada uno de los hombres del tiempo españoles, se transformó en sorprendente ciclón madridista y la final acabó siendo, si se me permite la comparación, un paseo tan cómodo como los que ofrecía Morgan Freeman a la maravillosa Jessica Tandy en la famosa película.

A mí me parece que la animadversión valencianista hacia el Real Madrid, que dicen que es históricamente reciente, se sustenta por lo tanto en esas tres patas: la magia potagia de Roig, el fichaje de Mijatovic y la final del año 2000, La Octava. Para la reválida de esta tarde el Valencia ha preparado uno de esos tradicionales anuncios con tintes guerrilleros que los creativos poco creativos preparan para recibir al Real; en él aparece Álvaro Negredo con los brazos abiertos y el lema "Sí se puede". Naturalmente que se puede, añado yo de mi propia cosecha; aunque a algunos pueda parecerles mentira llegará el día en el que el equipo de Ancelotti perderá. Por otro lado, la afición del Madrid nunca se ha molestado por estos pintorescos spots pero hete aquí que a la del Valencia, que debe tener la piel muy fina, tampoco le ha sentado nada bien que Ramos responda a Negredo colgando una inocente foto, de nuevo con los brazos abiertos, posando con La Décima, la Copa, la Supercopa y el Mundial. Sergio ya ha pedido perdón. Y yo, que soy mourinhista, todavía me estoy preguntando "¿Por qué?"... ¿Correrá peligro el pasillo?...


No hay comentarios:

Publicar un comentario