Los toros de Partido de Resina tan esperados en San Isidro
Les deseamos un taurino 2015 con síntomas de recuperación de la integridad y autenticidad de nuestra Fiesta y un feliz y próspero año en todo lo demás.
AQUÍ SEGUIMOS
Antolín Castro / Ed. Oyt
Inicialmente ese es nuestro propósito: Aquí seguimos. Superados ya los diez años de existencia, tiempo suficiente para realizar la labor que nos propusimos, seguiremos con nuestra tarea periodística libre e independiente en OyT.
El año que se viene encima, 2015, ha de ser como bisagra entre lo pasado y el presente, lo que de una forma u otra nos dirá cuál es el futuro de la Fiesta.
Estaremos pendientes del desarrollo del mismo, con la firme idea de ir poniendo blanco sobre negro de lo que vaya aconteciendo, abriendo espacios de claridad y aportando nuestra opinión en el devenir de la temporada. Expectantes siempre, dado que o bien se dan muestras de recuperación o el estancamiento será definitivo.
Como ya anticipamos en otro Editorial, vamos a optimizar nuestro trabajo dejando, en muy buena medida, de aportar solo resultados de festejos no presenciados o la publicación de las ingentes cantidades de notas de prensa y comunicados que nos llegan. Entendemos que debemos dedicar nuestros esfuerzos en dar opinión sobre los festejos vistos y las distintas ópticas que nos supongan los acontecimientos. Esa será nuestra mayor aportación, siempre con la vista puesta en la recuperación de los valores que adornaron siempre la Fiesta.
Además, hay que tener en cuenta las limitaciones de recursos con los que nos movemos, ajenos a la captación de publicidad, por lo que los esfuerzos se realizarán donde más se pueda ayudar a construir un futuro mejor. Apoyar sin más la maquinaria de la rutina en la que se ha instalado el toreo no puede ser, ni ha sido, nunca nuestro objetivo.
El desgaste, sin compensación alguna, va dejando espacio para el cansancio, son duros como piedras estos profesionales taurinos y ni siquiera las pérdidas económicas les han hecho reaccionar algo hasta hace poco. Lo difícil es que reaccionen en la dirección correcta, ciegos como van defendiendo lo indefendible.
Por ahora aquí seguimos. Seguiremos ofreciendo información veraz e independiente a costa de lo que sea. Y no es fácil. Quizá llegue el momento en que el esfuerzo, a la vista de la tozudez y la ceguera de tantos, además de las condiciones en las que tenemos que hacerlo, no nos merezcan la pena.
Les deseamos un taurino 2015 con síntomas de recuperación de la integridad y autenticidad de nuestra Fiesta y un feliz y próspero año en todo lo demás.
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