Veles e Vents fue el escenario en el que Cope Valencia celebró por segundo año consecutivo sus VII Premios cuyo objetivo es reconocer el trabajo y el esfuerzo tanto de personas, entidades, e instituciones dedicados a mejorar el día a día en la Comunitat.
Enrique Ponce hiló un discurso repleto de símiles taurinos. “Con permiso de la presidencia y del más bello palco de honor que pueda existir, me presento hoy, …”
Excepcional discurso de Enrique Ponce
J.A. del Moral · 16/06/2018
Veles e Vents fue el escenario en el que Cope Valencia celebró por segundo año consecutivo sus VII Premios cuyo objetivo es reconocer el trabajo y el esfuerzo tanto de personas, entidades, e instituciones dedicados a mejorar el día a día en la Comunitat.
Los colegios diocesanos de Valencia, la Fundación IVO, Paco López la Fundación Columbus, el Hotel Balneario las Arenas, la Escuela Técnica superior de caminos, canales y puertos, la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad, el catedrático de seguridad vial, Luis Montoro, el Hospital IMED Valencia, el director del Instituto de Ciencias de la Vida de la Universidad Católica, Justo Aznar, y el proyecto cultural y gastronómico de Heineken España en el Veles e Vents y el maestro Enrique Ponce, conforman los doce galardonados de esta edición.
El acto lo cerró Enrique Ponce con un conmovedor discurso en el que trenzó el valencialismo, la vida, la obra y el toreo con todas sus esencias
TEXTO INTEGRO DE SU DISCURSO QUE MERECE LA PENA LEER
Sr. Presidente de la Generalitat Valenciana.
Sres. Consellers.
Diputado de Asuntos Taurinos
Sras. y Sres. Políticos de los distintos grupos del arco parlamentario y del Excelentísimo Ayuntamiento de Valencia.
Sr. Cardenal Don Antonio Cañizares.
Compañeros distinguidos y premiados.
Sr. Director de La Cadena COPE.
Sras. Y Sres. Amigos.
Bona Nit. Buenas Noches.
En primer lugar dar mi mas sincera enhorabuena a todos los premiados y distinguidos en este acto.
Enhorabuena a todos y en nombre de todos muchas gracias y enhorabuena a Cadena Cope Valencia, por las distinciones y por la organización del acto.
En mi caso podría decir que agradezco esta distinción que me concede Cadena COPE por muchos y muy variados argumentos, pero después de meditar a cerca de ello he llegado a la conclusión que el mas importante y el que hace que me sienta tan satisfecho esta tarde-noche aquí, en este marco tan atractivo, es el de sentirme valenciano.
Para mi es un orgullo inigualable, un honor cuando mi nombre viaja unido a mi pueblo, Chiva y a mi Valencia.
Por lo tanto estoy muy agradecido a Cope Valencia por haber pensado en mi para esta distinción tan señera, pero, sobre todo, por haber pensado en un torero para distinguirlo como valenciano del año ante tantas y tan importantes personalidades que están hoy aquí presentes.
Yo soy eso, un toreo que se reivindica a cada momento como tal y que ante ustedes vuelvo a expresar mi condición sustantiva como ser humano, como persona y como artista.
Soy torero, desde que tengo uso de razón, de la mano de mi abuelo Leandro, quise ser torero y jamás pensé en ser otra cosa, renuncié a una infancia y a una juventud convencional, por ser lo que quería ser: Torero.
Ser torero no expresa únicamente una actividad o profesión, no , ser toreo es ante todo una actitud ante la existencia, una forma de entender la vida y caminar su vereda de esa manera y, ante todo, una manera de enfrentarse a la muerte que se esconde en cualquier tarde y lugar, incluso al final del camino en la dorada senectud.
No voy a pedir que lo comprendan, ni que lo compartan, ni mucho menos, de hecho a través de la historia la tauromaquia ha sido contestada con la misma pasión que ha sido defendida: Hoy día también.
Pero miren, lo que sí les aseguro es que ser torero es consustancial al ser, no al estar, al ser, al ente, al individuo que desea ser y no simplemente estar, al ser humano que pretende exponer sus emociones al límite con gallardía; en la frontera entre lo conocido y el misterio que nos permite crear: En mi caso, una obra efímera e irrepetible que solamente se mantiene en la fluidez emocional del receptor.
Soy valenciano, y por supuesto que me reivindico constantemente como tal, de Chiva, mi pueblo tan querido.
Soy valenciano de esa Valencia castellano parlante que en ocasiones se siente un poco ninguneada.
Soy valenciano que siente Valencia intensamente y no renunciará jamás a sentirla de otra manera, que lleva su Señera en el corazón, que entona su himno en esa otra lengua que también es propia de los valencianos y que Cervantes la utilizara para inmortalizar una historia y unos personajes que reflejan la condición humana en todas sus variables posibles.
<< Ladran, Sancho, luego cabalgamos>>
Un poeta valenciano, el oriolano Miguel Hernández, el poeta del pueblo, también cultivó las cosas del alma, la justica social y las letras en la lengua Castellana.
En el toro de trágico cuerno;
En el susurro de la mies;
En el sutil ciprés eterno.
Otro poeta inmenso, de Oliva, es mi amigo el académico Paco Brines.
Brines, en su obra, juega con el tiempo, la existencia y la muerte.
Me dijo en cierta ocasión:
…el toreo, al igual que la poesía, es ritmo. Si no hay ritmo no hay poesía, si no hay ritmo no hay toreo..
Yo, como valenciano, siempre he vivido con el compromiso de representar a mi tierra, a mi gente, en cualquier momento y lugar.
La responsabilidad fue grande y mi objetivo estuvo enfocado en conseguir estar a la altura de la excelencia mas representativa de nuestra gente, de su trabajo, ese que hoy, aquí , quiere distinguir Cadena Cope: Por este motivo dedico este premio a los que brillaron en el éxito y a los que trabajan a diario bajo la presión infinita y la incertidumbre de tener que llevar a sus hogares el sustento y la felicidad.
Por todos ellos y por los toreros valencianos, en su nombre, recojo emocionado esta distinción.
Moltes gracies, Muchas gracias.
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