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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

miércoles, 9 de octubre de 2019

MURCIA. HOMENAJE "IN MEMORIAM" A PEDRO BARRERA



Pedro Barrera, fue un matador de toros que alcanzó notable fama y prestigio al que no se le ha hecho el reconocimiento que debiéramos a la trayectoria profesional de este ilustre Caravaqueño y reconocer su verdadera dimensión como torero, durante su carrera estuvo siempre en los primeros puestos del escalafón taurino, llegando a estar considerado como "la tercera muleta de la torería"... 

Pedro Barrera Elbal 

Cita con la historia:
 PEDRO BARRERA    

Un 25 de julio pero de 1941 Tomó la Alternativa Pedro Barrera, en Valencia con toros de D. José María Galache siendo su padrino Pepe Bienvenida y Manolete el testigo. El toro de su doctorado se llamaba Diano y era un cárdeno oscuro, Barrera "derrochó el valor e hizo galas de ese coraje tan peculiar en este muchacho y que tantas simpatías le suman. Pinchó varias veces para una estocada final, que le valió muchos aplausos..."

Pedro Barrera, fue un matador de toros que alcanzó notable fama y prestigio al que no se le ha hecho el reconocimiento que debiéramos a la trayectoria profesional de este ilustre Caravaqueño y reconocer su verdadera dimensión como torero, durante su carrera estuvo siempre en los primeros puestos del escalafón taurino, llegando a estar considerado como "la tercera muleta de la torería"... Pedro Barrera Elbal nació en Caravaca, en la calle Torrentera, el 24 de junio de 1912. Su primer contacto con el mundo de los toros tuvo lugar en 1926, cuando su padre lo llevó a ver la corrida de inauguración de la Plaza de Toros de su ciudad natal; El espectáculo no le llamó mucho la atención, aunque aprendió una cosa que iba a resultar fundamental en su forma de torear: "lo único que aprendí aquella tarde fue que para ser Torero había que arrimarse..." Se lanzó al ruedo como espontáneo en un novillo que su paisano y amigo Julián Medina lidiaba en la Plaza de Caravaca. La primera vez que Pedro Barrera fue anunciado en un cartel es como sobresaliente en la novillada que con motivo de las Fiestas de la Cruz se celebró el 4 de mayo de 1932 en Caravaca y ya como novillero en el festejo que tuvo lugar, también en la plaza de su ciudad natal, el 21 de agosto de ese año, alternando con el Niño del Barrio; fueron novillos de López Chicheri de Nerpio, y Pedro Barrera estuvo, según la prensa de la época, "bien y superior". Esa temporada toreo otros 5 festejos, algunos de ellos constituyendo la parte seria del espectáculo de Llapisera, Los Calderones, alcanzando su mayor éxito en la novillada de feria de Caravaca donde salió por la Puerta Grande, al cortar las orejas a los novillos de Ruiz Dayestén... En 1933 participó en 15 festejos, 12 novilladas, 1 festival y 2 actuaciones en espectáculos cómico-musicales, la mayoría en plazas de la región, aunque también actuó en poblaciones de Almería y Jaén. Su nombre comenzó a ser conocido gracias a su Valor y Torería. En 1934 toreó en la Plaza de Cartagena el 4 de marzo compartiendo cartel con el nativo Ramón Montes lidiando ganado de Letona "muy bueno y bravo". Torea el 13 de mayo en la Plaza de Toros de Orán, donde obtuvo un gran éxito, cortando las orejas y el rabo y saliendo en hombros. Torea en 23 festejos, destacando los triunfos obtenidos en Caravaca, cortando orejas y rabos. El 5 de agosto toreó en Zaragoza. En Ciudad Real se presentó el 30 de septiembre compartiendo cartel con Agustín Díaz Michelín, donde estuvo bien con la capa y superior con la muleta. Mató colosalmente y cortó orejas y dio la vuelta al ruedo...

En 1935 viajó a Argentina para torear 9 novilladas a la manera portuguesa que de manera excepcional iban a celebrarse en Mar del Plata,donde triunfó y de regreso en Cádiz para torerar el 19 de enero y el 14 de abril, teniendo lugar la primera de las novilladas el 10 de febrero, inaugurándose ese día una nueva Plaza de Toros con capacidad para 8.000 personas, y la última el 25 de marzo. A su regreso toreó en Linares, Puente Génave, La Roda y Caravaca; el 16 de junio se presentó con gran éxito en Granada y el 23, por fin, logra hacerlo en Murcia, siendo este también su primer festejo con picadores, tuvo una aceptable actuación y recibió cel reconocimiento en los tendidos. Estuvo admirable en su segundo y dio la vuelta al ruedo, no consiguió el éxito que buscaba, Niño del Barrio y Rafaelillo si lograron, por lo que permaneció largo tiempo apartado de los carteles murcianos.
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Esta temporada toreó también en Zaragoza, Granada, Aguilas, donde inauguró su Plaza de Toros, Burgo de Osma, Villarobledo, Guadix, etc. hasta un total de 18 festejos... En Caravaca se presentó con picadores el 6 de octubre en un festejo mixto compartiendo cartel con los matadores de toros Niño de la Palma y Cagancho. Esta fue su última corrida esa temporada, para la siguiente se fijó el objetivo de presentarse en Madrid, para ello cambió de apoderado, pasando a serlo Maera de Tarancón. Comenzó la temporada de 1936 firmó primero dos contratos para actuar en la Plaza de Tetuán de las Victorias, donde obtuvo sendos éxitos cortando las orejas de los novillos, y finalmente presentarse en la Plaza de Las Ventas el 12 de julio con ganado de Esteban González formando terna con José Neila y Torerito de Triana, en una corrida que ha pasado a la historia por ser la última que se celebró en la capital de España antes del estallido de la Guerra Civil...


La guerra obstaculizó la ascendente trayectoria del diestro Caravaqueño... El número de espectáculos taurinos disminuyó en la zona republicana,... A pesar de ello consiguió intervenir en algunos festejos benéficos en Caravaca, Albacete, donde fue corneado, Murcia y Cehegín. El último festejo en que participó fue una corrida a beneficio del Socorro Rojo Internacional celebrada en Murcia el 13 de junio de 1937, y tras ser liberado del campo de prisioneros donde había sido internado por haber servido en las filas del ejército republicano, Pedro Barrera regresa a Caravaca dispuesto a retomar su carrera taurina; consciente de la dificultad del reto por tener casi que empezar de nuevo. Toreó en Cartagena el 4 de junio de 1939, a pesar de que los novillos no ayudaron demostró que tenía condiciones para triunfar, demostró con la muleta en el último de la tarde su arte y dominio hizo una faenas redonda con todos los pases de su amplio repertorio, con el capote toreó con soltura, quedó claro que no había perdido el sitio que tenía, como figura en la novillería. Toreó en Orihuela el día 18 una novillada a beneficio de la suscripción nacional para el ejército español en la que obtuvo un triunfo total con orejas, rabo y salida en hombros siendo paseado por las calles de la ciudad... En 1939 consigue torear 14 novilladas, presentándose en Barcelona, en la Plaza de las Arenas, el 6 de agosto; en la Maestranza de Sevilla el 15 de agosto y actuando con éxito dos tardes en la Monumental de Las Ventas, con actuaciones relevantes en Alicante, Albacete y Caravaca: Al quinto de la tarde le hizo una faena memorable. Mató de un pinchazo y estocada y cortó las orejas y el rabo, terminando la temporada en Valencia el 29 de octubre...

En la temporada de 1940 fue la de su consagración en las principales plazas de España, especialmente en la de Madrid, donde cuajó tres buenas tardes: El 30 de junio volteó la plaza de cabeza en Madrid, con cortó los máximos trofeos. Volvió el 7 de julio, siendo corneado, aunque sin más lesiones que un puntazo y ligera conmoción cerebral, en su primer novillo... Repitió el 25 de julio, toreó magistralmente a un novillo, y cortó las dos orejas, lo que llamó la atención en Madrid. Esa temporada toreó 29 novilladas, ocupando el segundo puesto en el escalafón de novilleros; triunfó la mayoría de las tardes, aunque pagó con sangre sus triunfos ya que sufrió el 7 de octubre en Caravaca un puntazo de 4 centímetros y un esguince en el pie, y el 12 de octubre en Córdoba una grave cornada de 20 centímetros en la ingle izquierda, con lo que concluyó la temporada dejando varios compromisos firmados... En 1942 comenzó con 3 novilladas en Barcelona, la última un mano a mano con Martín Vázquez en el que cortó una oreja. El 23 de marzo se presentó en Bilbao, obteniendo un gran triunfo con orejas, rabo y vuelta al ruedo, el 6 de abril toreó por primera vez en Portugal en la Plaza de Lisboa, y el 12 de julio en Pamplona; esta temporada, hasta la alternativa, participó en 23 novilladas. El 9 de octubre de 1941 confirmó la alternativa en Madrid con Marcial Lalanda de padrino y Pepe Bienvenida y Manolete los testigos al ser una corrida de ocho toros. El Toro de la confirmación era cárdeno, de nombre Risueño de la ganadería de D. Antonio Pérez Tabernero. El Torero Caraqueño tuvo una tarde afortunada, fue ovacionado y dio la vuelta al ruedo en el primero y en el octavo, un toro grande y bronco, estuvo bien. Como matador de toros intervino en 1941 en 21 corridas, siendo la mas destacada la de Beneficencia celebrada en Madrid el 12 de octubre, en la que cortó una oreja y dio la vuelta al ruedo, tarde que siempre guardaba en su memoria el maestro Barrera es el de su consagración total, toreando 33 tardes. Comenzó en Valencia el día de San José cortando una oreja en una faena temeraria. Toreo magistral en Alicante el 3 de mayo y el 2 de agosto, en Murcia el 18 de julio, Madrid el 19 de julio, donde volvió a cortar una oreja, Málaga el 9 de agosto, Murcia el 8 de septiembre y Hellín los días 27 y 28 también de septiembre. Este año tuvo 3 graves cornadas, en febrero en un tentadero en la ganadería de Escolar, en Gijón el 15 de agosto y en Cehegín el 11 de septiembre. Se resintió de esas cornadas en Caravaca, dando por finalizada su temporada. En 1943 toreó 33 corridas y 3 festivales y aunque no mantuvo el nivel de temporadas anteriores, se mantuvo en un buen puesto y consiguió éxitos importantes, en Murcia, Barcelona, Espinho, Lisboa, Gijón y Linares. En Madrid torea el 6 de junio, volviendo a cortar una oreja. Tuvo un legendario mano a mano con Manolete, en la Plaza de Madrid el 6 de octubre de 1943 con toros de D. José Escobar. Como matador de toros compartió cartel en quince ocasiones con el monstruo cordobés... La carrera de Pedro Barrera fue breve pero intensa, anunciando de manera inesperada su retiro el 29 de junio de 1944 tras una corrida celebrada en Castro Urdiales, cuando tan solo había toreado esa temporada 10 corridas y tenía firmadas varias más... Solo volvería a vestirse de luces en 4 ocasiones, en Puertollano el 3 de mayo de 1945, el 30 de mayo de 1946 en Murcia en una corrida pro damnificados en las inundaciones, el 16 de abril de 1949 en Lorca lidiando toros de la Viuda de Molero siendo sus compañeros esa tarde Pepe y Luís Miguel Dominguín... Donde surgió la famosa frase de los Dominguín: "O torea Pedro Barrera o nosotros no toreamos.. Y toreó, ¡sí señor!


En Espinho Portugal el 3 de julio de ese mismo año… En el retiro Pedro Barrera nunca se alejó del mundo de los toros, participó en numerosos festivales benéficos, y también ayudó a jóvenes toreros incluso como empresario ocasional. El último festival en el que intervino tuvo lugar en Calasparra el 25 de octubre de 1959, lidiando en él un novillo de los hermanos Zuazo, al que le cortó las dos orejas y el rabo.

Pedro Barrera pasó los últimos años de su vida en la finca de su propiedad con unos 300 años de antigüedad, la finca está cerca de la ciudad de Caravaca de la Cruz; reconocida como la quinta ciudad más Santa del Cristianismo y de los pueblos de La Almudema y La Encarnación. Situada en un bosque de pinos, rodeada por almendros y árboles frutales… Murió ahí en su pueblo natal el 21 de agosto de 1977 a los 65 años de edad habiéndose ganado el respeto de la afición taurina por su coraje y pundonor, dejando todo un ejemplo de torería para las nuevas generaciones..... 

Era un torero y gran persona Altruista, toreaba para recaudar fondos para Komsomol, comité de refugiados o para los niños huérfanos del Socorro Rojo. En la posguerra participó en muchos festivales benéficos, como para la Hermandad del Cristo del Descendimiento de Córdoba. Varios en Cehegín para el hospital de ancianos; en Cañada de la Cruz para la Iglesia; en Caravaca para la Stma. Cruz, para el hospital o para las fiestas; en Murcia participó para el asilo de ancianos, el santuario de la Fuensanta… También lo hizo en Madrid, Salamanca, Portugal, Pamplona, Valencia, Granada o Bilbao.

El último fue en 1959 en Calasparra. Su Don de gente, humanidad y generosidad la conocían muy bien sus paisanos de Caravaca: “Me regaló la casa donde vivo; “Pagó la operación de mi hijo”; “Sufragó la carrera de mi hijo”; “Gracias a él no fusilaron a mi padre en 1942”; “Mantuvo a mi familia hasta que mi padre se curó de una grave enfermedad”; “Pagó el pasaje desde Argentina a mis padres, abuelos, a mis cuatro hermanos y a otro señor. Al llegar a Cádiz les dio dinero para los gastos hasta que tuviesen un trabajo”; “Gracias a tu padre mis hijos no pasaron hambre. Nos dejaba hacer carbón en sus fincas y llevarnos leña y piñas, algunos sacos, siendo suyas, nos las pagaba”; “Por ser gitanos nadie nos daba trabajo. D. Pedro nos lo dio, durante un mes, para la siega y trilla. Nos dio de comer todo el tiempo. Nos pagó muy bien y al finalizar nos pudimos llevar trigo y cebada para varios meses”. Los vendedores, de lotería, de cupones de ciegos le compraba los que le quedaban por la noche, limpiabotas le limpiaban los zapatos 8 o 10 veces al día, camareros, serenos nunca se llevaba las llaves para que ellos le abrieran por la noche la puerta de casa, los Paisas, etc. sería interminable enlistar todo lo que ayudó aunque en el cielo le la tienen bien contabilizada…. 


..Tenía un noble corazón don Pedro Barrera...

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