Gira de la destrucción: “Garci-Burros” / por Pla Ventura

 

La foto es una muestra de patente manifiesto de lo que decimos porque, ¿de verdad cree alguien este animal que mostramos se parece a un toro bravo? Así los matan las figuras todos los días y, para colmo, quieren que comulguemos con sus vergonzantes actitudes.

Fijémonos que, ya es casualidad que, en las corridas programadas por la llamada “gira” no se ha contratado ni una sola auténtica corrida de toros. ¿A quién quieren engañar y, lo que es peor, a quién pretenden defender?

Gira de la destrucción: “Garci-Burros”

Pla Ventura

Toros de Lidia / 2 octubre, 2020

Hace mucho tiempo que vengo pregonando el fraude que supone para el toreo la ganadería de Garcigrande y adláteres ganaduros, cuando lo comparamos con un toro bravo y fiero pero, el colmo del desacato ocurrió ayer en Úbeda en que, los animalitos citados, cortados todos por el mismo patrón, sin fuerzas, sin ser picados, sin pitones y sin nada que pudiera parecerse a un toro de lidia, allí estaban los toreros emocionados ante aquellos bobalicones bichejos que, hechos a medida, fabricados en serie, hacen las delicias de los toreros, de los ignorantes y de los que retrasmiten dicha parodia que, para colmo, ensalzan dicha porquería porque, más que Garcigrandes, habría que llamarles Garci-burros que, en definitiva, sería la acepción correcta para definir ese espectáculo lamentable que tuvo lugar en la ciudad jiennense.

Ese pobre hombre llamado El Juli que, para colmo, se hace el mártir ante dichas corridas, de haber acertado con la espada le hubieran dado los máximos trofeos porque, para desdicha del mundo del toro, los grandes enemigos del mismo son ellos, los protagonistas que, con sus acciones, denigran la fiesta de los toros hasta el extremo del más pestilente alcantarillado. Está claro que estábamos en Úbeda, una plaza de tercera pero, para ese tipo de plazas también hay un toro apropiado, nunca los burros que se lidiaron que, los toreros, de haber tenido vergüenza, no hubieran utilizado ni la muleta porque, con la gorra se podían lidiar.

Como el mundo sabe, en este año criminal que estamos sufriendo, pese a tantas limitaciones, hemos visto por esos pueblos de Dios lidiar auténticos toros; es decir, hemos gozado del toro en su más bella acepción en plazas de mucho menos nivel que Úbeda pero, solo existe una diferencia, en las plazas en la que hemos disfrutado del toro, no había figura alguna, ni puta falta que hacía. Fijémonos que, ya es casualidad que, en las corridas programadas por la llamada “gira” no se ha contratado ni una sola auténtica corrida de toros. ¿A quién quieren engañar y, lo que es peor, a quién pretenden defender?

Ya vimos que, los taurinos, “defensores” absolutos de la tauromaquia, hasta se inventaron la Gira de la Reconstrucción, como dije, una mentira al más alto nivel porque, ganarán más o menos los diestros, ni lo sé ni me importa, pero lo que si me preocupa es el nivel de infamia a la que nos someten con dichos cartelitos para que, Ponce, El Juli, Morante y sus comparsas se diviertan engañando a las gentes con esas corridas fraudulentas que, si pretendían reconstruir algo, la han cagado porque lo que han fomentado ha sido el horror al más alto nivel porque, nadie en el mundo, por ignorante que se considere, puede admitir a esos animalitos como toros.

Para colmo, en la citada corrida, junto a El Juli, actuó Álvaro Lorenzo que, sin duda, aspira a figura y lo conseguirá, que nadie lo dude. Si acierta con la espada como en dicho festejo y le ponen con semejantes burros sin alma, sin fuerzas, sin pitones y sin la más mínima emoción que pueda darnos un toro bravo, tiene todas las papeletas para llegar al estrellato que, como se sabe, se llega mediante el camino fraudulento donde no aparece el toro por ningún lado. ¿Quiénes son los enemigos de la fiesta, los aficionados que pagamos? Las pruebas son contundentes, no existe peor enemigo dentro del mundo de los toros que todo aquel que no está dispuesto a enfrentarse a un toro. Oiga, diría el otro, ¿y la cara de mártir que ponía El Juli cuando no acertó con la espada? Ni tienen vergüenza ni saben cómo se dirime dicho valor. Como diría Pedro Ruíz, esto es de mear y no echar gota.