El cronista taurino venezolano
Pepe Cabello, saludando a Sebastián Palomo Linares. (Foto Cuevas).
"...El Dr. Pepe Cabello, se destacó como un cronista taurino de excepción y de permanente consulta. Sin duda alguna, por su larga trayectoria, fue el crítico taurino más entendido, distinguido y calificado de Venezuela..."
**************
Enlace relacionado:
Rafael Dupouy Gómez
Caracas / Julio/ 2015
El
21 de julio de 2015, se cumple el primer aniversario de la triste desaparición
física de mi siempre recordado gran amigo, el Dr. José Antonio Cabello
Arizaleta, mejor conocido como “Pepe” Cabello, quien fuera para ese entonces, el
decano de los cronistas taurinos de Venezuela. Entregó su alma a Dios, el 21 de
julio de 2014, a la edad de 85 años en su residencia caraqueña.
Sus
interesantes, amenas y bien documentadas crónicas siempre gozaron de mi
predilección, porque aportaban conocimientos importantes sobre el mundo del
toro. Inolvidables fueron sus reseñas sobre las anécdotas e historias de los
grandes maestros de la tauromaquia. El Dr. Pepe Cabello, se destacó como un
cronista taurino de excepción y de permanente consulta. Sin duda alguna, por su
larga trayectoria, fue el crítico taurino más entendido, distinguido y calificado
de Venezuela.
Nació,
el 20 de diciembre de 1928, en Caracas (Venezuela). Su afición taurina le vino
desde muy niño por ser vecino de la histórica plaza de toros de la capital, el
“Nuevo Circo” de gratos e inolvidables recuerdos para los venezolanos. Su casa
estaba situada, detrás del tendido de sol y su madre, doña Helena Arizaleta de
Cabello era muy aficionada. Su padre, don Antonio Cabello, era dueño de un
botiquín en la esquina de San Francisco y también tenía una línea de taxis, de
las primeras que existían en Caracas. Muchas veces, le tocó llevar a los
toreros hasta el coso del Nuevo Circo. De su familia, Pepe fue el último que se
aficionó a las corridas de toros. Además de su gran pasión por la Fiesta Brava,
también fue un fiel seguidor del Fútbol y el Boxeo. Se desempeñó como Abogado
de la República y cronista taurino.
Escribió
su primera crónica taurina después de presenciar, en enero de 1946, a los “Chicos de Querétaro” y el debut del
diestro mexicano Pepe Luis Vázquez, homónimo del “Sócrates de San Bernardo”, en el Nuevo Circo de Caracas. “Los Chicos de Querétaro”, era una
cuadrilla infantil mexicana, integrada por niños entre diez y doce años de edad
que lidiaban becerros de pura casta. Como dato curioso, en una de sus
presentaciones, se lanzó como espontáneo César Girón con doce años, demostrando
al público asistente que él podía hacer eso mucho mejor que los niños aztecas.
Posteriormente,
el Dr. Pepe Cabello, escribió en el diario caraqueño “El Gráfico” la primera crónica dedicada a César Girón cuando
debutó como becerrista con traje corto, el 24 de julio de 1948, en la
Maestranza de Maracay. Tituló su crónica “Nuevo
Sol de Aragua”, refiriéndose a la gran actuación de la joven promesa del
toreo venezolano, para concluir: ¡César
Girón, otra figura en miniatura que se inicia a grandes pasos...!”
Por
cierto, correspondió al Dr. Pepe Cabello, registrar el documento del poder
otorgado a Fernando Gago para que manejara la carrera taurina de César Girón en
España. En la época del renacer de nuevas figuras del toreo venezolano con los
triunfos de Luis Sánchez Olivares “Diamante Negro” y Alí Gómez el “León de
Camoruco”, dedicó a éstos toreros criollos su interesante folleto “Historia de dos ídolos”, que fue muy
leído por los aficionados taurinos venezolanos. Escribió sus crónicas taurinas
en la popular revista “Venezuela Deportiva”
que, posteriormente, cambio su nombre por el de “Venezuela Gráfica”.
Fue
el primero en aparecer en las cámaras de televisión cuando se inauguró la
“Televisora Nacional” en Venezuela, presentando el programa “Arte y Ciencia de la Tauromaquia”, donde
consiguió interesantes entrevistas a los toreros nacionales y extranjeros que
visitaban nuestro país. A partir de 1951, escribió desde España sus “Crónicas Viajeras” con mucho éxito y la
aceptación de los aficionados.
Posteriormente,
pasó a escribir las crónicas taurinas del diario “El Nacional”, sustituyendo al
gran cronista venezolano, don Oswaldo Pérez Esteves, quien había sido nombrado
Cónsul de Venezuela en Vigo (España). Su primera columna en el diario “El
Nacional” se llamó “Toritos”.
Sus
magníficas crónicas taurinas fueron publicadas en los periódicos de circulación
en todo el territorio nacional como “El Nacional”, “El Universal”, “El Globo” y
a nivel regional en el diario “La Verdad” (Edo. Zulia). Trabajó durante 18 años
en el diario “El Nacional” y 30 años en el diario “El Universal”. Implantó
récord en un mes siendo publicadas sus crónicas taurinas todos los días.
Remataba siempre sus crónicas con su popular des-Cabello.
Viajó
a Madrid (España) en 1957, siendo designado por la Unión de Matadores de
Venezuela para representarla jurídicamente ante las autoridades sindicales
españolas. Se trató de llegar a la firma de un Convenio Taurino entre el Grupo
Taurino del Sindicato Nacional español del Espectáculo y la citada Unión
venezolana con el objeto de garantizar las actuaciones de los toreros
venezolanos en los ruedos españoles. El Dr. Pepe Cabello, logró que los
novilleros venezolanos pudieran participar, al menos, en 10 novilladas sin
picadores. En cuanto a los matadores de toros, se aprobó la condición, que si
toreaban dos venezolanos juntos, tendrían que compartir el cartel con dos
toreros españoles, lidiándose 8 toros. El Convenio también permitió, que
torearan juntos, tres diestros de distintas nacionalidades. Su gestión fue
complicada pero logró conseguir el máximo beneficio en el Convenio para los
toreros compatriotas, especialmente, para los novilleros.
Igualmente,
actuó en defensa de los diestros venezolanos, César, Rafael y Curro Girón, a
quienes se trató de sancionar en España, porque para los toreros españoles, los
hermanos Girón representaban una competencia peligrosa, al copar los carteles
en varias ocasiones. El Dr. Pepe Cabello, consiguió dejar en suspenso las
sanciones anunciadas y que la pena fuera eliminada, ya que estaba prohibido que
diestros americanos se presentaran en una corrida, sin la participación de
españoles.
El muy entendido
cronista taurino venezolano Pepe Cabello, entrevistando al joven diestro
valenciano Enrique Ponce durante la Feria del Sol de Mérida de 1991
(Venezuela).
El
Dr. Pepe Cabello, conservó con orgullo la entrada como el primer espectador que
entró en la nueva plaza de toros de Vista Alegre (Bilbao), el día de su
inauguración, el 19 de junio de 1962, ya que la antigua plaza de toros de 1882,
sufrió un pavoroso incendio que la destruyó por completo. Los diestros que
participaron en esa histórica tarde fueron: Antonio Ordóñez, el venezolano
César Girón y Rafael Chacarte, quienes cedieron la mitad de sus honorarios.
El
cronista taurino Dr. Pepe Cabello, por primera vez en la historia de la radio y
televisión venezolana, consiguió transmitir en directo desde España, el año
1970, la alternativa del novillero venezolano Jesús Narváez. Siéndole concedido
por dicha transmisión, el importante galardón “Premio Ondas”, como el locutor internacional más destacado del año
en Venezuela.
Siempre
se distinguió por su laboriosidad investigativa, consiguiendo interesantísimas
entrevistas con las más importantes figuras del toreo, acompañándoles en su
quehacer diario, por las carreteras de pueblo en pueblo, registrando con
acuciosidad sus actuaciones en las plazas de toros, compartiendo amenas y
entrañables tertulias que enriquecieron sus bien documentadas crónicas.
Publicó
dos interesantes libros sobre la Fiesta Brava como lo fueron: “Redondel de Ilusiones” (1972), donde
realizó un importante recuento de las temporadas novilleriles celebradas en el
Nuevo Circo de Caracas, destacando a las prometedoras figuras nacionales del
momento. Esa obra se la dedicó a sus padres, doña Helena Arizaleta de Cabello y
don Antonio Cabello. El mismo año de 1972, publicó su segundo libro: “Toreros fuera del ruedo”, excelente
obra en donde el cronista taurino venezolano, logró amenas e interesantes
entrevistas a destacadas figuras del toreo como fueron: Manuel Rodríguez
Sánchez “Manolete”, Rafael Gómez “El Gallo”, Cayetano Ordóñez “Niño de la
Palma”, Juan Belmonte, Manuel Jiménez “Chicuelo”, Domingo Ortega, Antonio
Ordóñez, Paco Camino, Santiago Martín “El Viti”, Manuel Benítez “El Cordobés”,
Palomo Linares y los venezolanos, Eleazar Sananes “Rubito”, Julio Mendoza
Palma, César Girón y Héctor Álvarez.
Con
motivo de la celebración del 40° Aniversario de la Maestranza de Maracay, el
Dr. Pepe Cabello, le hizo a mi abuelo Florencio Gómez Núñez, un
hermoso reportaje dedicándole una página completa, incluyendo una
amena entrevista con interesantes fotografías en el Diario “El Universal”,
siendo publicada, el 17 de enero de 1973.
Acto del 40°
Aniversario de la Maestranza de Maracay, celebrado el 20 de enero de 1973. De
izquierda a derecha: El Dr. Pepe Cabello, orador de orden, su esposa Neida
Villarroel de Cabello y don Florencio Gómez Núñez. Salón de Sesiones del
Concejo Municipal del Distrito Girardot (Edo. Aragua).
El
Dr. Pepe Cabello, fue distinguido como orador de orden en el acto organizado
por la Gobernación del Estado Aragua con motivo de la celebración del 40°
Aniversario de la Maestranza de Maracay, el 20 de enero de 1973. Se realizó una
sesión solemne celebrada en el Salón de Sesiones del Concejo Municipal del
Distrito Girardot (Edo. Aragua), asistiendo una gran concurrencia de
aficionados taurinos. En esa importante ceremonia, pronunció un magnífico
discurso sobre la historia del coso de Calicanto. En un extracto de sus
emotivas palabras, señaló:
“Gualda y roja la divisa. Por coincidencia, estaba allí
la bandera española sobre la sangrante carne del burel. Un número “19” el
hierro de La Providencia, de los hermanos Gómez Núñez.
¡Aquí está la plaza! Lo diría el General Juan Vicente
Gómez al quedar rematada y frisada la obra. Sería la ofrenda de Juan Vicente y
Florencio, de Florencio o Juan Vicente, no puede haber orden de antigüedad en
esa pareja torera, cuando abrieron sus puertas al entrar de gentes y al desfilar
de matadores. Pusieron la plaza, pusieron sus toros y pusieron también su
corazón”.
(Pepe Cabello, 20 de
enero de 1973).
En
la Revista “Estampas” del diario “El Universal”, publicó sus célebres “Mano a Mano”, incluyendo entrevistas y
curiosas anécdotas taurinas sobre importantes personalidades del mundo del
toro.
En
1990, tuvo la gentileza de ayudarme en mi trabajo de Tesis de Grado titulado “La Fiesta Brava en Venezuela como atractivo
turístico”, aportándome datos interesantes que fueron de gran utilidad.
El cronista taurino
venezolano Pepe Cabello y su inseparable esposa Neida Villarroel de Cabello,
disfrutando una tarde de toros en la Monumental de Las Ventas de Madrid. (Foto:
Cuevas).
En
1996 y 1997, publicó sus interesantes crónicas tituladas “Tribuna Taurina” en la revista “Tribuna Venezolana”.
En
el año 2000, el Dr. Pepe Cabello fue el orador de orden en la presentación del
libro “La Lidia y el Toreo”, escrito
por Antonio Petit Caro, editado en Venezuela por la Fundación BBVA Provincial.
Siendo
un gran amigo de los integrantes de la familia Bienvenida, participó en el
documental realizado por nosotros, los Hnos. Dupouy Gómez, “Los Bienvenida en Venezuela. Huella indeleble en el corazón de una
dinastía”, presentado, el 11 de mayo de 2011, en la plaza de toros
Monumental de Las Ventas de Madrid con motivo del I Encuentro Iberoamericano
del Círculo Taurino Amigos de la Dinastía Bienvenida.
Por
tal motivo, el 16 de abril de 2011, antes de partir para España, nos escribió
con cariño, lo siguiente: “Sinceramente
les deseo toda la suerte. ¡Suerte, vista y al toro!, durante los actos que
tienen programados en la Monumental de Las Ventas de Madrid, donde será
proyectada la película que con tanto arte y lujo de detalles realizaron para el
recuerdo y la historia los hermanos Dupouy Gómez. Flameo mi pañuelo para pedir
y otorgarles a todos los máximos trofeos”. (Pepe Cabello).
En
el año 2011, fue entrevistado en dos programas taurinos de “Tendido Cero”,
transmitidos por la Televisión Española (TVE), explicando la grave situación
del Nuevo Circo de Caracas, debido a la ausencia de la celebración de corridas
de toros 1997. El Dr. Pepe Cabello, hasta los últimos días de vida, se mantuvo
muy interesado y bien informado del acontecer taurino nacional e internacional.
A su muy querida e
inseparable viuda, Neida Villarroel de Cabello, a sus familiares y amigos, vaya
mi especial recuerdo en este artículo dedicado al gran amigo a quien tanto
extraño y tengo siempre presente.
¡Capotazos de afecto y que
Dios lo tenga en su Gloria!
No hay comentarios:
Publicar un comentario