HA MUERTO
UN GRAN TORERO,
SE HA IDO
UN AMIGO ENTRAÑABLE:
MIGUEL ESPINOSA
“ARMILLITA CHICO
DOLOROSA PARTIDA DE UN AMIGO MUY APRECIADO
EL VITO / Caracas, 6 de Noviembre de 2017
Conocimos de la infausta noticia por nuestro amigo Dick Acha, hijo del recordado Raúl Acha Rovira: Ha muerto Miguel Espinosa, “Armillita Chico”.
Impactante, pues hacía pocos días habíamos conversado con él, lleno de ilusión con su restaurante “Casa Miguel” en Aguascalientes. Nos citamos para la pasada Feria de San Isidro, donde cada año nos reuníamos -cuando podíamos – pero los dos fallamos a la cita.
La última vez que nos reunimos fue en Madrid, en el Wellington con Juan Lamarca, Manolo Lozano, Miguel Bienvenida, Luguillano, Juan Miguel Núñez , Luis Álvarez y amigos como Morenito de Maracay y el Maestro Espartaco
Muere Miguel a los 58 años de edad, habiendo sido reconocido como un torero de Arte – si, con mayúscula.- Arte en la plaza y en la amistad. Fue de los nuestros, de los mejores amigos en el querido México
Hijo de una gloria del toreo universal, el Maestro Fermín Espinosa Saucedo “Armillita” y, con gran categoría, Miguel tomó la alternativa en la plaza "Santa María" de Querétaro el 26 de noviembre de 1977 de manos de Manolo Martínez y con Eloy Cavazos y José Mari Manzanares como testigos en una faena con toros de Javier Garfias.
Era el tercero de los hijos del Maestro Armillita: Manolo y Fermín le antecedieron.
ENTRE AMIGOS, CON EL CAPEA
Miguel Espinosa debutó como novillero en Jiquilpan Michoacán el 16 de noviembre de 1975 y el 30 de mayo de 1976 lo hizo ya de profesional alternando con Benjamín Magallanes y Mario Escobedo. Viajo a España en 1977 y toreó en la Maestranza de Sevilla, la Monumental de Barcelona y plazas de primera categoría como Valencia, Pamplona o Palma de Mallorca siempre bajo la supervisión de Vargas, un taurino sevillano que había sido de la confianza de Carlos Arruza.
Regresó a México para su alternativa en Querétaro el 26 de noviembre. Su padrino Manolo Martínez y dos testigos, Eloy Cavazos y José María Manzanares.
Cartel casi insuperable con toros de Javier Garfias..
A punto de cumplir los 40 años de alternativa, Miguel Espinosa quiso debutar al año siguiente en Las Ventas con la confirmación, pero la idea se frustró por una grave cornada sufrida en Nimes, percance que le dejó en el dique seco.
La confirmación tuvo que esperar hasta 1983 cuando Manolo Vázquez le cedió el toro Piconero de Gabriel Rojas en presencia de Manzanares. Aquello fue una reunión de la crema de la crema en Madrid con don Antonio Ariza, Jorge Cuesta, Raúl Izquierdo, El Mosco Suárez, el ganadero Ortega Berroeta, el restaurantero Carmelo Espinosa entre los que recuerdo.
El 18 de febrero de 1979 confirmó la alternativa en la Plaza México de manos de Mariano Ramos con Niño de la Capea como testigo, con el toro Jarabe de Jaral de Peñas. Año que recoge el prestigioso trofeo Domecq por su buen toreo de muleta en el coso capitalino.
Uno de los triunfos más importantes de su carrera fue en mayo de 1986 cuando cortó un rabo a Tenor, de Begoña, en la Plaza México. Éxito a éxito la década de los 80 la completa como uno de los toreros que más festejos suma en el escalafón mayor mexicano.
ENTRAÑABLES AMIGOS: MIGUEL EN SAN LUIS, EL VITO,
DAVID SILVETI, MI COMPADRE RAÚL IZQUIERDO
Y EL MAESTRO ELOY CAVAZOS
Imborrable en mis recuerdos la faena a Flor India de don Fernando de la Mora, tarde que su amigo y gran torero David Silveti cuajó una faena cumbre que puso haber sido consagratoria de no haber fallado con la espada. Miguel y David junto a Jorge Gutiérrez pudiera haber escrito una historia muy grande de haberse ceñido a los intereses del toreo y no a los grupos que les condujeron por caminos sembrados de envidia y de equivocaciones.
Uno de los recuerdos más profundos que dejó Miguel Espinosa en la afición española fue en el festival homenaje a Julio Robles que se celebró en Las Ventas el 24 de octubre de 1992. Un puñado de derechazos y naturales de excelso relajo pusieron boca abajo el ruedo madrileño y sirvieron para abrir la Puerta Grande de Las Ventas de par en par. .
Su carrera se alarga hasta entrados los 2000.
En 2001 torea en Madrid, Barcelona o Sevilla. Va a Colombia y en Colombia Bogotá con César Rincón y Manuel Caballero en la Santamaría la histórica tarde que el Maestro Fernando Botero recibió un brindis por parte del Maestro de Chichimeco
También dejó impronta en la Plaza de Acho la temporada del Señor de los Milagros que coincidió con Antoñete y con Curro Vazquez.
Armillita se despidió de los ruedos en el 2005 en una breve campaña de 11 festejos entre los que no entre la Monumental Plaza México. La última tarde fue el 1 de mayo de 2005 en un mano a mano en Aguascalientes con Enrique Ponce pero volvió a enfundarse el traje de luces para confirmar la alternativa en la Plaza México a Cayetano el 6 de diciembre de 2009.
En Venezuela se presentó en la Feria del Sol en Mérida, y toreó en Maracay, Maracaibo, Valencia y en el Nuevo Circo triunfó al lado de Curro Girón y de El Niño de la Capea con toros de Tarapio.
Las mejores faenas de su vida, siendo figura del toreo y Maestro indiscutible, fueron el campo de la amistad.
Fue una gran persona, un ser irrepetible.
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