Padilla Honoris Causa
Paralelamente a la gran feria de cierre de campaña taurina, Juan José Padilla comparecía el viernes 17, pasado el mediodía, como una de las 21 mentes brillantes que había concentrado el congreso internacional “SerCreativos” compartiendo cartel con flor y nata de la intelectualidad y símbolos de los valores éticos y humanos del mundo.
La intervención, de poco más de 20 minutos, del “Ciclón de Jerez” desde el sentimiento provocó numerosas interrupciones por ovaciones cerradas. Concluyó cortando orejas y rabo. Solo faltaron los gritos de ¡torero, torero! Pero el auditorio, lleno, no era muy proclive; de ahí el mayor mérito de Padilla: progresía e intelectualidad y una juventud sana, pero adoctrinada, donde todos estaban expectantes para al final entregarse, pero sin el conocimientos de los ritos taurómacos como el grito laudatorio y en andas hasta la PG.
Padilla como si estuviera en el ruedo “estaba solo”. Su mujer un par de amigos, este periodista y poco más. Ni un solo hijo del cuerpo. No hicieron falta, pero su presencia hubiera aportado esa repercusión mundial que sin duda hubiera tenido. Padilla hizo un gran servicio de reivindicación de los valores de la Fiesta en tiempos de ataques. Quizá el mejor. El resto del escalafón y sector se lo deben, aunque por lo que se colige ni están ni se les espera, salvo algunos golpes de efecto más bien respondiendo a egoísmos que empuñar el estandarte del colectivo.
El grandioso discurso de Padilla lo tienen en exclusiva (no porque seamos el primero de la clase, sino porque hemos sido los únicos en asistir y luego echarle cuentas) en www.ladivisa.es. Bien. Por su alto interés La Divisa lo ha difundido a través de sus canales de mail, Twitter y Facebook, donde su impacto ha sido, y lo está siendo, superior a los 100.000 alcances...
Un éxito, dirán ustedes: cierto. Pero agridulce.
La reivindicación del esfuerzo y el sufrimiento como parte de la gloria, el llamamiento a aquellos deprimidos por los vaivenes de la vida para decirles que si quieren puede y que no se imaginan hasta donde pueden llegar en cumplir sus sueños con constancia y disciplina ha tenido multitud de comentarios en sentido contrario: agresivos, insultantes, zafios; de descerebrados y malas personas. O están organizados por las “mafias animalsitas” (de lo que hay documentación abundante) o que Dios los cría y el viento los amontonan”.
Los taurinos, o no taurinos, simplemente gente de bien “en la cámara por la caló”. Así luce el pelo.
Y por cierto, aviso a navegantes: a través de esta experiencia (no hay mal que por bien no venga) he descubierto que detrás de tanto odio y mala gente se esconden personas y organizaciones que bajo el caparazón de hacer el bien reclutan firmas y dinero para causas aparentemente justas como reclamo pero con la pretensión de almacenar direcciones para inflar arteramente el elenco de indeseables vestidos de limpio. Involucran a algunas ONG de bien para picar y luego están ellos….
Tomen nota para obrar en consecuencia, se llama “change.org”.
Y como decía un tal Gallardo con Pedrerol... "Y si tienes coj….. desmiéntemelo".
Ah, este mensaje no va dirigido al sector taurino por no querer comprometerles.
Padilla “honoris causa”…….¡taparse! ¡dejadme solo!....ole, torero.
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