Están abriendo heridas ya cerradas, descargando odio, rencor y sed de venganza, que es muy diferente a pedir justicia, pues desconocen los conceptos perdón, reconciliación, hombría de bien, justicia y solo admiten, como es propio en los cobardes, el odio, el rencor, la venganza, el crimen y la injusticia.
Quieren otro enfrentamiento y lo tendrán
Rafael Comino Delgado
Catedrátco de la Universidad de Cádiz
En Cataluña, el separatismo ha divido la sociedad hasta límites muy peligrosos, con amigos que dejan de serlo, familiares que dejan de hablarse, etc. Y en la totalidad del Estado español la ley de Memoria histórica del nefasto Zapatero, que el pusilánime Rajoy no quiso abolir (algún día la historia juzgará al Sr. Rajoy y no saldrá muy bien parado, pues la situación de caos total que vive España, en gran medida, es culpa suya por omisión y por no haber cumplido todo lo que prometió en su programa electoral cuando obtuvo mayoría absoluta) igualmente tiene a los ciudadanos divididos, con creciente estado de hostilidad, e incluso odio, entre unos y otros, porque dicha ley, en realidad, es expresión de un deseo irrefrenable de reescribir la historia a gusto de una parte, mintiendo hasta la saciedad, para así poder vejar, humillar y demonizar a los ganadores de la guerra, a los que salvaron a España de ser entregada a las garras del criminal comunismo, es decir a Stalin. Bueno, cuando decimos que hubieran entregado España a Stalin, queremos decir, lo que hubiese quedado, porque si llega a ganar el Frente Popular los fusilamientos se hubiesen contado por millones y, desde luego no hubiese quedado ni una Iglesia ni un religioso de pie.
Bien pues, debido a esa maldita ley, que solo ha servido para gastar dinero y generar odio, cada día salen nuevas noticias en relación con la profanación de la tumba de Franco y el desmantelamiento del Valle de los Caídos (incluida la demolición de la Cruz), que posiblemente lo conseguirán, sin embargo los impulsores están ignorando algo mucho más importante de lo que a ellos les pueda parecer, y por tanto lo pagaran caro, porque no están teniendo en cuenta que, "los sentimientos religiosos y políticos son sagrados y se deben respetar siempre que respeten los sentimientos de los demás".
Los que se empeñan en destruir el Valle, es decir, el Frente formado por rojos, separatistas y terroristas (Frente ROSETE) han convertido la mentira en su principal arma, para no respetar dichos sentimientos ni tener en cuenta que ese monumento existe porque unos cobardes criminales, correligionarios suyos, el Frente Popular, mataban por pensar diferente (por eso asesinaron a Calvo Sotelo, en 1936), quemaban conventos, violaban monjas que después mataban, también torturaban y mataban religiosos y al que estuviese en misa.
Como serian que don Manuel Azaña les llamó "chusma", "incompetentes, tabernarios de codicia y botín, sin ninguna idea alta". También refiriéndose a ellos, don Jacinto Benavente dijo, "En nación alguna, en revolución alguna del mundo, se han juntado, para ignominia del pueblo, hombres más desalmados, más incapaces intelectual y moralmente...cobardes hasta temer más el triunfo de los suyos que el de los enemigos...".
Como consecuencia se desencadenó una guerra, provocada con premeditación y alevosía por los violadores y asesinos, por aquella chusma, como decía, correligionarios de los que ahora quieren desmantelar el Valle, guerra que perdieron, y quien la ganó tuvo la grandeza de espíritu de perdonar y mandar construir un monumento, símbolo de perdón por ambas partes y de reconciliación para siempre. Y es precisamente esto último lo que más les molesta, porque saben que vencer y perdonar es vencer dos veces, y además se sienten infinitamente inferiores, intelectual, ética y moralmente al ganador. Eso no lo soportan.
Es por ello que en este caso hay una mezcla de sentimientos religiosos y políticos muy profundos, muy intensos que, constantemente son humillados, vejados, ofendidos por los que están pidiendo a gritos otro enfrentamiento.
Están abriendo heridas ya cerradas, descargando odio, rencor y sed de venganza, que es muy diferente a pedir justicia, pues desconocen los conceptos perdón, reconciliación, hombría de bien, justicia y solo admiten, como es propio en los cobardes, el odio, el rencor, la venganza, el crimen y la injusticia.
Los que ahora quieren desmantelar el Valle están actuando exactamente como actuaron los que provocaron la guerra, pero naturalmente con otro estilo, puesto que estamos en el siglo XXI avanzado.
Y eso es una gran injusticia que no puede ni debe quedar impune, por ello decimos que, "quieren otro enfrentamiento y lo tendrán", porque ante tanta mentira, injusticia, ante tanta vejación, ante tanta ofensa y humillación siempre se acaba reaccionando, y los cobardes que mienten, ofenden, los que humillan y cometen las injusticias, acaban pagándolas.
Si faltaba algo, como en el 36, la izquierda, liderada por el PSOE, se ha aliado con los separatistas, que lo han dicho muy claro: ¡hay que atacar al Estado, con el que están en guerra! Así pasó en aquella ocasión y así pasará en esta. Y si no, al tiempo.
En conclusión, el presidente del gobierno, don Pedro Sánchez, aliado con comunistas, separatistas, terroristas y todo tipo de radicales, está llevando a España a otra guerra civil.
Todos los aliados del presidente piensan que cuanto peor mejor, es decir, cuanto peor le vaya a España mejor les irá a ellos. A los separatistas y terroristas, que quieren la independencia, es lógico que cuanto más débil sea el Estado más fácil tendrán lograr su objetivo. Los comunistas, o mejor digamos los marxistas, puesto que una gran mayoría del PSOE es marxista, quieren hacer desparecer la civilización occidental que disfrutamos y sustituirla por una dictadura leninista, estalinista tipo la antigua URSS, por lo que también cuanto más débil sea la España actual más fácil lo tendrán ellos.
Hay que tener en cuenta que en realidad no gobierna Pedro Sánchez, sino Pablo Iglesias, Torra, ERC, Bildu, y el PNV, todos enemigos de España, de los que nada bueno se puede esperar.
Entre ellos destaca Pablo Iglesias, un leninista, estalinista, si cabe más radical y perverso. Un hombre inteligente, que se expresa bien, pero su mente y su alma son un inmenso manantial de maldad que, como hizo Lenin, creo sería capaz de asesinar a millones de conciudadanos (digamos de seres humanos, conciudadanos o no) para quedarse él mandando, esclavizando a los que no le idolatraran por ley. Igual que Marx, Lenin y Stalin, Iglesias, desprecia profundamente a la clase obrera, a la que considera inferior, incapaz de pensar, que solo le sirve para obtener su voto y tenerles como vasallos. No me cabe duda de que este sujeto sería feliz si pudiera disponer de checas para torturar y luego asesinar a toda la derecha, a todos los cristianos (mejor a todos los creyentes), y en general, a todos los que no se sometieran a su dictadura.
Alexander Solzhenitsyn, que sabía muy bien lo que era el comunismo, puesto que sufrió lo suyo en los Gulags (campos de trabajos forzados, y exterminio, en la Siberia), dijo: "Ser comunista, inteligente y bueno es totalmente imposible. El que es inteligente y bueno no es comunista. El que es comunista y bueno no es inteligente. Y por supuesto, el que es comunista e inteligente, es imposible que sea bueno". Iglesias es inteligente, comunista y el paradigma de la maldad.
En el 36 también llevó a la guerra un socialista, Francisco Largo Caballero, aliado con la misma chusma, pero de entonces. Y tanto Largo Caballero como sus aliados murieron casi todos exiliados, si bien antes de exiliarse robaron el Banco de España y todo lo que allí había. Es posible que Sánchez y los que le están apoyando también mueran exiliados, aunque esperemos que ahora no vuelvan a robar el Banco de España (bastante han robado ya), si bien podría repetirse. A veces la historia se repite con gran similitud.
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