".. ¿a quién fastidiar con más o menos disimulo para que el Barcelona se meta segundo? Pues al Girona, evidentemente, equipo emergente donde los haya y que está haciendo un campeonato de escándalo. Al Girona, sí, he dicho al Girona.."
Desviando el tiro
Javier Vázquez
La Galerna/4 febrero, 2024
Ahora que el FC Negreilona está en el ojo del huracán por todos los frentes habidos y por haber, ahora que Xavi Hernández va de ridículo en ridículo hasta el esperpento final justificando su propia ineptitud para manejar un vestuario de verdad, no los de allende los desiertos, ahora que el señor Laporta sale por peteneras justificando los pagos durante más de 20 años al vicepresidente de los árbitros diciendo mamarrachadas falsas sobre el Real Madrid (véase el artículo de Paco Palomares en La Galerna), ahora que el patio está como está, ayer en Montilivi el trencilla de turno fuerza que el Girona empate contra la Real y el público empieza a cantar el “así, así, así, gana el Madrid”. Lo que hace el relato no lo consigue ni el señor que da a la máquina que saca las bolas del Euromillón. Ahora resulta que si el arbitraje es desfavorable al Girona es para favorecer al Real Madrid… ¡¡¡al Real Madrid!!! Al club más denostado, agredido, vilipendiado y perjudicado por el colectivo arbitral desde tiempos de Mari Castaña. Al Real Madrid, madre mía… al Real Madrid…
No se da cuenta el común de los mortales de un pequeño detalle.
El relato mediático desvía el tiro hacia Chamartín con el único objetivo de hacer culpable de los males gerundenses al club de La Castellana cuando es exactamente al revés.
Veamos, el contrato que la Real Federación Española de Fútbol “fúrgol”, en lenguaje villarístico, repito, el contrato firmado con Arabia Saudí para la celebración esperpéntica (football is for the fans, recuerden) de la Supercopa de España en la “cercana” península arábiga contiene una cláusula penalizadora por la que, si Real Madrid o Barcelona no están en el torneo, los árabes (que no son tontos) pagan una ingente cantidad de dinero menos a la federación, unos 5 millones de euros más o menos, que para unas bravas y unas cañas en Lavapiés da, digo yo.
Pongamos los datos encima de la mesa, aunque ya los conozcan ustedes, excelsos lectores. La Supercopa de España la juegan el campeón y subcampeón de liga y el campeón y subcampeón de Copa de España. En este escenario, el Real Madrid, eliminado de la Copa de España y con un margen de 10 puntos (si ganamos al Atlético en el derby) con el Barcelona y 13 con el Atlético, tiene muchas posibilidades de quedar entre los dos primeros de la tabla, dato objetivo salvo catástrofe final a falta de 15 partidos. El Barcelona, eliminado de la Copa de España, se encuentra, en estos momentos, a 6 puntos del Girona.
Pues bien, ¿a quién fastidiar con más o menos disimulo para que el Barcelona se meta segundo? Pues al Girona, evidentemente, equipo emergente donde los haya y que está haciendo un campeonato de escándalo. Al Girona, sí, he dicho al Girona. Los arbitrajes que pueda tener en contra a partir de ahora no intentan favorecer al Real Madrid como la prensa del “movimiento” y los haters de internet quieren hacernos ver, esos arbitrajes a quien favorecen es al que siempre han favorecido, al Barcelona del jardinero Xavi Hernández y del comisionista Laporta. El objetivo es no perder la pasta arábiga y que el FC Negreilona esté en la próxima edición de la Supercopa. No se dejen engañar, queridos lectores, es el único objetivo, no perder la pasta. ¿Que la competición se adultera? No pasa nada, llevamos años adulterándola (pensarán). ¿Que el Girona no llega a clasificarse como verdadera mente se merece? No pasa nada, ya se acostumbrará. Aquí lo importante es cobrar de los árabes y a correr.
Repito, están desviando el tiro, que no les engañen.
Como digo siempre, no olviden una cosa… ser del Real Madrid es lo mejor que una persona puede ser en la vida… ¡Hala Madrid!
Getty Images
No hay comentarios:
Publicar un comentario