
"Mensajes de ida y vuelta" en la relación epistolar entre Vicente Bort y François Zumbiehl aún bajo el impacto del "efecto Morante".
GLOSA A MORANTE DE LA PUEBLA
Vicente Bort
Querido Françoise, tu escrito oportuno y veraz, me invita a reflexionar sobre las más puras esencias de este arte que sentimos, como el de torear.
Y esa reflexión, me provoca algo tan difícil, como ponerme de acuerdo conmigo mismo, sobre los principios en los que cimenté este acontecimiento milagroso .
Y como siempre ocurre, intentas resumir, y conciliar en pocas palabras, lo que al final de un largo proceso, más de 70 años , representan para mí las dos virtudes cardinales y estéticas primarias del hombre y del torero.
Y surgen, y me asaltan, con riesgo a equivocarme, aquellas dos tan cervantinas, quijotescas, como la sencillez y la medida .
La “sencillez”, preludio de la naturalidad, como expresión viva del hombre bueno, capaz de mostrarse tal cual es, sin ostentaciones, sin máscaras y adornos inútiles .
Y enseguida, como ligada en la suerte, la “medida“, que conlleva equilibrio y sabiduría. La medida en el tiempo, en las emociones, en las distancias, en fin en el comportamiento .
Decía Antonio Machado, queriendo resaltar al hombre bueno:
Es el mejor de los buenos,
Quién sabe qué en esta vida,
Todo es cuestión de medida,
Un poco más, algo menos.
Es ahí, en la conjunción de la sencillez y la medida, donde a mi entender se enmarca la figura de este excepcional torero, Morante de la Puebla. Ahora, aparece para muchos recién llegados a las plazas, como una sorpresa desconocida, aunque su persona y su torería siempre han estado marcadas desde niño, por estas dos virtudes esenciales, que definen al hombre y al torero .
Lo difícil fácil, sin estridencias, con moderación. Como diría Antonio Bienvenida sobre el arte del toreo: “lo que sobra, después de lidiar sosegadamente, como mandan los cánones “.
Y así con sencillez y medida, José Antonio Morante, ha ido construyendo su obra, no sin mostrar acentos barrocos, adornos y filigranas, siempre después de cimentar su monumento.
Disfrutemos estos momentos, pues José Antonio ,junto a Pepe Luis, Pepín y Antonio, representa con sencillez y medida, sin lugar a dudas, la esencia más pura del toreo, sevillano o no !!
Un abrazo fuerte abrazo,
Vicente.
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