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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

martes, 15 de septiembre de 2020

A propósito del Felón: Le han llamado de todo / por Rafael Comino Delgado

También le llaman presidente de un gobierno criminal
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¿Son insultos? Pues también cada uno tendrá su opinión al respecto pero, resumidamente, pensamos qué cuando a alguien se le dedica un adjetivo, por despectivo y duro que sea, si es verdadero, si no se está mintiendo, no debe considerarse insulto.

Le han llamado de todo

Rafael Comino Delgado* 
Me refiero al presidente del gobierno, don Pedro Sánchez Pérez-Castejón. Le han llamado de todo, y nada demasiado agradable.

Vamos a recordar algunos apelativos o calificativos que le han dedicado:

-Pedro Mentiras, también, el Mentiras.- La razón es obvia, pues prácticamente todo lo que dice es mentira.

-Falconeti.- Debido a su gran afición por el falcon, no solo para asuntos oficiales sino que también lo utiliza para asuntos totalmente privados. Naturalmente pagado por los españoles.

-Doctor Plagio.-Como sabemos presentó una tesis doctoral plagiada, y por tanto debería retirársele el título de doctor.

-El Plagiario.- Por las misma razón

-El Doctor Fraude.- Lógico, pues su título de doctor es fraudulento.

-El Doctor Cum Fraude. Lógico

-El Fraudillo.- También lógico

-El Bobo Fatuo.- Es hombre de escasa cultura, intelectualmente muy mediocre, aunque quiera aparentar  superioridad. Pero fatuidad, engreimiento y soberbia le sobran, por eso lo de “Bobo fatuo” creo que le encaja perfectamente. 

-Traidor.-Es evidente que ha traicionado a España y los españoles pactando con quien decía que jamás pactaría: Los separatistas, los proterroristas y los comunistas bolivarianos.

-El Felón.- Es decir, el traidor.A 

-Don  Joaquín Sama, colegiado honorario en el Colegio de médicos de Córdoba, especialista en Psiquiatría, Neurología y Medicina Familiar y Comunitaria, en una artículo que circula por la redes sociales, le califica como: “Psicópata narcisista, con un trastorno de la personalidad de tipo narcisista”.

-Dª Ana Velasco Vidal-Abarca, publica un artículo en AD, el 10 de septiembre pasado, llamándole, “Canalla”.

-El músico Felipe Campuzano, en un twit de enero de 2016, le decía “…eres un mierda …”

-Además de todo ello, por las redes circulan audios y videos en los que le llaman cosas incluso peores, que no queremos reproducir.

Todo eso lo consideramos gravísimo, muy fuerte, aunque la más dura de las referencias que hemos dado, a nuestro parecer, es la última, la de Felipe Campuzano, pues que te digan, “eres un mierda” es el desprecio más grande que se le puede decir a una persona, en este caso el presidente del gobierno.

Tras esta exposición se nos ocurren dos preguntas: a)¿Están justificados todos esos adjetivos?; b)¿Son insultos? 

Nosotros no vamos a opinar si están o no justificados. Cada uno tendrá su propia opinión, pero hay algo innegable y es que antes a ningún presidente del gobierno, desde la democracia, se le habían dichos cosas tan extremadamente duras. ¡Por algo será!

¿Son insultos? Pues también cada uno tendrá su opinión al respecto pero, resumidamente, pensamos qué cuando a alguien se le dedica un adjetivo, por despectivo y duro que sea, si es verdadero, si no se está mintiendo, no debe considerarse insulto. Por ejemplo, si a un ladrón (se ha demostrado sin duda que ha robado) se le llama, “ladrón” no puede considerarse ni ofensa ni insulto; simplemente se le ha dicho la verdad, pero si se le llama ladrón a una persona que no ha robado jamás, si, es una ofensa e insulto. ¡Que cada uno opine según su saber y entender!

Nosotros tenemos nuestra opinión en general, pero no la vamos a decir, aunque si nos pronunciaremos con respecto a lo siguiente: 

a)Su actuación, hace unos días, cuando en el Senado dio el pésame a Bildu por el suicido de un terrorista de ETA en la cárcel. En primer lugar, opinamos que si dio el pésame a Bildu es que les considera terroristas como el suicidado. Y en segundo lugar, que hay que tener muy poca dignidad, o mejor ninguna dignidad, para lamentar la muerte de un terrorista criminal, y no decir nada de las victimas que él y los demás etarras (ahora Bildu, de acuerdo con la actuación de don Pedro) produjeron en España. Hay personas que llegan incluso a perderse el respeto a sí mismo, que es lo más que se puede perder en la vida, según decía Gandhi, y cuando eso sucede ya no queda dignidad alguna, se ha perdido toda. 

Bueno pues pensamos que don Pedro se ha perdido el respeto a sí mismo, y con ello ha perdido toda su dignidad, y más aun, teniendo en cuenta que a don Pedro Sánchez le importa un bledo la muerte de un etarra o de mil etarras, o de cien mil personas que no le voten a él. 

Dio ese pésame para obtener los votos de los proterroristas en el parlamento, a cambio de blanquear el terrorismo y humillar a las víctimas y a todos los españoles decentes. Lo que le importa es ser el presidente del gobierno para aprovecharse del cargo, para colocar a sus familiares y amigos y por vanidad, pero lo que sea de nuestra nación, de nuestros conciudadanos le da absolutamente igual. Insisto, si se suicidaran diariamente cien mil españoles, de los que jamás le votarían, creo que sería feliz, muy feliz. Pienso que es un ser tan extremadamente amoral que no tiene principio alguno de ética, de moral. No tiene parangón en la historia de España. Si mañana le dijeran que para seguir siendo presidente del gobierno tendría que llevar, de nuevo, los restos del generalísimo Franco al Valle de los Caídos, y oír diariamente una misa por su alma, lo haría sin dudar, y con la misma sonrisa que muestra siempre. A él ni España ni los españoles le importamos, solo le importa ser presidente, y para ello vendería, no ya su dignidad, sino que haría lo que le pidieran; b)El plagio de la tesis. Llevo 50 años en la universidad y nunca conocí indignidad como esta; c)Tengo ya bastantes años y nunca había visto a una persona mentir tanto como miente don Pedro Sánchez, y además hacerlo con tanta naturalidad. Nació para mentir, lo hace igual que el respirar.

Como ya señalábamos, es la persona más indigna de la que tenemos referencia y, como decía René Gerónimo Favarolo (cardiocirujano argentino; 1923-2000), “Proceder con honestidad, en aras de la dignidad del hombre es el compromiso más trascendente en nuestro paso por este mundo”, pero “La vanidad saquea a la dignidad”,  según Luis Alberto Costales (poeta, historiador, filósofo y político ecuatoriano; 1926-2006 ), y vanidad tiene don Pedro sin  límite.

Con toda sinceridad, es lo que pienso, y con la misma sinceridad digo que me gustaría muchísimo estar equivocado, pero creo que desgraciadamente estoy en lo cierto.

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*Rafael Comino Delgado Académico de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Cádiz

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