Un ingeniero agrónomo conmovió al mundo del toro / por Pla Ventura

"..Es totalmente honroso lo de este hombre que, con más afición que nadie en el mundo, como ha demostrado, el único título que le interesa y está dispuesto a conseguir no es otro que el de figura del toreo.."

Un ingeniero agrónomo conmovió al mundo del toro

Pla Ventura

Toros de Lidia/16 enero, 2024

Antaño, como sabemos, los toreros venían del hambre. Ahora ha cambiado todo mucho y, sin duda, para bien de los diestros que, muy lejos del hambre, algunos, caso de Borja Jiménez, llevan su título universitario como si tal cosa y, en realidad, si todos los toreros tuvieran dicha preparación, de no hallar el éxito en el mundo de los toros ya tenían un porvenir más que asegurado. Es totalmente honroso lo de este hombre que, con más afición que nadie en el mundo, como ha demostrado, el único título que le interesa y está dispuesto a conseguir no es otro que el de figura del toreo; la pena es que, cualquier titulación, te la ganas tú con tus estudios, dedicación, compromiso interior y capacidad de sacrificio, todo lo contrario que sucede en el mundo de los toros que, pese a toda entrega, valores intrínsecos que certifican la valía de cualquier torero para su profesión, como otros no quieran, todo lo conseguido no vale para nada.

Por supuesto que seguimos de cerca las declaraciones de Borja Jiménez en todos los sentidos y, los hechos certifican cosas que parecen sacadas de un cuento. Que Borja Jiménez, tras su éxito en Madrid haya recorrido más de treinta mil kilómetros para ser objeto de homenajes, entrevistas, declaraciones, agasajos, tentaderos de lujo…Lo de menos son los kilómetros que el chaval cita, todo ello tras terminar su temporada, lo paradójico es que, de forma profesional, desde que se doctoró, en el ejercicio de su profesión apenas recorrió la décima parte del trayecto antes descrito. Una situación que, como el chaval confesara, hasta le hizo dudar de todo; es más, él no entendía que, sin apenas haber logrado casi nada en la profesión, si “casi nada” se puede considerar cortar tres orejas en Madrid y a los toros de Victorino, todo lo demás démosle la lectura que creamos oportuna.

Reconozcamos que, la pasada temporada resultó crucial para el diestro de Espartinas puesto que, tras todo el peaje pagado durante varios años de anonimato, por fin, Borjita está viendo una luz al final del túnel; si hemos de reconocer que, jamás un torero con apenas quince festejos, tras acabar la temporada, había recibido tantos agasajos como el citado torero que, como se demostró, su éxito en Madrid desató todas las alarmas, hasta el punto de tantos reconocimientos como se le han brindado, algo que nos alegramos todos los aficionados.

Borja sabe, como cualquiera, que el camino seguirá siendo duro; esto no ha hecho nada más que empezar, pero, cierto es, el punto de partida no puede ser más esperanzador. No echemos las campanas al vuelo porque he querido ver mucho júbilo por parte de los aficionados de cara a este diestro admirable; lo digo porque, nosotros, los aficionados no somos los que contratamos a los toreros. Y hago este hincapié para que no nos llevemos más desilusiones de las debidas. De momento, para empezar, vemos contratado a Borja Jiménez en Valencia, una feria de postín en los albores de la temporada; una tarde en la que el chaval refrendará muchas cosas, pero, ya tengo la mosca detrás de la oreja al ver que le han puesto con los toros de Juan Pedro, eso mismo le hicieron el pasado año a Ángel Téllez en dicha plaza y con semejantes toros y, apenas le sirvió para nada.

En calidad de aficionado, respecto a Borja, tengo la sospecha por las actuaciones que le he visto que se trata de un buen torero, pero, barrunto que su toreo tiene que sostenerse con el toro encastado, ese que suele pedir acreditación a los diestros. Lo digo porque, Borjita, que es un torero de mucho porte, sigo creyendo que su mayor vibración ante el gentío viene dada cuando se enfrenta a ese tipo de animal encastado, bravo, pero con la fiereza suficiente para que se emocionen los aficionados en los tendidos.

Confiemos en la diosa fortuna para que, una vez contratado para la feria de Madrid, le embistan un par de toros que lo demás lo arreglará él, no me cabe la menor duda, este diestro se ha subido al tren del éxito y no le apea ni Dios que solemos decir. Solo una desgracia podría apartarle de lo que son sus ilusiones. Fundamento lo tiene todo, valor sin cuento, torería la que ha demostrado en sus actuaciones. Tras lo de Madrid, quedamos esperanzados para seguir viendo los éxitos de Borja Jiménez que, sin duda, serán nuestros triunfos por aquello de habernos encontrado un chaval que ha sido capaz de emocionarnos hasta la locura. Además de Valencia, es esperanzador que Borja Jiménez tenga ya firmadas dos corridas en la feria de San Isidro de Madrid, un acto de total justicia. Seguiremos muy atentos a la evolución de este diestro que, como digo, nos dejó a todos conmovidos.