"...Todas las canas que peina Morante le vienen de haber visto una vez en un cartel de Sevilla su nombre al lado del de Victorino Martín..."
Abc
Este año la primavera en Madrid abre y cierra con hombrada: la de Fandiño con seis toros (Palha, Pablo Romero, Victorino, Cebada, Escolar y Adolfo) en Domingo de Ramos y la de El Cid con seis victorinos en San Isidro.
Cuando una cultura siente que su final se acerca manda a llamar, en Europa, a los curas (eso dice el Karl Kraus tremendista), y en España, a los toros.
Aquí, a Dios llegamos antes por los toros primigenios (los de arriba) que por los curas posconciliares.
–Moralmente indefendibles, pero estéticamente insuperables –le parecen los toros a Sassone, y es su forma de decirnos que a Dios sólo se llega por la estética.
La belleza es catarsis, pero la socialdemocracia no cree en nada, tampoco en la belleza: toda su emoción estética consiste en tenernos ante el televisor para ver a quién se le cae más el pelo, si a Casillas o a Pablo Iglesias.
Hoy tomé café en un bar frente al cartel que anuncia la hombrada de Fandiño, que es como un Victor Mature de Orduña dispuesto a vérselas a solas en la arena del circo con Drácula, Frankenstein,King Kong, la Momia, el Hombre Lobo y Freddy Krueger, y pensé en el pobre Bogart, que por hacer la rosca a Sinatra quiso afearle a Ava Gardner su locura de amor con Luis Miguel, al que suponía gay:
–De todos los hombres del mundo, te tienes que enamorar de uno que lleva capa y zapatos de bailarina.
¿Qué quedaría de Bogart, con sus zapatos con alzas, su palé desde el que besar a la chica y su pistolín, delante de un cárdeno de Escolar?
Una muletilla del taurineo dicta que los lances de Morante de la Puebla son “de cartel de toros”, pero aquí, en el bar, delante del de Fandiño, decir eso sería como comparar el Foreman-Alí de Kinshasa con los Panditas del “pressing catch” mexicano.
Todas las canas que peina Morante le vienen de haber visto una vez en un cartel de Sevilla su nombre al lado del de Victorino Martín.
Porque lo contracultural de los toros de verdad no son los toros, sino la verdad.
Para cartel, el de anoche de Esperanza Aguirre en el programa de Sandra Barreda “Un tiempo nuevo”.
ResponderEliminarEl titular del cartel escrito por Esperanza Aguirre podría ser, "Yo soy liberal y patriota; y Podemos son comunistas y odian el himno".
"Sobre las palabras del líder de Podemos, estos señores defienden el régimen de Venezuela. Pablo tenía la oportunidad de votar ayer contra los presos políticos en Venezuela. Y Podemos, a diferencia de Syriza, que estos posiblemente meterán la pata en lo económico, pero aquí como gane Podemos será la última vez que votemos libremente", expresa Aguirre.
"Lo primero que quieren hacer es cambiar la Constitución para cambiar los mecanismos de las democracias occidentales y eternizar el Gobierno para mantenerse a perpetuidad en el poder", replica.
"La situación de corrupción en la que ha nacido Podemos y la eternización de los procesos puede hacer que la gente piense que los políticos sean impunes", argumenta Aguirre para explicar el auge de la formación de Pablo Iglesias.
"Pablo Iglesias quiere llevar el debate ideológico a los tribunales y por eso me pone querellas. Yo doy la cara, él aparece en plasma y yo aquí. Para ellos, los representantes legítimos de la gente son ellos y los demás somos la casta", lamenta.
El 5 de noviembre de 2006, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha aprovechado este domingo un mitin de presentación de candidatos del PP en los municipios de del Corredor del Henares para asegurar que su partido representa, frente a los socialistas, "la sensatez y la serenidad" además del patriotismo, un concepto que, bajo su punto de vista, es "hora" de defender, "sin complejos". "Nosotros somos el patriotismo, porque creo que ya es hora de que lo reivindiquemos", enfatizó.
"Nosotros somos la sensatez, la serenidad y el patriotismo. Sí, sí, somos el patriotismo y creo que ya es hora de que lo reivindiquemos –recalcó en un acto en que también participó el presidente del PP, Mariano Rajoy–. Tenemos que reivindicar el orgullo de ser españoles, reivindiquemos el derecho a defender lo que somos, sin complejos. A defender todo lo que nos une".
En 2007, Esperanza Aguirre pide sentido común, serenidad, ideas y patriotismo. Son las cualidades que el PP propone a su base social para ganar las elecciones autonómicas y locales. La presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, se enorgulleció este domingo de los valores patrióticos de su partido. "Nosotros somos el patriotismo, porque creo que ya es hora de que lo reivindiquemos". Frente a la polémica idea de Zapatero de que la nación española es una idea "discutida y discutible", Aguirre se ofreció, junto al resto de candidatos populares, como la propuesta de la "sensatez, la serenidad y el patriotismo. Sí, sí, somos el patriotismo y creo que ya es hora de que lo reivindiquemos". Mariano Rajoy, que la acompañó en un mitin en Alcalá, animó a los candidatos del PP a "dar la batalla de las ideas, la lógica y el sentido común".
El 6 de noviembre de 2013, Esperanza Aguirre en la conferencia que pronunció en la Cátedra “Miguel de Cervantes” habló sobre el orgullo de ser españoles.
Durante la conferencia se refirió a diversos temas de índole educativa, política e histórica, pero el que caracterizó la Cátedra fue el patriotismo.
Del patriotismo habló detalladamente, hizo referencia a que no había que confundir patriotismo (amor a la patria) con nacionalismo (rechazar lo ajeno), “algo que hoy en nuestro país está a la orden del día”. Hizo alusión a los valores del patriotismo como: la honra, la dignidad de aceptar la herencia española y el afán de mejorar el presente para crear un futuro más prometedor.
Y digo yo: Patriotismo, sentido común o sensatez en Esperanza Aguirre y el PP en general es igual a MENTIRAS.
Diego Barceló
Como dicen que ocurre cuando uno está a punto de morir, mi vida pasó frente a mis ojos en un segundo al escuchar a Esperanza Aguirre decir que teníamos que recuperar el patriotismo “como virtud cívica fundamental”.
ResponderEliminarLas peores atrocidades del siglo pasado tienen su origen en ideologías que agitaron patriotas como Benito Mussolini, Adolf Hitler, Josef Stalin.
Aunque en circunstancias distintas, afortunadamente, me recuerda discursos de “estás con nosotros o estás con los terroristas” de George W. Bush. O a su amigo José María Aznar cuando manipula la historia con unas “memorias”, que no son más que una autoterapia para justificar declaraciones y decisiones de irresponsabilidad histórica “por querer lo mejor para España” y “estar a la altura de sus responsabilidades”. ¿Mejorar la posición internacional en España, supuestamente, justifica mentir después de un atentado como el del 11-M y meter en la guerra a un país con una mentira?.
Esto creo que tiene consecuencia en la constante pelea entre sabios y necios, el necio siempre cuestionará al sabio, pero el sabio nunca conseguirá convencer al necio, pues este reivindicara valores, se envolverá en una bandera, eso le da seguridad, para el tiene valores especiales, consigue ser un Patriota.
Termina mi admirado Diego Barceló, “Patriotismo, sentido común o sensatez en Esperanza Aguirre y el PP en general es igual a MENTIRAS”, y lleva toda la razón.
¿Es patriotismo? Llevar una pulserita en la muñeca con los colores de la bandera de España como Gerardo Díaz Ferrán, expresidente de la patronal, el hombre del lingote de oro al que José María Aznar condecoró con la medalla de plata al Mérito en el Trabajo y que lo mismo hoy preside en lugar preferente su cerda de la cárcel de Soto del Real.
¿Es patriotismo? Que el ministro de Defensa, Pedro Morenés, sobre el caso de Zaida Cantera, la capitana del Ejercito de Tierra que sufrió acoso sexual durante varios años de trabajo en las Fuerzas Armadas “no haber movido un dedo por ella”. Según le ha recordado al ministro la diputada de UP y D Irene Lozano, la capitana Cantera le escribió una carta en la que le pedía ayuda. “Usted personalmente se la negó”, ha dicho.
¿Es patriotismo? Los desahucios que hoy destrozan las vidas de miles de personas en España, consecuencia de una política caracterizada por especular con la vivienda, impulsar el sobreendeudamiento de la población y sobreproteger los intereses de la banca, entre otros.
¿Es sentido común? Aplicar la mayor severidad en el cumplimiento de las leyes con los más débiles, mientras con al poderoso se mira para otro lado. Esto no es el “común sentido” del Partido Popular.
¿Es sensatez? Hacer lo contrario de lo que se dijo, o falsear datos, o engañar con cifras la autentica realidad.
Para ser patriota se necesita un corazón abierto, y las banderas en su destino y lugar.
Bandera (no tan) nuestra, a ti juramos (ojalá usted no sea cristiano porque acaba de pecar, y créame que su juramento sí está siendo en vano) devoción perdurable, lealtad perenne (no la que se le da a los partidos políticos a cambio de una curul), honor, sacrificio y esperanza (solo si beneficia económicamente, dicen) hasta la hora de nuestra muerte. En nombre de la sangre y de la tierra (¿cuenta la sangre de los miles de indígenas masacrados durante el conflicto armado?), juramos mantener tu excelsitud (¿seguros que esa palabra existe?) sobre todas las cosas; en los prósperos días (no aplica para más del 50% de la población en pobreza), y en los días adversos, velar y aun morir porque ondees perpetuamente sobre una patria digna (defina “digna” y repita de nuevo desde “velar”).
Cristina Almansa
"Esperanza Aguirre anuncia que abandona la política activa".
ResponderEliminarEste era el titular de los periódicos españoles el 18 de Septiembre de 2012, entre lagrimas, aplausos y algunos bufidos de tranquilidad, Doña Esperanza declaraba el día anterior que se "iba" a disfrutar de los suyos, se refería a su familia, lo decía de esta manera: Ahora ha llegado el momento de vivir más cerca de los míos y dedicarme a mis nietos, a mis hijos, a mi marido, a mi madre y a mis siete hermanos, cómo le pasa en otras muchas cosas, la buen señora se cansa pronto de "casi todo" y ha decidido dejar de disfrutar de su familia.
Rebelde de cartón piedra, más falsa que un euro de chocolate, liberal de pacotilla y verdadero animal político azote de amigos y enemigos, vuelve para salvarnos de su propio partido, nos está diciendo lo que debían haber hecho pero no lo hicieron, nos dice lo que queremos escuchar pero sabemos que los suyos nunca harán. Es que Doña Esperanza y compañía, ya es poca esperanza.
Y ya está en su salsa.
Primer acto de precampaña en el PP de Madrid. Cristina Cifuentes y Esperanza Aguirre han elegido el madrileño municipio de San Sebastián de los Reyes para presentarse, juntas, ante los militantes de su partido y simpatizantes. Ante más de 700 personas, la presidenta del PP de Madrid dedicó la primera parte de su intervención a desprestigiar “alguna opción política que ofrece el cielo en la tierra. Y la experiencia ha demostrado que quien promete el cielo suele traer el infierno para los demás”, en una clara referencia a Podemos, la opción de izquierdas que amenaza con irrumpir con fuerza en el espectro político español.
La aspirante a conquistar la Alcaldía de Madrid lanzó un mensaje a la militancia de esperanza en un partido, el PP, “que seguro que ha cometido errores”, pero “tiene ideas y valores que siguen vivos. Aguirre reconoció que el PP se presenta como un partido “como lo que es y tiene que ser”: que defiende la libertad, la propiedad, la ley, el Estado de Derecho y “orgulloso de ser español”.
El primer acto de precampaña sirvió de presentación de dieciséis candidatos de la zona Norte de Madrid. Aguirre pidió a todos "humildad" y "espíritu de servicio a los ciudadanos" y animó a los afiliados y simpatizantes populares presentes en el Teatro Adolfo Marsillach de San Sebastián de los Reyes, a que se esfuecen más que nunca en trasladar "con ilusión y coraje" los principios del PP a la calle, dada la "trascendencia" de la próxima cita electoral.
A su juicio, España afronta este año el calendario electoral más decisivo de su historia democrática. "Tenemos que esforzarnos más que nunca en la defender esos principios y actuar en todo momento de acuerdo a ello. Y, para ello, hay que utilizar el pico y la pala", en una clara referencia a que hay que salir a la calle para intentar retener el voto desencantado.
Seguiré…
El periodista Antonio Casado escribe “El catecismo de Esperanza Aguirre”.
ResponderEliminarEs la versión menos peyorativa del populismo. Consiste en alborotar el gallinero de la política en vísperas electorales con propuestas poco elaboradas que te hacen volver la cabeza. Una semana después de su designación como aspirante del PP a la alcaldía de Madrid, ya conocemos el catecismo de Esperanza Aguirre en toda su simplicidad.
El ideológico, con etiqueta de “liberal”, se encierra en cuatro mandamiento. A saber: libertad, vida, propiedad y ley. “Estoy en el PP para defenderlos”, te dice. “Esos y no otros”, añade para marcar diferencias con los mandamientos clásicos de la izquierda; igualdad, función social de la propiedad o el Estado como palanca integradora de las clases desfavorecidas.
El programático está por ver, a la espera de que su director de campaña, Íñigo Henríquez de Luna, se meta en harina. Pero su mente de mariquilla terremoto pasada por la Universidad y el almanaque de Ghota no espera. Así que ya sabemos que bajará impuestos, que no pisará el suntuoso despacho habilitado por el exalcalde Ruiz-Gallardón, que pactaría con Podemos una planta masiva de árboles y que comulga con los antiabortistas. Junto a ellos marchó este fin de semana al grito de “Yo rompo con Rajoy”.
¿Alguien se confiesa “liberal” y defiende el derecho de los poderes públicos a interferir en la libertad de una mujer, en el recinto de su intimidad, decidida a interrumpir un embarazo no deseado? Nunca hubiera imaginado que quien abomina del intervencionismo del Estado en la esfera privada del individuo dé por bueno que se meta entre las piernas de una mujer.
De hecho, Esperanza Aguirre nunca permite que la arrastren al fondo de la cuestión, que no es el de estar a favor o en contra del aborto, a favor o en contra de la vida (nadie normalmente constituido está a favor del aborto y en contra de la vida), sino el de estar a favor o en contra de que el Estado regule una práctica imposible de prohibir. Por ejemplo, fijando los límites y las condiciones (plazos, supuestos) del derecho de una mujer a interrumpir un embarazo indeseado.
Así que no veo yo a Esperanza Aguirre echando el resto contra la vigente ley de plazos fletada por el Gobierno Zapatero hace ahora cuatro años. Entre otras cosas, porque responde a un modelo normalizado en veinte países europeos, muchos de ellos gobernados por partidos similares al PP. Sin embargo, sí la veo apuntándose al espíritu de la pancarta coreada este sábado en la manifestación: “Yo rompo con Rajoy”, sostenida por los votantes contrariados por la frustrada reforma Gallardón, que acusan al Gobierno de haber asumido la regulación socialista del aborto (ley de plazos, con aborto libre hasta las 14 semanas).
Pero era su baño populista de precampaña y debía aprovecharlo. Si además le sirve para recordar a Rajoy que no se va a librar de ella, miel sobre hojuelas. Si gana la alcaldía, no se presentará al congreso regional para repetir como presidenta del PP madrileño, pero vetará a cualquier candidato no respaldado por ella. Y si no gana, siempre podrá utilizar la poderosa organización madrileña (100.000 afiliados), que controla con mano de hierro, para romper con Rajoy y quitarle el sitio en Génova y en Moncloa.
Casimiro Escudero