Esta era la portada del disco 'Caminito de la plaza' ¡Perdón, de la playa!
En la plaza de Vistalegre de Madrid se anuncia el próximo fin de semana uno de sus ya clásicos comienzos de la temporada taurina. Y lo hace con un mano a mano de interés: El Cid, en su año de despedida, y Emilio de Justo, se enfrentarán en mano a mano ante seis toros de tres distintas ganaderías, siendo una de ellas la Victorino Martín, un hierro que a los dos les ha proporcionado muy mucho de su prestigio.
CAMINITO DE LA PLAZA...
Estamos muy cerca de comenzar el camino, de iniciar el caminito de la plaza. Alguno ha podido pensar en ‘Caminito de la playa’, pero eso es solo el título de una canción que interpretaba Valen, allá por los años sesenta/setenta, aquél cantautor granadino.
Decía ‘caminito de la playa, camino que recorrí, camino en que tantas veces, tantas tantas fui feliz…’ Cambien la playa por la plaza y tienen, seguro, un recuerdo igual de sus caminitos felices hacia las plazas de toros.
Coincidencia o no, el caso es que ese caminito nos suena a felicidad y mucho más si lo enmarcamos en aquellos maravillosos años sesenta/setenta.
Ha pasado mucho tiempo y no es cosa de ponernos nostálgicos con aquello de que todo tiempo pasado fue mejor, pero es que en este caso le viene como un guante la letra de la canción. Cierto es que ahora los que caminan hacia las plazas puede que sean felices, pero son muchos menos.
En la plaza de Vistalegre de Madrid se anuncia el próximo fin de semana uno de sus ya clásicos comienzos de la temporada taurina. Y lo hace con un mano a mano de interés: El Cid, en su año de despedida, y Emilio de Justo, se enfrentarán en mano a mano ante seis toros de tres distintas ganaderías, siendo una de ellas la Victorino Martín, un hierro que a los dos les ha proporcionado muy mucho de su prestigio. Deseamos que sea un buen comienzo, un caminito feliz para los aficionados.
Después vendrá, ya en marzo, Olivenza -también Illescas en su feria del milagro- y ahí el recorrido será totalmente feliz para muchos, dado que anuncian a las máximas figuras y eso le da un sentido especial a todos aquellos que se desplazan a esas localidades. Estos, más que otros, son felices de verdad por el simple hecho de ir.
De inmediato llega el turno a la primera feria de las de máxima categoría. En este caso por el número de carteles, la categoría de la plaza y, sobre todo, por la posibilidad de ver encastes y toreros que no se ven en las ferias del glamour. Caminito hacia Valencia es un destino feliz y completo, pues puedes ir hacia la plaza o hacia la playa.
Como se puede ver, en estos días los aficionados ya están preparando la almohadilla para con ella dirigirse a la plaza. Pero les aseguro que son muchos menos que en aquella época. Y llegado el verano, cuando más festejos se anuncian, también. Lo que sí permanece es el caminito de la playa en plan masivo.
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