Puede ser muy peligroso este comportamiento en cualquiera, pero mucho más lo es si quien lo padece dispone de mando o sillón donde ya la gente suele volverse loco/a del todo.
La enajenación mental transitoria podría argumentarse a su favor, pero cuando se tiene un carné de izquierda, con licencia para la imposición, esa enajenación suele mezclarse con componentes sectarios que suelen arrasar por donde pasan, dejando de ser transitorios, pues obedecen a una realidad virtual que solo vive en sus mentes. Los toros no les gusta y se nota… demasiado.
Le ha tocado al mundo del toro en esta ocasión, pero decisiones tomadas desde la intolerancia, a pesar de presumir de ella, y la falta de empatía con la libertad y los derechos de los demás, siempre predicados en contrario, hacen que de ciertos personajes haya que huir.
Se revisten de corderos cuando son lobos por los cuatro costados y con las cosas del prohibir se manejan a la perfección. Puede parecer inverosímil, pero no conocen otro camino que no sea el que lleva a su redil, a su forma de pensar.
Nigeriano/a es aquel nacido/a en Nigeria, del mismo modo que asturiano es el nacido en Asturias. La casta Jijona nada tiene que ver con Gijón, pero si alguno/a se empeña se podrá llegar a deducir que es un encaste propio de esa tierra a quien le dio el nombre uno/a que no era experto en ortografía.
Feminista es aquel que defiende una postura, de igual modo que puede ser feminista alguien que no defiende nada en concreto o que pertenece a una reata. Trompetero puede ser el nombre de un toro, pero también, si se empeña alguno/a, podría ser un insulto a un elefante, una raza a preservar. Bastará con dar rienda suelta a la imaginación y montamos una polémica y un problema donde no lo hay.
En Asturias, patria querida, Asturias de mis amores, quien estuviera en Asturias en algunas ocasiones… Claro que en otras ocasiones y circunstancias es mejor no estar, habrá que huir por si te encuentras con la alcaldesa de Gijón y comienza a desvariar con el lenguaje y sus orígenes o cualquier otra cosa que se le ocurra.
Con gente con la cabeza así amueblada es mejor no tener tratos, puede considerar maltrato el lenguaje y en un santiamén es capaz de prohibir aquello que está protegido por Ley. Y es que suele acostumbrar, puede que sea por aquello de llamarse Ana, a hacer y prohibir lo que le viene en gana.
Naturalmente que yo no quiero huir de esa bendita tierra que es Asturias, por lo que espero que los asturianos, los de cabeza no enajenada, reviertan la situación y pongan a quien tan mal les representa de patitas en la calle.
P.D. Todo tipo de argumentos, así como denuncias, ya han sido expuestos y realizadas por compañeros y gente del toro. Yo he tirado de ironía.
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