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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

miércoles, 8 de enero de 2020

Camino y Sevilla/ por Rafael Comino Delgado



Este año es el centenario de la muerte de Joselito el Gallo y Sevilla deberá homenajearle como merece (¡qué pena que el cartel de la feria taurina-si así se puede llamar-no haga alusión alguna a Joselito), lo cual es lógico, pero el maestro Camino cumple 80 años (el 14-XII-20) y 60 de alternativa (el 17-IV-20). 

Diego Puerta, Paco Camino y Curro Romero

Camino y Sevilla

Rafael Comino Delgado
Que el maestro Paco Camino ha sido un figurón del torero, un torero de época, un torero referente para aficionados y, sobre todo, para profesionales, uno de los toreros más importantes de la historia, no cabe la menor duda. Donde se hable de toros con criterio así se reconocerá, menos en Sevilla a nivel general, porque luego particularmente y en privado, los buenos aficionados sevillanos así lo reconocen. 
Y el maestro Camino es sevillano, nacido en Camas, uno de los pueblos más taurinos de Sevilla sin la más mínima duda. ¿Cuántos buenos toreros han salido de Camas?  Muy larga seria la lista si pretendiéramos hacerla.
Creemos que, en general, Sevilla tiene predilección por Joselito, Belmonte, Pepe Luis y Curro Romero, porque incluso a Manuel Jiménez “Chicuelo” y a Pepín Martín Vázquez, tal vez, no se les haya dado su sitio, aun habiéndoles reconocido su gran mérito, pero pensamos que han sido insuficientemente valorados. Y desde luego Paco Camino no ha sido valorado en Sevilla de acuerdo con su enorme dimensión de gran torero.

Y ¿por qué siendo sevillano no se le ha reconocido en toda su dimensión y valía? Pues tendríamos que decir, porque así son las cosas en cualquier ámbito de la vida. No quiero decir así son las cosas en Sevilla, porque eso ocurre en todas partes. Cada población, cada sociedad tiene sus peculiaridades, ni mejores ni peores que la demás.

Pero profundizando un poco en el tema, quizás haya unas causas que puedan explicar tal actitud de la afición sevillana con el maestro Camino.
Paco Camino fue un niño prodigio (“El Niño Sabio de Camas” lo definió don Gonzalo Carvajal en 1958, y “El Mozart del Toreo” don Carlos Abella, en 1994), pues debutó de luces con 13 años en Cumbres Mayores (Huelva) y luego por circunstancias de la vida se hizo figura de los novilleros en Zaragoza y Barcelona. 

De novillero vino a la Maestranza, e incluso el 18 de julio de 1959 cortó cuatro orejas, pero ya era figura novilleril reconocida fuera de Sevilla, y tal vez eso nos les gustó. Quizás si se hubiera hecho figura en Sevilla le hubieran apreciado más. La alternativa no la tomó en Sevilla, a pesar de ser sevillano y figura, sino que la tomó en Valencia, lo que quizás tampoco gustó mucho a la afición sevillana. De matador triunfó muchas veces en la Maestranza, incluso le cortó dos orejas a un toro de Cuadri el 19 de abril de 1966, y otras dos el día 4 de mayo de 1973 a uno de Núñez, pero a pesar de ello nunca fue un torero preferido por los sevillanos. Incluso algunas temporadas se quedó fuera de la feria de abril.


A Madrid no fue de novillero, presentándose ya de matador en 1961, lo cual tampoco gusto a la afición madrileña, pero en 1963 logró entrar definitivamente en Madrid, que acabó siendo una de sus plazas preferidas, y donde más se le apreció. Es histórica la fecha del 18 de mayo de 1963, con los toros de Galache, la del 4 de junio del 1970 cuando cortó ocho orejas en la corrida de la Beneficencia, y también la del 23 de mayo del 1972, cuando se le pidió el rabo de un toro de Arranz, con mucha fuerza, y si no se le concedió fue porque el día antes se le había concedido a Palomo Linares, y ello generó mucha polémica.

Se puede decir que, al menos desde 1963 para acá, ha sido el torero más apreciado en Madrid, donde triunfó muchísimas veces (tiene 12 puertas grandes y 48 orejas -el que más orejas ha cortado en las Ventas-. 


En Méjico, podemos decir, sin temor a equivocarnos, que junto a Manolete han sido los dos toreros españoles con más cartel, aun reconociendo que actualmente José Tomás y Ponce gozan de enorme cartel.
Este año es el centenario de la muerte de Joselito el Gallo y Sevilla deberá homenajearle como merece (¡qué pena que el cartel de la feria taurina-si así se puede llamar-no haga alusión alguna a Joselito), lo cual es lógico, pero el maestro Camino cumple 80 años (el 14-XII-20) y 60 de alternativa (el 17-IV-20). Me imagino que el mundo del Toreo-en el que incluyo a los aficionados- también lo tendrá en cuenta y le hará sus homenajes. A ver si Sevilla lo recuerda y le rinde el magno homenaje que le debe.


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