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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

viernes, 19 de junio de 2020

"Ni Olvido Ni Perdón". La pionera femenina a la que nunca recordará Podemos. La primera mujer policía asesinada por ETA 1981 / por Javier Navascués

Honor a esta valiente joven, heroína de España. La historia de España la recuerda con afecto, gratitud y admiración.

La pionera femenina a la que nunca recordará Podemos. La primera mujer policía asesinada por ETA 1981

JAVIER NAVASCUÉS - 19 Junio 2020
Hace casi 40 años. El 15 de junio de 1981 la agente del Cuerpo Superior de Policía María José García Sánchez moría asesinada de un tiro en la cabeza en Zarauz, Guipúzcoa, cuando en compañía de otros compañeros de la Guardia Civil, Cuerpo Superior y la Policía Nacional participaba en un operativo para detener a un "comando" de ETA en un inmueble de la urbanización llamada Vista Alegre, en la citada localidad vasca.

Cuando los policías subían las escaleras del edificio, dos etarras, que habían captado la presencia de los agentes en la entrada del edificio trataron de abrirse paso bajando las escaleras a tiros. La agente García Sánchez recibió un disparo en la cabeza y murió en el acto. Por desgracia, los etarras lograron escapar. Fue detenido el etarra dueño del piso donde se alojaban los dos terroristas que huyeron, Juan María Tapia Irujo, que posteriormente sería condenado por la Audiencia Nacional.

Se cree que los autores materiales fueron Mikel Goicoechea "Txapela" y José Luis Eciozalaga Galán, "Dienteputo". "Txapela" moriría en una acción del GAL en diciembre de 1983.

La agente, de 23 años había nacido en Madrid y fue enterrada en Ciruelos, Toledo. Se había graduado en la primera promoción de agentes femeninas de policía en España. Desde 1979 había recibido 10 felicitaciones por su trabajo. El Cuerpo Superior de Policía era una institución policial que posteriormente sería refundida en la Polícia Nacional.

Honor a esta valiente joven, heroína de España, a la que ni Podemos ni el resto de las feministas profesionales, por supuesto, jamás homenajearán. Pero la historia de España la recuerda con afecto, gratitud y admiración.

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